MISCELÁNEA

He venido a hablar de mi libro: Cristina Rivas

'Un tigre a París' es, en palabras de su autora, "una narración atravesada por el duelo que es al mismo tiempo una celebración de la amistad y del milagro de la comprensión mutua"

La escritora Cristina Rivas, autora de 'Un tigre a París'

La escritora Cristina Rivas, autora de 'Un tigre a París' / EPE

Cristina Rivas

Me proponen que explique por qué he escrito Un tigre a París. Yo digo que escribir sobre un libro es más difícil que escribir el propio libro. Pero lo pruebo. Desde que he recibido el encargo, hace tres días (con Navidad y Sant Esteve de por medio) se me han ocurrido tres buenos argumentos, de esos que lucen en las páginas de un diario. Los tres son falsos. He escrito (o "escribí", no se sabe, o quizá incluso "sigo escribiendo") el tigre porque no podía hacer otra cosa. ¿Qué queríais? Fadwa había muerto. "Tout simplement", que dicen en Francia.

Escribí el libro impulsada por un infortunio. Enseguida quise creer que tenía la misión de hacerla revivir, a Fadwa Suleiman. He convertido en libro a una amiga. "Cuánta pretensión, qué poder", diréis. Y, sí, tengo la convicción desde siempre: los libros tienen poder. Quería hacerla revivir para compartirla, para darla a conocer, seguramente, y porque tenía claro que la verdadera muerte es el olvido.

Fadwa Suleiman debía trascender más allá de mi experiencia personal porque no era una persona cualquiera: debía ser patrimonio de todos. También me puse a escribir por una razón egoísta: para alargar una conversación que no aceptaba que hubiera terminado, que había quedado completamente mutilada. ¿Quién no habla con sus muertos? Me puse, todo sea dicho, sin saber demasiado: ni de ella ni de escribir libros. ¿Qué podría explicar de verdad de Fadwa? ¿Quién conoce suficientemente a los amigos? ¿Cómo se construye una narración que parte de su propia experiencia? ¿Qué merece ser contado? ¿Cómo se discrimina? ¿Qué invento y qué me callo?

La voz de una narradora sin nombre tomó fuerza y se unió al hilo de un relato hecho de parches de memoria y muchos silencios

Y así, muy convencida de que aquello era una misión, una especie de encargo importantísimo del más allá, me dediqué a convertir a Fadwa en libro. Pero resultó que Fadwa era muchas cosas. Era la poeta siria, la revolucionaria en el exilio, la actriz amiga con la que había paseado por París y también la desconocida que abría interrogantes. Fadwa me hacía pensar en la idea de amistad, en el exilio, en el amor y la guerra, en el sentido del trabajo asalariado, en la maternidad y en lo de Rimbaud: "Je est un autre" (Yo soy otro).

Caminos diversos

Como buena dispersa que soy, no fui directamente al grano y me perdí por caminos diversos: la voz de una narradora sin nombre tomó fuerza y se unió al hilo de un relato hecho de parches de memoria y muchos silencios. El relato funcionaba como ficción. Y así se fue tejiendo una historia que pasa por ciudades como Damasco, París y Barcelona, que une a dos mujeres en plena madurez que ven al mundo entero como un país extranjero. Desde la extrañeza, pero también desde la capacidad de maravillarse.

Un tigre a París es, en definitiva, una búsqueda de la amiga muerta y un esfuerzo por salir del caos vital que provoca la pérdida. La relación que la narradora tuvo con Fadwa le sirve de pretexto para mirarse a sí misma, para descubrirse: todos tenemos un otro y todos somos el otro de alguien. La narradora busca reconstruirse y eso pasa por reconstruir la lucha de Fadwa, por hacer un ejercicio de memoria, de recuperación. Esta narradora sin nombre ordena los recuerdos como quien ventila una habitación y asea los armarios para que corra el aire, para pasar página, para encontrar el jersey que toca el día que lo necesita, para seguir viviendo a pesar de todo.

Fadwa es el tigre en París, el tigre que vive enjaulado contra su destino. Fadwa es tantas mujeres… Un tigre a París es una narración atravesada por el duelo que es al mismo tiempo una celebración de la amistad y del milagro de la comprensión mutua.

'Un tigre a París'

Cristina Rivas

Angle Editorial

144 páginas

17,50euros