Rufián, Nogueras y Aizpurúa fiscalizarán al CNI en la comisión de secretos oficiales

El Congreso activará esta semana la comisión de secretos oficiales, a petición del PP, para que la directora del CNI, Esperanza Casteleiro, informe sobre el descubrimiento de dos agentes que se habían infiltrado en el servicio de inteligencia español y habían robado datos para Estados Unidos. Por segunda vez en la historia, en esta comisión, que tiene carácter reservado, estarán presentes Gabriel Rufián (ERC), Miriam Nogueras (Junts) y Mertxe Aizpurúa (EH Bildu). El PP ya ha criticado la presencia de las formaciones independentistas.

Si en 2022 se constituyó la comisión para pedir explicaciones a Castelerio por el supuesto espionaje con Pegasus a más de 60 líderes y activistas del independentismo vasco y catalán durante 2017 y 2019, la directora del CNI deberá regresar a la Cámara Baja por una polémica bien distinta. En septiembre, dos agentes del CNI fueron detenidos por filtrar información a Estados Unidos. La investigación posterior apunta a que la CIA trataba de introducir ojos y oídos de manera permanente en el servicio de inteligencia español.

Los conservadores quieren que la directora del CNI comparezca de urgencia por este asunto. Así, en el pleno de esta semana se votará, de manera secreta, los miembros que compondrán este órgano. La principal característica de esta comisión es que es secreta. En la ley de 1995 se establece que sus miembros "vendrán obligados a no divulgar informaciones obtenidas" en este foro. Es decir, no pueden contar nada de lo que ocurra dentro y los periodistas tampoco pueden acceder.

La composición

El PP ya ha criticado que se vaya a dar entrada a formaciones independentistas. "Grupos que de forma pública y manifiesta buscan romper la unidad de España y dificultar su gobernabilidad tendrán acceso a información sensible sobre la seguridad nacional por culpa de Pedro Sánchez", denunció el pasado martes el portavoz del PP, Miguel Tellado. El dirigente se refería a un cambio realizado por la expresidenta del Congreso, Meritxell Batet, en 2022 para que los miembros de esta comisión -uno por grupo- fueran elegidos por mayoría absoluta (176 votos) y no por una mayoría reforzada de 210 votos.

Esta modificación permitió que todas las formaciones tuvieran representación en la comisión de control de los créditos destinados a gastos reservados, como verdaderamente se llama. Este órgano fue creado originalmente para que el poder legislativo pudiera tener acceso a información sobre el uso de gastos reservados y a los secretos oficiales. Más tarde se añadió que este es el fórum en el que el CNI debe dar al Congreso "la información apropiada sobre su funcionamiento y actividades".

PP, PSOE y PNV siempre han tenido presencia en esta comisión, mientras que partidos como ERC o la antigua CIU han ido entrando y saliendo. Sin embargo, el cambio realizado en 2022, después de que los vetos cruzados impidieron que ningún diputado alcanzara los 210 votos necesarios, permitió que EH Bildu o la CUP, en representación del grupo mixto, pudieran acudir a estas reuniones. El PP no cesa en afear esta "cesión" que, según dicen, permitirá que "independentistas y partidos antisistema" tengan información privilegiada.

¿Y Podemos?

Más allá de la presencia de las formaciones independentistas y de los portavoces en el Congreso de los cuatro grandes partidos, falta por ver si alguno de los cinco diputados de Podemos es elegido en representación del grupo parlamentario Mixto. Para alcanzar los 176 votos favorables deberían contar con el respaldo de Sumar, ya que resulta complejo imaginar el apoyo de PP o Vox. Tras la ruptura, el partido de Yolanda Díaz tiene en su mano que los morados puedan acudir a esta comisión.