SALUD MENTAL

Una de cada tres depresiones en España está asociada a la precariedad laboral y podría haberse evitado

Yolanda Díaz e Iñigo Errejón presentan un informe que asegura que los problemas de salud mental aumentan más del doble en situaciones de precariedad

Yolanda Díaz e Íñigo Errejón en un acto sobre la salud mental y la precariedad laboral FOTO JOSÉ LUIS ROCA

Yolanda Díaz e Íñigo Errejón en un acto sobre la salud mental y la precariedad laboral FOTO JOSÉ LUIS ROCA / José Luis Roca

La precariedad laboral se traduce directamente en una pérdida de salud mental. Es lo que concluye el informe presentado por el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz junto a Iñigo Errejón este viernes, que apunta a que el uno de cada tres casos de depresión podrían haberse evitado si los afectados hubieran contado con mejores condiciones del trabajo. 

El líder de Más País condicionó su apoyo a la reforma laboral a la creación de una comisión de expertos para abordar la salud laboral, y fruto de ello se produjo el primer encuentro entre Errejón y Díaz hace ahora un año. En aquel encuentro acordaron la creación del informe que ahora se presenta, y que recoge una investigación que muestra una clara relación entre la precariedad y la mala salud mental de la población trabajadora, apuntando algunos factores como la temporalidad. Así, establece que los trabajadores temporales tienen un 25% de riesgo más de morbilidad psiquiátrica, siendo más susceptibles a padecer las patologías más frecuentes en este ámbito: la depresión y la ansiedad. 

La foto fija no es halagüeña. El 5,8% de la población sufre ansiedad crónica, una patología que afecta en mucha mayor medida a los desempleados (1 de cada 12) que a las personas en activo (1 de cada 23). En el caso de la depresión, la sufre el 5,3% de la población, donde la incidencia es hasta tres veces mayor en las personas en paro: 1 de cada 13 personas que desempleadas la sufre frente a 1 de cada 40 trabajadores. 

En los datos disponibles de la Encuesta Europea de Salud en España (2020) que analiza el riesgo de depresión según el nivel de estabilidad laboral y se recoge en el informe, figura un asombroso dato:  el 33,2% de los casos de depresión podrían haberse evitado con un empleo estable. Es decir, de los 511.000 de las depresiones en la población activa, 170.000 fueron atribuibles a la precariedad. 

En España, los trabajadores con nivel más elevado de precariedad tienen 2,5 veces más riesgo de tener mala salud mental en comparación con quienes tenían condiciones más normalizadas. En el informe se refleja un estudio elaborado con datos de 2005 en los que determina que, “de no haber existido precariedad laboral, podrían haberse evitado alrededor del 17% -entre el 11 y 23% según el escenario de causalidad- de casos de mala salud mental en la población asalariada española!, una situación que afecta especialmente a as mujeres y trabajadores manuales más precarios. 

ESPAÑA, 2º PUESTO EN INSEGURIDAD LABORAL

 España es el sexto país europeo con mayor exposición al estrés laboral, con una de cada tres personas trabajadas expuestas a esta situación, por detrás de Grecia, Chipre, Albania, Rumanía y Turquía, y ocupa el segundo puesto en cuanto a inseguridad laboral, sólo por detrás de Eslovenia. Además, una de cada cuatro empleados asegura que puede perder el trabajo en los próximos seis meses; una situación que afecta de lleno a la salud mental.

La psicóloga Belén González, que ha participado en la elaboración del informe, ha señalado que estos problemas “derivan del sentimiento de impotencia, de la soledad, desamparo, injusticia y en una lucha de esas personas contra sus condiciones laborales”, además de puntualizar que el informe recoge “herramientas de justicia social” para abordar estas situaciones. 

Otra de las responsables del infarto, Gema Quintero, ha asociado los casos de mala salud mental con “situaciones de informalidad”, como trabajo en B, que se traduce en “ausencia de derechos efectivos”, además de la contratación temporal o los falsos autónomos. Además, ha señalado que a día de hoy el trabajo a tiempo completo e indefinido “no es necesariamente una garantía, porque hay elementos como el descanso o la desconexión digital que tienen efecto en la salud”, además de “distribuciones irregulares de la jornada” u “horas complementarias no previsibles”.

QEl coordinador de la comisión que ha elaborado el informe, Joan Benach, ha asegurado en la rueda de prensa de la presentación que “el impacto de la salud mental es más del doble entre trabajadores precarios, y entre peores condiciones de trabajo peor es la situación de salud, y se ve en las mujeres, obreros o jóvenes. (...) Más de medio millón de personas, una tercera parte se hubiera podido evitar con unas mejores condiciones de trabajo”.