CAMBIO DEL ARTÍCULO 49

Feijóo toma la iniciativa para acordar ya la primera reforma constitucional con Sánchez

El PP pretende avanzar en la reforma del artículo 49 para eliminar la palabra "disminuidos" en referencia a las personas con discapacidad en los próximos días

Su propuesta no es un brindis al sol y en Génova dan por hecho que cerrarán un acuerdo con el Gobierno

Feijóo acumula un fuerte malestar por las palabras de Sánchez en el Senado, que dijo que el popular seguía vetando la reforma

Alberto Núñez Feijóo, comparece tras el encuentro mantenido con miembros de la Comisión Permanente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).

Alberto Núñez Feijóo, comparece tras el encuentro mantenido con miembros de la Comisión Permanente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI). / EFE/ Emilio Naranjo

Paloma Esteban

Paloma Esteban

El pacto entre PP y PSOE para reformar el artículo 49 de la Constitución está más cerca. El ofrecimiento de Alberto Núñez Feijóo, escenificado tras su encuentro con el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), no es un brindis al sol. Los populares insistirán en los próximos días para intentar cerrar un acuerdo a corto plazo. Supondría un acuerdo político de grandes dimensiones, a pesar de que la reforma constitucional sería muy concreta y quirúrgica para eliminar el término “disminuido” al hablar de personas con discapacidad.

Es un asunto en el que los dos grandes partidos están de acuerdo y decididos, a diferencia de la anterior dirección popular de Pablo Casado, que no vio claro acercar posturas en ese sentido. De hecho, en Moncloa consideran una “rectificación” la iniciativa del nuevo líder de la oposición y se quejan de que “hasta ahora” los populares no habían mostrado ninguna sensibilidad al respecto.

Sin embargo, en el PP no lo ven con los mismos ojos. Feijóo acumula un malestar muy importante desde su primer cara a cara con el presidente, hace unos días, cuando Sánchez le afeó en el Senado haberse negado a este acuerdo. Una “mentira” total, dicen en Génova, visiblemente enfadados por las palabras del jefe del Ejecutivo. 

De hecho, desde el entorno de Feijóo aseguran que la reforma constitucional fue uno de los asuntos que parecía claro tras su primer encuentro en la Moncloa hace dos meses y del que “no han vuelto a tener noticia” hasta el otro día, cuando Sánchez se quejó de algo “que no era verdad”. En aquel encuentro, en el que también acordaron retomar las conversaciones sobre la renovación del Consejo General del Poder Judicial, los populares dieron por hecho que la modificación del artículo 49 se pondría en marcha. Pero no hubo novedades al respecto.

DESCONFIANZA Y GARANTÍAS

El PP cuenta con sacar adelante la reforma, pero la desconfianza de abrir el melón constitucional es “inevitable”, reconocen, por las pretensiones que tienen otras formaciones de la izquierda de acometer una reforma más profunda de la Carta Magna. 

La postura de Feijóo fue ampliamente avalada por el propio presidente del CERMI, que incidió en la “voluntad real” de hacer realidad el cambio constitucional por parte del primer partido de la oposición, y pidió no mezclar la discapacidad con asuntos de otra índole como la territorial. En el entorno de Feijóo aseguran que los recelos en ese sentido existen, pero también reconocen que necesitan “avanzar” y “creer” que este acuerdo es posible. “Si hubiera una traición sería con luz y taquígrafos a ojos de todos”, zanjan.

El paso dado va en serio hasta el punto de que el PP puso encima de la mesa una fórmula de trabajo concreta: constituir en los próximos días una mesa con representantes de las dos principales fuerzas políticas y miembros de CERMI para acordar un nuevo texto. Los populares son partidarios de elevarlo después al Consejo de Estado para contar con un “armazón” mayor, “acertar con la literalidad de las palabras” y evitar errores de cualquier tipo. Después, dijo el líder de la oposición, querría sumar a otros partidos de la Cámara, incluido Unidas Podemos, que Feijóo ve esencial por ser parte del Gobierno.