El rover de la misión india Chandrayaan-3 podría haber detectado actividad sísmica en la Luna

Es posible que la misión india Chandrayaan-3 haya registrado los primeros datos sísmicos en la Luna desde la década de 1970, cuando lo habían logrado las misiones Apolo de la NASA: de confirmarse que se trata de datos sísmicos naturales, los nuevos registros podrían ayudar a los científicos a comprender las características ocultas sobre la estructura interna de la Luna.

Como parte de sus actividades de análisis y exploración del suelo lunar en el polo sur de nuestro satélite natural, el rover de la misión Chandrayaan-3 de la India registró una serie de movimientos telúricos sobre fines del mes de agosto, que podrían ser los primeros datos de actividad sísmica en la Luna identificados en los últimos 45 años. Sin embargo, aún debe confirmarse el origen natural de las vibraciones. 

Los primeros datos desde 1970

Sabemos que entre 1972 y 1977, los sismógrafos colocados por la misión Apolo de la NASA detectaron 28 sismos lunares. Algunos de ellos llegaron hasta los 5,5 grados en la escala de Richter, según informa la propia agencia espacial estadounidense. En la Tierra, un sismo de esa magnitud podría agrietar paredes y movilizar piezas de mobiliario de gran peso.

Ahora, la Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO, según las siglas en inglés) ha comunicado mediante una nota de prensa que el rover de la misión Chandrayaan 3 ha registrado movimientos en el suelo lunar que podrían tratarse de sismos lunares. Vale recordar que Chandrayaan 3 alunizó en el polo sur del satélite el pasado 23 de agosto, luego de su lanzamiento concretado el 14 de julio de este año.

Los registros se obtuvieron gracias a una tecnología denominada Instrumento para la Actividad Sísmica Lunar (ILSA), incluida en la carga útil del módulo de aterrizaje de la misión Chandrayaan 3. De acuerdo a los especialistas de ISRO, es el primer instrumento de detección sísmica basado en Sistemas Micro Electro Mecánicos (MEMS) que se ha utilizado en la Luna. Este equipo ha registrado las vibraciones que tienen lugar debido a los propios movimientos del rover y otras cargas útiles incluidas en la misión.

ILSA está integrado por un grupo de seis acelerómetros de alta sensibilidad: en esa estructura, el elemento sensor central dispone de un sistema de masa de resorte con electrodos, dispuestos en forma de peine. Las vibraciones externas provocan que el resorte se desvíe, dando como resultado final la producción de un voltaje eléctrico. El registro de este mecanismo permite identificar posibles movimientos sísmicos.

ISRO informa los movimientos detectados en X (ex-Twitter).

Revelando los misterios del interior lunar

Precisamente, el objetivo principal del instrumento ILSA es medir las vibraciones del suelo generadas por terremotos naturales, impactos y eventos artificiales. Durante una de las navegaciones del rover de la misión india por el polo sur lunar, el equipo detectó el 26 de agosto un evento, aparentemente natural, que coincide con las características de un sismo lunar. El origen de este suceso se encuentra actualmente bajo investigación, pero podría tratarse del primer movimiento de este tipo identificado desde fines de la década de 1970. 

Actualmente, tanto el módulo de aterrizaje como el rover de la misión india están en modo de suspensión, debido a la “noche lunar”, un período de total oscuridad en el polo sur de la Luna que dura aproximadamente 14 días. La misión reanudará sus actividades in situ el 22 de septiembre, mientras los especialistas de ISRO intentan definir si los movimientos registrados fueron finalmente sismos lunares. 

La detección de nuevos datos sísmicos en la Luna puede arrojar luz sobre las condiciones internas del satélite y su formación, ya que muchos de estos aspectos siguen siendo un enigma para los científicos. Las teorías mayormente aceptadas por la comunidad científica indican que la Luna está compuesta por un núcleo sólido, mayormente integrado por hierro, seguido de dos mantos, uno semi-sólido y otro rígido, junto a una corteza dura.