SOBREPESO Y OBESIDAD

¿Epidemia de diabetes tipo 2 entre niños y jóvenes?: "Las cifras son alarmantes"

Un 23,3% de menores españoles tiene sobrepeso y el 17% obesidad, el principal factor de riesgo para desarrollar la enfermedad, advierten desde las asociaciones de pacientes

Obesidad infantil.

Obesidad infantil. / Shutterstock

Nieves Salinas

Nieves Salinas

Un 23,3% de los niños españoles tiene sobrepeso. El 17%, obesidad. Un problema de enorme calado para la salud de los más jóvenes, que aumenta el riesgo de padecer enfermedades. "Son datos realmente alarmantes y más teniendo en cuenta que es uno de los factores de riesgo en la diabetes tipo 2 y que es algo que se puede prevenir, sólo fomentando una vida saludable", señala a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA el presidente de la Federación Española de Diabetes (FEDE), Juan Francisco Perán. ¿Estamos ante una futura epidemia de diabetes tipo 2 infanto-juvenil?. "Rotundamente sí", responde.

FEDE vuelve a poner sobre la mesa datos inquietantes. España es el quinto país en Europa con mayor tasa de obesidad y sobrepeso infantil, tan sólo por detrás de Grecia, Malta, Andorra e Italia. Por lo que respecta a las cifras en la adolescencia, el sobrepeso afecta a un 32,5%; y la obesidad, a un 9,7%. En nuestro país, dice Juan Francisco Perán, se estima que hay seis millones de de personas con diabetes, el 80% con tipo 2, la más frecuente e íntimamente asociada a ese exceso de peso. También al sedentarismo.

Otros dos millones, según esas estimaciones, pueden padecer la enfermedad y no lo saben, dice el presidente de FEDE que, por cierto, pide, se diferencie de la tipo 1, como la que diagnosticaron a su hija cuando era muy pequeña, una enfermedad autoinmune crónica que se caracteriza porque el páncreas pierde la capacidad de generar insulina, la hormona que regula la hiperglucemia. Las personas con diabetes tipo 1 -entre el 5% y el 10% a nivel mundial- necesitan la administración de insulina a diario de por vida.

La más diagnosticada

Si se habla de la diabetes tipo 2, cada día 1.100 personas son diagnosticadas con esta enfermedad en España. Los casos podrían alcanzar los nueve millones de afectados en 2025. Esto supone un gasto sanitario de 5.809 millones de euros al año. Por eso a FEDE le preocupan tanto las cifras de sobrepeso que se manejan sobre nuestros niños y adolescentes. Por lo que se puede avecinar.

De diabetes tipo 2 no hay datos unificados sobre menores para España, más allá de saberse que está bajando la media de edad

Advierte la Federación que, sin embargo, no hay cifras sobre cuántos niños pueden tener este tipo de diabetes en España. Hay estimaciones de la International Diabetes Federation (IDF) para niños (0-19 años) en diabetes tipo 1: 17.221 en 2021. De diabetes tipo 2 no existen datos unificados sobre menores, más allá de saberse que está bajando la media de edad, indican.

Un estudio publicado a principios de 2023 en The British Medical Journal  sí analizaba la evolución durante las últimas tres décadas (1990-2019), a nivel mundial -en 204 países- la incidencia de este tiepo de diabetes en la franja que, a priori no debería desarrollar la enfermedad: la población adolescente y joven (15-39 años). Los resultados hablan de cifras disparadas: en apenas 30 años la prevalencia ha credico en un 56,4%, pasando de una incidencia de 117 casos por cada 100.000 habitantes en 1990, a una de 183 en 2019.

"No se le presta atención"

Desde FEDE, su presidente se muestra preocupado. Habla de niños con sobrepeso u obesidad, firmes candidatos a padecer la enfermedad. "Esos niños no tienen que llegar a Atención Primaria, porque entonces ya es un problema. Una de nuestras reivindicaciones es la presencia de enfermeros en los colegios, no sólo de forma asistencial, sino con un programa basado en la educación para la salud y prevención. Porque no hay datos, no hay control en la diabetes tipo 2 infanto-juvenil. No se le presta la atención que se debería. A los críos hay que decirles que el sobrepeso va más allá de la estética, que es salud. Si actuásemos, podríamos estar retardándola o evitándola", señala Juan Francisco Perán.

Para la Federación, las causas de estos datos hay que buscarlas en los hábitos de alimentación y ejercicio, las horas de sueño y la salud emocional de los más pequeños, pero también en datos extraídos del Plan Estratégico Nacional para la reducción de la Obesidad Infantil (2022-2030). Hablan de otros factores relacionados con su contexto social y económico. En este sentido, España es uno de los países de la Unión Europea (UE) en los que la tasa de riesgo de pobreza infantil y la de obesidad presentan una correlación más alta, apuntan.

Un grupo de niños en un comedor escolar.

Niños en un comedor escolar. / EPE

El porcentaje de niños y niñas con obesidad se duplica para los hogares con menos ingresos (23,7%) en comparación con los que tienen más (10,5%). Al igual que sucede con la diabetes tipo 2, la obesidad es una patología que está estrechamente relacionada con determinantes sociales y económicos de la salud, los cuales deben tenerse en cuenta en el análisis y atención a los pacientes, inciden.

"En el caso de la alimentación, este aspecto se retroalimenta con otros condicionantes como el nivel de estudios o el entorno familiar, influyendo entre sí y condicionando la exposición del paciente a la diabetes tipo 2. Es una cadena", remaca Juan Francisco Perán.

Comida rápida

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, advertía este miércoles de que el 40% de los menores que están expuestos a la publicidad de comida rápida la toman más de dos días por semana. Según el informe Publicidad, alimentación y derechos de la infancia en España, elaborado por la Gasol Foundation en colaboración con el ministerio -que analiza cómo influye la publicidad en los hábitos de consumo en esa población- estar expuesto a la publicidad de tres o más productos no saludables supone un consumo más frecuente de refrescos, bollería y pastelería industrial, aperitivos salados, golosinas y bebidas energéticas.

Los niños andaluces podrán ir a casa ante las olas de calor.

Niños en un colegio. / VICENTE ROSO (EFE)

El informe también apunta que la población expuesta a la publicidad de productos no saludables es la que dedica un mayor tiempo al uso de las pantallas y la que reside en entornos de menor renta. Por ejemplo, el promedio diario de calorías ingeridas procedentes de la comida rápida o la bollería industrial por quienes afirman haber visto publicidad de estos grupos de productos es de 60,4 Kilocalorías más al día, y de un 47,9 Kilocalorías, respectivamente.