PREMIOS OSCAR

Los Oscar 1973, la primera gala reivindicativa de la historia

El discurso de la nativa americana Sacheen Littlefeather marcó la 45ª edición de los Premios que vivieron la primera reivindicación de un colectivo dentro de la industria

Sacheen Littlefeather en los Premios Oscars 1973

Sacheen Littlefeather en los Premios Oscars 1973 / UCLA Library Special Collection

D.S

A día de hoy, a nadie le extraña que la gala de los Oscars esté cargada de reivindicaciones y denuncias políticas y sociales, como el movimiento #MeToo o la lucha por los derechos de la comunidad negra. Pero en 1973 esto sí que era algo completamente inusual. Ese año se celebró la 45ª edición de los Premios Oscar, marcada para siempre por un hecho inesperado: el discurso de Sacheen Littlefeather.

El actor Marlon Brando rechazó la estatuilla a Mejor Actor por 'El Padrino' y en su lugar acudió a recoger el premio la actriz nativa Sacheen Littlefeather como protesta por el trato que recibían los nativos americanos en la industria del cine.

Cuando los presentadores nombraron al actor Marlon Brando, la activista indígena apareció en escena rechazando la estatuilla que le estaban entregando para más tarde acercarse a los micrófonos y decir que Brando no podía aceptar el galardón debido al trato que da la industria a los indios americanos. El público congregado allí se dividió al escuchar el discurso de esta actriz, se escuchaban tímidos aplausos pero también abucheos. "Disculpen", dijo ella para poder seguir relatando su protesta y luego continuar: "Y en las reposiciones de televisión y películas, y también con los acontecimientos recientes en Wounded Knee", dijo la intérprete. En Wounded Knee, Dakota del Sur, hubo un enfrentamiento entre las autoridades estadounidenses y los activistas nativos americanos provocados por el asesinato de un hombre lakota (pueblo indígena en el norte del río Misuri).

Ante su discurso, que se televisaba por primera vez vía satélite, nadie supo cómo actuar. Llegaron incluso a pensar que era una actriz impostora contratada y que había sido una broma. "Todo sucedió tan rápido cuando se anunció que había ganado [Marlon Brando]. Le había prometido a Marlon que no tocaría esa estatua si ganaba. Y le había prometido a Koch que no pasaría de 60 segundos. Así que tenía que cumplir dos promesas“, dijo la intérprete.