NO USAR ESTUFA DE PELLETS

Adiós a la estufa de pellets: el motivo de salud por el que la gente está dejando de usarlas

Con el descenso de las temperaturas son muchos los que ya las están encendiendo

La calculadora de la calefacción: descubre cuánto te cuesta tenerla encendida en tu hogar

calefactor

calefactor / Adiós a la estufa de pellets: el motivo de salud por el que la gente está dejando de usarlas

Manuel Riu

El descenso de las temperaturas que se da en esta época obliga a muchos de nosotros a recurrir por primera vez a los sistemas de calefacción. Encendemos chimeneas, estufas, radiadores y calefactores. Un buen número de personas, sin embargo, recurre a las cada vez más populares estufas de pellets. Un aparato sin duda útil para intentar reducir el importe de las facturas, pero que puede esconder bastantes trampas. Pocas personas conocen los peligros de la estufa de pellets y los riesgos incluso graves para la salud que podría provocar si se utiliza de forma incorrecta. Intentemos arrojar algo de luz al respecto sin generar alarmismos innecesarios.

Sin duda son días difíciles en lo que a costes energéticos se refiere. Una situación que podría animar a muchos a ahorrar en mantenimiento y materiales de calefacción. Pero la comunidad científica advierte de los posibles riesgos de estas prácticas. Los pellets de mala calidad cuestan menos, pero podrían aumentar desproporcionadamente los problemas de salud.

El motivo de salud por el que están dejando de usar las estufas de pellets

Los productos no certificados podrían aumentar la cantidad de polvo fino en el hogar. Polvo que podríamos inhalar causando enfermedades respiratorias, reacciones alérgicas e incluso asma.

Tampoco hay que subestimar la mala ventilación de las habitaciones. No ventilar nunca podría provocar una mayor exposición a los ácaros del polvo y otros agentes patógenos. Con el resultado de debilitar drásticamente el sistema inmunitario.

Poca gente conoce los peligros de la estufa de pellets y he aquí cómo reducir los riesgos.

Así es como puedes reducir los riesgos de la estufa de pellets

Las medidas para reducir los peligros son fáciles de poner en práctica. La primera es no ahorrar en gastos de mantenimiento. La segunda es asegurarse de que las habitaciones, especialmente aquellas en las que está instalada la estufa y las adyacentes, estén bien ventiladas. La tercera es retirar todos los objetos potencialmente peligrosos, como plantas y alfombras sintéticas, de los alrededores de la estufa.

Por último, compre siempre combustibles certificados y de calidad. Es mejor evitar los productos demasiado ricos en serrín y llenos de aditivos y productos químicos.

Otro buen consejo de seguridad es instalar un detector de monóxido de carbono en casa. Nos avisará en caso de fugas o escapes de gas.

¿Pelletes o bomba de calor?

Una bomba de calor es una máquina capaz de transferir calor de un ambiente frío a otro más cálido. En invierno, para calentar una casa, lo hace extrayendo calor del ambiente exterior y transfiriéndolo a este. Pero para ello utilizan cierta cantidad de electricidad o gas natural. Algunos de estos aparatos también son capaces de hacer lo contrario, es decir, crear aire frío. Por tanto, son capaces tanto de enfriar como de calentar una habitación.

Hay que tener en cuenta que la instalación de una bomba de calor también está cubierta por el Ecobono del 65%, al igual que la estufa de pellets. En consecuencia, instalarla puede ser ventajoso porque el coste se reduce a más de la mitad por la deducción reconocida.

Aunque no se ha hecho tan viral como con las estufas de pellets, la carrera por las bombas de calor también lleva tiempo en marcha. El principal problema es que si hasta el año pasado el pellet era uno de los combustibles más baratos, este año su coste casi se ha triplicado. Por no hablar del hecho de que su disponibilidad es cada vez menor.

En cuanto a la bomba de calor, es cierto que tiene unos costes de instalación y mantenimiento elevados. Pero se amortizan en gran parte gracias a las deducciones fiscales reconocidas. Y por el bajo coste de la producción de calor. El ahorro también aumenta si la bomba de calor se utiliza también en verano como aire acondicionado para enfriar las habitaciones.

TEMAS