PARTIDO POPULAR

El reloj de la sucesión de Feijóo en Galicia se activa

Este lunes se cumplen trece años de la primera toma de posesión del líder gallego

Ese día había un conselleiro confirmado: Rueda, que le relevará en el partido y el Gobierno

El PPdeG pone fecha al congreso

El nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acompañado por el conselleiro de Sanidad gallego, Julio García Comesaña, en Pontevedra.

El nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acompañado por el conselleiro de Sanidad gallego, Julio García Comesaña, en Pontevedra. / EFE/Salvador Sas

Irene Bascoy

Este lunes se cumplen 13 años de la primera toma de posesión de Alberto Núñez Feijóo como presidente de la Xunta. Ese día solo había un conselleiro confirmado por el propio titular del Ejecutivo gallego. Era Alfonso Rueda, al que colocaba como conselleiro de Presidencia. Rueda había sido una figura clave del éxito electoral de marzo de 2009, cuando el sucesor de Manuel Fraga logró devolver en solo cuatro años a las bancadas de la oposición a PSdeG y BNG. Él montó con Feijóo la campaña de desgaste al bipartito de Emilio Pérez Touriño y Anxo Quintana poniendo el foco en las tensiones de la coalición y machacando, en la antesala de la crisis financiera, con los gastos “frívolos” de la Xunta.

Justo trece años después se reúne hoy a las cinco y media de la tarde en un hotel en Santiago la Junta Directiva del PPdeG para poner fecha al congreso extraordinario que ha de elegir al nuevo presidente del PP gallego y su equipo para abrir una nueva etapa, tras 16 años de liderazgo de Alberto Núñez Feijóo. Así se activa formalmente el reloj de la sucesión desde que a finales de febrero, tras el choque de Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso, el todavía presidente de la Xunta emergiera como el salvador de la crisis del PP, lo que le obligó a irse a Madrid y dejar primero el PPdeG y pronto también el Gobierno autonómico.

El elegido para relevar al hoy presidente nacional del PP es Alfonso Rueda. Un acuerdo de barones permitirá al que ha sido la mano derecha de Feijóo en la Xunta durante trece años y su primer secretario general en el PPdeG sustituir al a su vez sucesor de Pablo Casado. Habrá congreso, y la fecha que se baraja es la del fin de semana del 28 y 29 de mayo, pero Feijóo ha querido dejarle el camino expedito a su heredero.

Los barones y principales dirigentes del PPdeG apuestan por una candidatura única, por lo que será difícil que prospere una alternativa, y si lo hace será de un outsider de las esferas del poder y no tendrá mucho recorrido. También han acordado que no habrá bicefalia. Rueda se queda con todo: liderará el partido, presidirá la Xunta y además será el candidato en las elecciones autonómicas de 2024. Los estatutos del PPdeG fijan que quien tiene las riendas del partido es también cabeza de cartel. De un golpe, se resuelven tres cuestiones.

Feijóo avanzó que sería “previsible” y ha cumplido. Su relevo es quien ha sido su delfín y quien tiene experiencia de Gobierno y orgánica. Para ello, antes de hubo calmar las tensiones de los demás barones provinciales. Sobre todo las surgidas desde el PP de A Coruña (Diego Calvo) y de Ourense (Manuel Baltar), que tenían aspiraciones y pretendían un mayor protagonismo en la nueva etapa que abre el PPdeG. El encaje de las demandas territoriales para mantener y blindar la unidad del partido podría descubrirse en los próximos días o semanas, cuando se sepa con qué equipo se rodea Rueda en el partido y en la Xunta. ¿Entrará Diego Calvo en el Consello y en qué puesto? ¿Ourense sumará algún conselleiro?

El objetivo de Feijóo es resolver su sucesión en la Xunta y en el PPdeG de forma paralela, pero habrá nuevo presidentes en San Caetano antes que en el partido. Los planes del nuevo líder del PP es que termine mayo “con todos en sus puestos”.

Feijóo será el primer presidente de la Xunta que presentará su dimisión voluntaria, y cuando lo haga, “en ocho-diez días” el Parlamento podrá haber zanjado la votación y elección del nuevo titular del Ejecutivo autonómico. El plazo máximo para resolver la investidura es de un mes, pero desde el PPdeG explican que no hay intención de agotar plazos. Al contrario, la intención es acortarlos al máximo, para que la Administración no sufra un parón.