MÚSICA

Crítica de discos: Yo La Tengo, James Brandon Lewis, Paula Cendejas, Quasi, Mozart Estate y Robert Forster

El grupo de New Jersey refina su diálogo entre la catarsis eléctrica y la emotividad en su nuevo álbum, integrado por canciones que apuntan a las convulsiones mundanas, el paso del tiempo y la mortalidad

Los nuevos elepés de Quasi, Paula Cendejas, Mozart Estate, James Brandon Lewis y Robert Forster, también reseñados

James McNew (de pie), Ira Kaplan y Georgia Hubley: Yo La Tengo.

James McNew (de pie), Ira Kaplan y Georgia Hubley: Yo La Tengo. / CHERYL DUNN

Un bálsamo contra la angustia global

Es difícil llegar a dilucidar si estos tiempos son realmente turbios, o lo son porque lo estamos diciendo constantemente (o por ambas cosas). Sea como sea, todo ello acaba construyendo un estado mental que se proyecta en numerosas obras musicales. La percepción de un ambiente enrarecido se manifiesta, sí, en este nuevo disco de Yo La Tengo, de título elocuente. “Este mundo estúpido / me está matando / Este mundo estúpido / es todo lo que tenemos”, canta Ira Kaplan con peligrosa suavidad, casi sepultado por la tormenta eléctrica.

Es el 17º álbum de Yo La Tengo y se diría que, a estas alturas de su carrera, expresa una simbiosis de crudeza y emotividad del más extremo refinamiento. Si en There’s A Riot Goin’ On (2018), la tensión era un reflejo enojado del rampante trumpismo, aquí se advierte una motivación más honda, espiritual incluso. Y, en ciertos momentos, una propensión a los espacios abiertos y a la libertad ejecutiva, con margen para la improvisación instrumental, que no parece muy desligada del ejercicio entre ambient y post-rock que supuso su álbum instrumental de pandemia, We Have Amnesia Sometimes (2020).

Son ellos tres, sin productor que medie, tocando mayormente en directo, midiéndose con fuerzas más grandes que ellos y paladeando el embate. Teniéndolas con una angustia existencial y procediendo a domar la electricidad amorosamente. Ahí esta ese tour de force de bienvenida llamado Sinatra Drive Breakdown, con sus siete minutos largos de distorsiones y cacofonías ‘velvetianas’ a cuenta del bulevar sito en su querida localidad natal de Hoboken, New Jersey. Texto catatónico, con vistas al fin de los tiempos, pero cerrando los ojos y librándose al sentimiento: “Veo algo recuperado y perdido otra vez / Tus ojos, tu amor / Hasta que nos rompamos, hasta que nos rompamos”.

This Stupid World nos reserva en adelante una secuencia de canciones que basculan entre la estampida sónica de Fallout, sobre capas enterradas de melodía, y el canto flotante de Georgia Hubley en Aselestine. Las alusiones al paso del tiempo y a la mortalidad se dejan oír enfáticamente en Until It Happens, viñeta polirrítmica en la que Kaplan se pone muy explícito: “Prepárate para morir / prepárate mientras haya tiempo”.

Pero, con todo ello, el grupo suena más apaciguador que apocalíptico, transmitiendo un ánimo reconciliado con el destino y un deleite con sus recursos como músicos. También en Apology Letter, suerte de examen de conciencia a cielo abierto, y en la envolvente pieza de cierre, Miles Away, donde la voz de Hubley es el bálsamo que nos acompaña hacia la tranquilidad de espíritu. Así es esta versión depurada de Yo La Tengo, adulta y, por ello, más consciente que nunca de la necesidad de disfrutar de cada nota y cada disonancia. Jordi Bianciotto

'This Stupid World'

Yo La Tengo 

Matador-Everlasting-Popstock!

Rock

★★★★ 

Canciones furiosas y bellas

En su décimo elepé de estudio, y primero en una década, Sam Coomes (voz, guitarra y órgano desquiciado) y Janet Weiss (voz y batería supersónica) redefinen el concepto de indie rock con una docena de canciones furiosas y bellas nacidas de la pandemia que desafían las convenciones estilísticas. Aquí hay psicodelia, blues-rock garajero, pop retro y hasta prog-rock, pero todo está tamizado por el filtro de una personalidad sonora única. Gran disco. Rafael Tapounet

'Breaking The Balls Of History'

Quasi 

Sub Pop

Rock indie

★★★★ 

Variopinto catálogo de golosinas melódicas

Lawrence, esa incomprendida lumbrera del pop: primero al frente de Felt y Denim, y luego con Go-Kart Mozart, banda que ahora, rebautizada, nos suministra este variopinto catálogo de golosinas melódicas, estribillos catatónicos y rimas con retranca. Un festín en el que maneja con ingenio los vestigios del bubblegum pop y el glam, del brit-pop y el music hall, y compite en excentricidad con Sparks. Más allá de cierto histrionismo, deja un adorable rastro naíf. Jordi Bianciotto

'Pop-up! Ker-ching! And The Possibilities Of Modern Shopping'

Mozart Estate 

Cherry Red Records

Pop

★★★★ 

Viajes al más allá de los padres del 'free' jazz

A ratos parece punk. Otros, es como si conectara con los viajes al más allá de los padres del free jazz. También hay baladas que te derriten. Ahora es agreste y luego un bálsamo. James Brandon Lewis cambia el formato clásico de grupo de jazz por un trío de saxo, violonchelo eléctrico y batería que, cuando se enchufa, suena como una banda de rock de garaje. Pero la esencia es la misma. Brandon Lewis lo dice todo con una convicción tal que cuando acaba, vienen ganas de gritar "¡hell yeah!" y "amén". Todo a la vez. Roger Roca

'The Eye Of I'

James Brandon Lewis 

ANTI-Records

Jazz

★★★★ 

Virtudes para arrasar en la pista

Tras una previa despampanante, con singles abanderados por Alizzz, Paula Cendejas ha publicado un primer elepé que aqueja la alargada sombra de sus inicios. Entre ritmos caribeños (Cosquillas) y ecos techno (Ojos coloraos), parece que FOMO tiene virtudes para arrasar en la pista, pero en realidad se queda a medias. Es interesante en la intención, pero correcto en la ejecución. Ahora bien, no hay nada que la dulce voz de la artista no pueda salvar. Pedro del Corral

'FOMO'

Paula Cendejas

Warner Music

R&B

★★★ 

Melodías reflexivas

Karin Bäumler, la mujer de Forster, padece un cáncer que ha dado un buen susto a la familia. Así que aquí ellos dos se juntan con hijos y amigos y tocan y cantan sin ponerse tristes, aunque sí reflexivos, a las vicisitudes de la vida. Arrancan plantando cara al bicho con energía (She’s A Fighter) y a mitad de camino dejan claro que la música, tan solo un mero concierto, ya es una buena razón para vivir (There’s A Reason). La maestría melódica del ex Go-Betweens está siempre ahí. 

‘The Candle and the Flame’

Robert Forster

Tapete Records 

Pop/Rock

★★★★

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