La UE aprueba definitivamente que el 42,5% de la energía sea renovable en 2030

La nueva directiva sobre energías renovables, que eleva al 42,5% el objetivo de la UE para 2030 y que suma un complemento indicativo adicional del 2,5% de cara a alcanzar una cuota de renovables del 45% en el mix energético, ha recibido este lunes el aprobado definitivo del Consejo. La nueva norma garantiza procedimientos de autorización acelerados para proyectos de energía renovable que serán considerados de “interés público superior”, lo que limitará los motivos para plantear objeciones jurídicas a las nuevas instalaciones.

“Es un gran logro que continuirá a alcanzar el objetivo climático de la UE de reducir las emisiones de la UE en al menos un 55% de aquí a 2030”, ha celebrado la ministra en funciones de transición ecológica, Teresa Ribera, en nombre de la presidencia de turno de la UE sobre una directiva propuesta hace dos años y medio por la Comisión Europea en el marco del paquete sobre Clima y Energía. La normativa entrará en vigor veinte días después de su publicación en el Diario Oficial y los Veintisiete tendrán 18 meses de plazo para incorporar la norma a su legislación nacional. 

Objetivos específicos

La normativa establece objetivos específicos para los distintos sectores de forma que la presencia de las renovables en los mismos, que ha sido más lenta, pueda aumentar. Por ejemplo, la directiva establece un objetivo indicativo de al menos un 49% de cuota de renovables en los edificios en 2030 y un aumento gradual para la calefacción y la refrigeración, con un aumento vinculante del 0,8% anual a escala nacional hasta 2026 y del 1,1% de 2026 al 2030. El porcentaje medio anual mínimo aplicable a todos los Estados miembros se complementa con incrementos indicativos adicionales calculados específicamente para cada Estado miembro.

En cuanto al uso de renovables en el sector del transporte, la nueva norma dará la posibilidad a los Estados miembros de elegir entre dos opciones. O bien, un objetivo vinculante de reducción del 14,5% de la intensidad de gases de efecto invernadero en el transporte mediante el uso de energías renovables de aquí a 2030. O bien, una cuota vinculante de al menos un 29% de energías renovables dentro del consumo de energía final en el sector del transporte de aquí a 2030.

Biocombustibles renovables

La directiva establece además un subobjetivo combinado vinculante del 5,5% para los biocombustibles avanzados (generalmente derivados de materias primas no producidas a partir de cultivos alimentarios) y los combustibles renovables de origen no biológico (principalmente hidrógeno renovable y combustibles sintéticos basados en el hidrógeno) en la cuota de energías renovables suministradas al sector del transporte. Dentro de este objetivo, las reglas aclaran que existe un requisito mínimo del 1% de combustibles renovables de origen no biológico en la cuota de energías renovables suministradas al sector del transporte en 2030.

Otro de los sectores que tendrán que aumentar el peso de las renovables es la industria, con un incremento del 1,6% anual. La nueva normativa establecer que el hidrógeno utilizado en este sector tendrá que proceder de combustibles renovables de origen no biológico en una proporción del 42% para 2030 y del 60% para 2035. Los Veintisiete podrán reducir, no obstante, en un 20% la contribución de los combustibles renovables de origen no biológico utilizados para la industria con dos condiciones: que la contribución nacional de los Estados miembros al objetivo vinculante total de la UE alcance su nivel previsto y que la cuota de hidrógeno procedente de combustibles fósiles consumidos en el Estado miembro no supere el 23% en 2030 ni el 20% en 2035. Por último, la nueva norma refuerza los criterios de sostenibilidad para el uso de biomasa para producir energía, con el fin de reducir el riesgo de producción de bioenergía no sostenible.