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Entre el terror gótico y el 'romantasy'

El éxito de la serie 'Blackwater' y de Rebecca Yarros demuestra la importancia de la literatura fantástica en el consumo general de libros

La escritora Rebecca Yarros

La escritora Rebecca Yarros / EPE

Dejamos atrás el Sant Jordi-24 y nos preparamos para nuevas ferias del libro como las de Valencia y Madrid. La primavera y el verano son un no parar de citas donde lectores y autores se van de fiesta de la mano de los libreros. Son días de tendencias. O, mejor dicho, de demostración de que aquellas tendencias de las que, en ocasiones, hablamos en los medios se consolidan.

Es el caso de la serie Blackwater, del desaparecido Michael McDowell, que se convirtió el pasado 23 de abril, y se convertirá en las ferias que tienen que llegar, en un fenómeno de ventas.

Lo anunció, avisó, alertó, el pasado mes de febrero, uno de los periodistas españoles que más sabe sobre literatura fantástica, Ernest Alós. Invitaba a que los lectores hicieran justicia con un escritor desaparecido de forma prematura a causa del sida en 1999. Una firma reconocida y recomendada por el propio Stephen King.

Los libros, publicados por la siempre intuitiva Blackie Books, se escribieron en 1983 y han sido editados en seis títulos de bolsillo, muy asequibles, recuperando aquella moda de la novela folletín tan del siglo XIX. Igual que la moda de Rebecca Yarros en relación con la literatura llamémosla juvenil. Hacía tiempo que no se producía un fenómeno de obsesión librera en ese género, desde la época del Harry Potter de J. K. Rowling. Aluvión de gente joven en busca de sus historias, entre románticas y fantasiosas, el romantasy, un género que los libreros ya tienen en cuenta.

Sin duda, son las ferias donde aparecen las tendencias. La primavera, ya saben. En la otra época de gran venta, final de año, se consumen aquellos libros que se han asentado durante toda la temporada. Así que, estas Navidades tendremos a la saga Blackwater y a Rebecca Yarros por un tubo. Este no es un detalle menor. Demuestra la importancia de la literatura fantástica en el consumo general de libros.