JUSTICIA

Los abogados del Estado que recuperaron el Picasso incautado visitan la obra en el Reina Sofía

Edmundo Bal, que redactó el escrito de acusación contra Jaime Botín -condenado a tres años de cárcel por tratar de sacarlo de España-, la abogada general, Consuelo Castro y otros abogados del Estado que intervinieron en siete años de pleitos comprueban que ya está a disposición del público

Edmundo Bal, diputado de C's y abogado del Estado, con 'Cabeza de mujer joven' de Picasso.

Edmundo Bal, diputado de C's y abogado del Estado, con 'Cabeza de mujer joven' de Picasso. / epe

Cristina Gallardo

'Cabeza de mujer joven', de Pablo Picasso, se encuentra desde hace casi un mes a disposición de todos los españoles que quieran visitarlo en el Museo Reina Sofía en Madrid. Se trata de un cuadro cuyo último propietario, el expresidente de Bankinter Jaime Botín, trató de sacar ilegalmente de España en 2015, lo que le supuso la pérdida de la obra y una condena de tres años de cárcel.

Se trató de un largo de litigio de siete años en el que participó un nutrido grupo de abogados del Estado en diferentes frentes: el penal por un delito de contrabando de bienes culturales, y el contencioso-administrativo, que concluyó hace apenas un año con la confirmación por el Tribunal Supremo de las resoluciones del Ministerio de Cultura que denegaron a Botín el permiso de exportación. 

Todos ellos decidieron el pasado martes visitar la obra en su actual ubicación y fotografiarse con ella, según ha relatado a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA el actual portavoz parlamentario de Ciudadanos Edmundo Bal, que fue el abogado del Estado que redactó el escrito de acusación contra Botín. También participaron en la visita la abogada general, Consuelo Castro, el subdirector general de lo Contencioso, miembros de la Abogacía adscritos al Ministerio de Cultura y de la Guardia Civil que participaron en la incautación.

"Fueron muchos años de pelea que la defensa de Botín trató de combatir en dos frentes, tanto el penal como el contencioso-administrativo", recuerda Bal, que pone en valor la actuación de los Servicios Jurídicos del Estado, del grupo de Patrimonio Histórico de la Guardia Civil y de las autoridades del Ministerio de Cultura.  

EN DEPÓSITO DESDE 2015

Hasta el pasado 10 de febrero, la obra pintada en 1906 por Picasso se encontraba en los almacenes del Reina Sofía, en depósito mientras se realizaban las investigaciones pertinentes y se solventaba el proceso judicial. El retrato está valorado en unos 26 millones de euros y llegó la pinacoteca en agosto de 2015 tras ser incautado por agentes de aduana franceses cuando el exbanquero estaba tramitando un permiso de salida de Córcega, donde estaba atracada la goleta en la que lo guardaba.  

El litigio había comenzado en diciembre de 2012, cuando Botín informó a la Secretaría de Estado de Cultura que había autorizado a la casa de subastas británica Christie's a realizar el traslado del cuadro con destino a Londres. El permiso fue denegado por la la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español acordó denegar el permiso, argumentando que no existía "una obra semejante en territorio español", perteneciente al denominado 'periodo de Gósol' del pintor malagueño.

En un primer momento, el banquero recurrió la decisión de Cultura alegando que el cuadro, que había comprado en 1977, no era en realidad su propiedad sino de una compañía llamada Euroshipping Charter Company Limited. Argumentó también que el barco en el que se guardaba no estaba en territorio español por encontrarse en un velero de pabellón británico atracado en el Real Club Náutico de Valencia.

 El asunto acabó llegando a la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, que acordó en 2015 la prohibición de salida del cuadro de nuestro país, una decisión que fue ignorada por el banquero, causando la incautación de la obra y su procesamiento por un delito de contrabando de bienes culturales.

MULTA DE 91,7 MILLONES Y PÉRDIDA DEL CUADRO

La causa penal concluyó en febrero de 2020, cuando el Juzgado de lo Penal número 27 de Madrid rectificó una resolución inicial y elevó la condena contra Botín hasta tres años de cárcel y la imposición de una multa de 91,7 millones de euros, declarando además que la obra pasaba a manos del Estado. En un primer momento, y debido a un "error" inicial, la pena se había fijado en 18 meses y la multa en 52,4 euros.

El banquero, de 85 años, no ha entrado en prisión debido a sus problemas de salud y porque la condena aún no es firme. En el plano Contencioso, el asunto es cosa juzgada desde hace un año, cuando el Tribunal Supremo confirmó la legalidad las resoluciones del Ministerio de Cultura por las que denegó la exportación de 'Cabeza de Mujer joven'.

El Consejo de Patrimonio Histórico celebrado el 11 de noviembre de 2021 acordó destinar la obra a la Colección del Reina Sofía y el ministro de Cultura y Deporte, Miguel Iceta, firmó el 15 de noviembre la orden ministerial de asignación de la obra al museo, donde ha podido ser visitada por los funcionarios de los Servicios Jurídicos del Estado que cooperaron para su recuperación.

Por su parte, el propio Botín señaló con ocasión de la exposición pública de la obra en Madrid que para él suponía una "profunda satisfacción" que el cuadro pueda ser visto por el público. "Mi intención siempre fue esa, que acabara expuesto ante los ojos de los visitantes, eso sí, del Centro Botín de Santander, a orillas de la bahía, donde tenía un sitio reservado", señaló en declaraciones hechas públicas por Europa Press.