MÉDICOS Y PEDIATRAS

Madrid tiene vacantes el 25% de los puestos de atención primaria en plena sexta ola de covid

El sindicato médico Amyts denuncia que las bajas de médicos y pediatras causadas por covid y riesgos psicosociales derivados de sobre carga de trabajo se suman a las vacantes por jubilación no cubiertas y dejan la atención de los centros de salud en condiciones "raquíticas" para dar cobertura a la situación sanitaria actual.

Manifestantes atención primaria Madrid

Manifestantes atención primaria Madrid / EUROPA PRESS / Fernando Sánchez

Elena Marín

Elena Marín

"Hemos llegado a la pandemia en una situación raquítica y esta crisis sanitaria nos ha fulminado". Así de tajante se muestra María Justicia, presidenta de Atención Primaria de la Asociación de médicos y titulados superiores de Madrid (Amyts), que explica que en la Comunidad "faltan en sus sillas de trabajo más de 1.200 médicos y pediatras, un 25% aproximadamente de toda la plantilla de facultativos de la región".

Esta ausencia, aclara, no se produce por falta de voluntad. Son los puestos que quedan vacíos en los centros de salud de toda la Comunidad si se suma a los profesionales médicos que están de baja a causa del covid, por riesgos psicosociales derivados de la sobrecarga asistencia (es decir, bajas por ansiedad, estrés, depresión o similares) o porque no se han cubierto las vacantes por jubilación. Y esto sucede en un momento en el que en la Comunidad de Madrid se han registrado el 23 de diciembre 13.334 nuevos casos en las últimas 24 horas y 850 hospitalizaciones en el día.

El dato sobre "sillas vacías" de Amyts es estimativo porque asegura Justicia que les resulta complicado contabilizarlo con precisión por falta de datos oficiales. A esta queja se suman en el área sanitaria de otro sindicato, el de Comisiones Obreras, en el que coinciden en que llevan años pidiendo al Servicio Madrileño de Salud los datos de bajas por enfermedad del personal de atención primaria (no solo el de los médicos) y que solo han obtenido los relativos a las bajas por coronavirus. En atención primaria la situación es especialmente grave, según CCOO, porque los contagios por coronavirus se han disparado un 132% en el último mes, siendo el último dato del 13 de diciembre, por lo que aún no está recogida ahí la incidencia de Ómicron de esta última semana.

Éxodo de profesionales

A la situación actual se suma que en los próximos cuatro años, Madrid va a perder otros 1.250 médicos por jubilación, explican en los dos sindicatos, "pero el éxodo es aún mayor porque en esta región las condiciones no son buenas", apunta Justicia. "En Madrid cada año terminan su etapa de residentes de atención primaria unos 225 profesionales y 85 pediatras", pero en 2021, detalla que "apenas 17 médicos y 5 pediatras firmaron un contrato para quedarse aquí porque les falta motivación". Según la responsable de Amyts, los profesionales médicos prefieren marcharse a centros privados, al extranjero o incluso a otras comunidades autónomas porque aquí no tienen oportunidad para investigar o compaginarlo con la docencia, porque los horarios son peores que en otros lugares (Madrid es de los pocos lugares donde los centros de salud atienden en turnos de mañana y tarde), las agendas son inabarcables o porque las medidas retributivas son peores.

La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha aprobado esta misma semana sus presupuestos, en medio de una polémica por sus palabras sobre el personal de los centros sanitarios, y en ellos la partida de Sanidad crece un 8,6% hasta alcanzar los 8.073 millones de euros. De esta cuantía, 2.055 millones de euros están destinados a la atención primaria, en el que se contempla el Plan de Mejora de la Atención Primaria que incluye entre sus medidas principales la mejora de los salarios los profesionales de estos centros o de las infraestructuras de los mismos. Pero estas cantidades no convencen a los sindicatos médicos.

"El deterioro ha sido tal en los últimos 20 años que es necesario un gran esfuerzo" para recuperar el servicio y el "déficit estructural", advierte Sergio Fernández, de CCOO. "La atención primaria solo se refuerza con un refuerzo de profesionales", explica. La transmisión del virus está descontrolada, entre otras razones según Fernández, porque los centros de salud están saturados. "En los últimos meses las listas de espera para ser atendidos por el médico de cabecera han seguido creciendo. En agosto la demora era de unos 4 días de media, en noviembre ya estábamos en una media de 7 días de espera para una primera cita", apunta. Si esta es la media, continúa, significa que "en algunos centros la espera es de 15 días". Según los datos que maneja, es necesario "incorporar solo el próximo año a 600 facultativos, 2.000 profesionales de enfermería y más de 600 en las unidades de administración y celadores, que ahora mismo están también ejerciendo estas funciones de administración cogiendo los teléfonos o participando en los filtros para los circuitos covid dentro de los centros de salud". La promesa de hacerlo existe, la lanzó Ayuso hace unos meses pero los sindicatos insisten en que no se ha materializado.

Soluciones alternativas

¿Y ayudan los puntos de test habilitados ahora por Ayuso para los pacientes con síntomas a descongestionar los centros de salud? "Sirve para salir del paso", dice Fernández. "Que se lleven todo lo relativo al covid fuera de los centros de atención primaria", apunta Justicia, quien explica que "ahora mismo en la atención primaria no se hacen triajes como en los hospitales y se juntan en las colas los que quieren hacerse un pcr con o sin síntomas, los que se acercan porque no consiguen citas telefónicas, los enfermos crónicos.... Los centros son ahora "un foco de contagio y un coladero" por esta mezcla de pacientes y porque además son espacios con escasa ventilación, con infraestructuras limitadas.

Tanto Ayuso como su consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, como su viceconsejero de Asistencia Sanitaria y Salud Pública, Antonio Zapatero, han intentado en las últimas horas trasladar un mensaje de tranquilidad incidiendo en que la nueva variante Ómicron provoca casos menos graves y que los ingresos hospitalarios y las camas de UCI están bajo control en la Comunidad de Madrid. Zapatero apunta incluso que según un último estudio "el porcentaje de ingresos hospitalarios cae un 80% en relación con otras variantes".

El problema, insisten en Amyts, es que la clase política en España es "hospitalocentrista y no creen en la atención primaria". "Llevamos años viendo cómo se han incorporado máquinas y robots nuevos a los hospitales, y es una inversión necesaria, pero no puede hacerse a costa de abandonar la atención primaria. "La OMS advierte de que una atención primaria potente favorece una sociedad más sana y con menos ingresos hospitalarios", principalmente, por toda la labor de "prevención, diagnóstico temprano, curas y cuidados paliativos que se prestan. Hoy, en Madrid, los médicos tienen agendas "con una media de 55-60 pacientes al día" y así, concluye Amyts, "la atención primaria está muerta".