El regalo de la lectura en Navidad

Navidad, Fin de Año y Reyes. Las tres en mayúsculas porque simbolizan reunión familiar o con amigos y descanso. También acción de regalar. Los obsequios en fiestas tienen un esfuerzo anterior. De ahí lo interesante. Hacer un regalo viene precedido de pensar cuál será la elección.

Y esa es la acción que tiene más enjundia de lo que parece. Durante unos segundos o unos días pensamos en alguien en concreto y nos imaginamos qué le puede hacer feliz o simplemente ilusión. Por eso el regalo de un libro, además de una inversión cultural, es un ejercicio de agradecimiento. 

Tengo un buen amigo al que sólo se le podían regalar libros de pesca, setas y gastronomía. Por supuesto, cocina de muerte. Le regalé, comprado en una librería de libro viejo, un título que leí en mi juventud, Están matando a los grandes chefs, escrito por el matrimonio Nan e Ivan Lyons y publicado por Argos Vergara. De ellos se sabe poco. Nan escribió algunas novelas negras siempre bajo el paraguas de la gastronomía.

En este caso, los grandes chef londinenses comienzan a ser asesinados según su especialidad culinaria. El primero aparece horneado en las cocinas del Hotel Savoy donde se hace el pan diario. Pues su lectura supuso para mi buen amigo, cocinero de afición, el inicio de una pequeña biblioteca de libros con argumentación gastronómica. Un éxito.

Recomendar libros en Navidad tiene su riesgo. Pero la prescripción literaria en general la tiene. Es cuestión de elegir y, por ello, muchos se quedan fuera. Así que, de entrada, deberíamos pedir disculpas, pero los apuntados son buenos. No lo duden. Disfruten de la Navidad.