Si te dan dinero en Reyes, ¿tienes que declararlo a Hacienda?

En estas fechas festivas, en Navidad y Reyes, es normal que muchas familias elijan hacer regalos en forma de compensación económica, en vez de juguetes u objetos materiales. Estos aguinaldos tienen como objetivo hacer más fácil y llevadera la entrada del año y todos los aceptamos sin pensar en las posibles consecuencias. Desde luego, no pensamos en la Agencia Tributaria. Sin embargo, hay que tener cuidado si no queremos recibir una multa de Hacienda.

Qué hay que hacer con el dinero que nos regalan en Reyes

Desde la Agencia Tributaria apuntan que es necesario declarar todo el dinero en efectivo que nos regalan en estas fechas. La realidad es que no existe ninguna cantidad mínima oficial a partir de la cual debe ser declarada la cuantía, por lo que cualquier donación que nos regalen debe constar en los registros de la Agencia Tributaria a través del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.

Qué es una donación para Hacienda

Para Hacienda, una donación es todo acto de liberalidad a través del cual un individuo dispone de forma gratuita una cosa en favor de otra. Es decir, cualquier tipo de regalo en forma de dinero, sea de la cantidad que sea, es entendido por la Agencia Tributaria como una donación.

También hay situaciones concretas. Por ejemplo, si el aguinaldo corresponde a un premio extra por un servicio laboral prestado. En este caso, no se consideraría una donación, sino una contraprestación que debe ser declarada con el IRPF correspondiente. En cuanto a la cesta de Navidad de la empresa o regalos del mismo tipo, el importe de estos debe incluirse en la nómina y en el certificado de retenciones del IRPF.

Cuándo tengo que declarar el dinero regalado en Reyes

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Existe un periodo de 30 días hábiles para declarar el dinero que nos regalen a través del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. De no hacerlo, es posible recibir una sanción de Hacienda. Sin embargo, lo cierto es que el organismo raramente persigue el pago de impuestos por aguinaldos o regalos navideños. De hecho, es muy normal que el Estado no recaude ninguna cantidad derivada de estos movimientos.

Eso sí, si el dinero es regalado a través de una transferencia bancaria y el importe supera los 3.000 euros Hacienda podría recibir una alarma. A partir de esa cantidad, el banco se lo comunica al organismo tributario, que es el que decide si merece la pena investigar el caso o no.