MODA

El universo infinito de Yayoi Kusama se fusiona con Louis Vuitton

La firma parisina y la artista japonesa vuelven a colaborar juntos

Algunas artistas, entre ellas la española Saray Luis Martin, reinterpretan la colección

Yayoi Kusama, en un fotograma del documental Kusama: Infinito.

Yayoi Kusama, en un fotograma del documental Kusama: Infinito. / Kusama: Infinito

María G. San Narciso

María G. San Narciso

El universo de Louis Vuitton podría parecer, a simple vista, que no casa con el vanguardismo de Yayoi Kusama, una de las artistas más importantes de los últimos tiempos. Pero la apreciación mutua de la artesanía y la excelencia es lo que, al parecer, les ha unido por segunda vez en una colección llamativa y cuya puesta en escena ha impactado tanto como lo ha hecho la carrera de la japonesa.

Este mes de enero, cientos de viandantes empezaron a subir a las redes tres réplicas plásticas, robóticas o virtuales de la propia Kusama. Se trata de tres instalaciones diferentes, pero parecidas entre sí, que se han instalado en Nueva York, París y Tokio. Hay una Yayoi que pinta en los escaparates de la Quinta Avenida; otra gigante que sostiene uno de los edificios más grandes de Francia; y una tercera cuya cabeza sobresale en 3D de un gran edificio de la capital japonesa con algunas de sus obras. Seguirá en Londres.

La colaboración se celebra dentro de un paisaje virtual totalmente inmersivo, que abarca desde escaparates hasta pop-ups, pasando por vallas publicitarias anamórficas, las experiencias de realidad aumentada, un juego de realidad extendida y una campaña publicitaria dedicada. De esta forma, los lunares de Kusama sobre las prendas y accesorios de Louis Vuitton no pasan desapercibidos, si es que lo pasarían en cualquier formato.

La firma también ha elegido a algunas artistas para reinterpretar esta colección, como la ilustradora española Saray Luis Martín, una enamorada de Japón y de la obra de la japonesa. "Me gusta mucho el enfoque que le da al arte desde sus inicios. Mucha gente se cree que se limita a pintar topos, pero no. Va mucho más allá. Tiene un discurso muchísimo más profundo", asegura Martín a este periódico, que recalca cómo la artista plasma sus alucinaciones, su imaginario, en un formato físico.

"Su trabajo lleva tres pasos diferentes: físico-mente-físico. En nuestro caso es mente-físico", añade Martín -en la fotografía superior aparece con un bolso de la colección-, que recalca también su capacidad para fusionarse con una firma de moda de una forma que no queda impostada, como les ocurre a otros artistas en diferentes colaboraciones, mucho más rebuscadas.

Una relación larga

La firma parisina explica que la última vez que Louis Vuitton pudo contemplar la magia de la artista fue en 2012. Antes, en el año 2006, Marc Jacobs, entonces director creativo, conoció a Yayoi Kusama en Tokio. Como coleccionista de arte, admiraba la obra de Kusama; mientras que ella, que incluyó numerosas performances en su trabajo que examinaban ropa y cuerpo, sentía un enorme respeto por la creatividad por él. "El carácter obsesivo y la inocencia de su trabajo me emocionaron. Consigue compartir su visión del mundo con nosotros", aseguró por aquel entonces Jacobs.

Durante los siguientes diez años desde esa colaboración, la firma y la artista mantuvieron una relación que evolucionó y se amplió con conversaciones continuadas. Ahora, "los objetos talismán de Kusama, los motivos y las imaginaciones del infinito se apoderan de la Maison y de todas sus categorías de productos". Van desde los bolsos a la ropa de hombre y mujer, pasando por accesorios, fragancias y zapatos.

"A su vez, algunas de las piezas emblemáticas de Louis Vuitton han experimentado una evolución y han pasado a ser parte de su propio mundo y de la transformación de Kusama", añaden. En aquel 2012, la artista escogió un baúl de la firma para pintarlo a mano con sus característicos lunares. Ahora, señalan que ha supervisado personalmente cada encarnación de esos lunares, así como todos los objetos del proyecto, movidos con precisión milimétrica y con pinceladas reflejadas con un detalle insólito, conservando su textura y peso intactos.

Las colecciones aparecen en dos partes: la primera oleada se lanzó este mes de enero; la segunda estará disponible en las tiendas de Louis Vuitton a partir del 31 de marzo.

Reconocimiento tardío

"Es la artista viva más importante", recalcan el documental de Heather Lenz Una Kusama: Infinita (disponible en Filmin), que muestra cómo logró liberarse de su familia, cerrada y complicada, y de la sociedad en la que se crió, para emigrar a Nueva York. Allí se reveló contra el sexismo, el racismo y su enfermedad mental, que en más de una ocasión la llevaron a intentar quitarse la vida, para llevar su visión artística a la escena mundial. Ahora vive en un hospital psiquiátrico y continúa creando arte.

Gran parte de la obra de Kusama pretende recrear esa pérdida de la individualidad en un concepto de espacio que cambia y que se expande muy rápido. Ahora, algunas de sus obsesiones estarán en las piezas más simbólicas de Louis Vuitton.