Opinión | LA NEWSLETTER DEL DIRECTOR

Brotes verdes de entendimiento

La lectura entre líneas de sus intervenciones este miércoles en el Congreso nos permite advertir una mínima posibilidad de que no todos los puentes entre Sánchez y Feijóo estén dinamitados

Pedro Sánchez durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados

Pedro Sánchez durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados / José Luis Roca

Bajo la espuma del enfrentamiento político a cara de perro, puede haber un mar en calma en el que sea posible que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, acerquen posturas. A lo mejor es sólo un deseo que no se aviene con la realidad, pero siguiendo con detalle la sesión de este miércoles en el Congreso pareció que atisbábamos brotes verdes en el horizonte del entendimiento.

Cierto es que Sánchez tildó la oposición que hace Feijóo de "tóxica, trumpista y bolsonarista", y que el líder de los populares dibujó a un presidente del Gobierno que “sobrevive a trancas y barrancas”, sometido a las exigencias de unos socios que se “ríen” de él y “acosado por la corrupción”. Palabras gruesas, no nos engañemos. Pero la lectura entre líneas de sus intervenciones nos permite advertir una mínima posibilidad de que no todos los puentes entre PSOE y PP estén dinamitados.

Fue muy significativo que Feijóo se desmarcara de la postura de José María Aznar sobre el reconocimiento del Estado palestino. En los próximos días, el PP va a insistir en la solución de los dos estados, aunque rechace el reconocimiento unilateral que parece defender Sánchez y considere que ahora, en plena guerra en Gaza, pueda ser un problema más que una solución. Pero al igual que Isabel Díaz Ayuso, y en contra de Aznar, no se cierra en banda en el futuro.

En el discurso de Sánchez asomó un asunto que puede provocar quebraderos de cabeza al Gobierno. Moncloa está comprometida a aumentar el gasto militar ante la “deriva imperialista” de la Rusia de Putin y así lo proclamó de nuevo el presidente, un objetivo que topa con el rechazo total de sus socios, pero que podría encontrar comprensión y apoyo en las filas populares. La amenaza es real y las carencias españolas en materia de Defensa, aún lo son más.

Las relaciones exteriores y la estrategia de defensa son políticas de estado que deberían aislarse del enfrentamiento diario. Y este miércoles quedó claro que Sánchez y Feijóo no están tan alejados en estas materias. Es un camino a explorar para dejar atrás la estéril aversión mutua.

HOY LES RECOMIENDO:

Y UN 'BONUS TRACK':