AYUNTAMIENTO DE MADRID

Recupera Madrid busca cobijo electoral en la plataforma de Yolanda Díaz

Los escindidos de Más Madrid no se presentarán como partido independiente a las elecciones municipales de 2023 y ofrecen su “experiencia de gestión” a la vicepresidenta para integrarse en las candidaturas locales. En el Ayuntamiento vuelven a tender sus votos a Almeida para que saque adelante los presupuestos y se desprenda de Vox.

Recupera Madrid

Recupera Madrid / Moeh Atitar de la Fuente / RM.

Elena Marín

Elena Marín

Se presentan como la izquierda pragmática y “no negacionista”. Los de Recupera Madrid, la agrupación de los escindidos de Más Madrid en el Ayuntamiento de Madrid, quieren gestionar y no hacer activismo desde los sillones municipales, dicen. Pero en la izquierda son vistos como unos bichos raros que no se sabe muy bien a qué juegan y que se acercan demasiado a la derecha. Para la derecha, en cambio, siguen siendo una versión más del arco progresista.

Están en tierra de nadie y lo saben, pero hacen como si no les importara: se sienten incluso cómodos en ese papel rebelde y creen que pueden recorrer camino en el Ayuntamiento de Madrid en lo que resta de legislatura, condicionar la política local gracias a la aritmética municipal y, con ese bagaje, buscar cobijo en la plataforma que lidere Yolanda Díez. Tanto si ese proyecto conlleva volver a coincidir en listas con algunos de sus exsocios de Más Madrid. Otra cosa es que sus excompañeros de escaño les acepten o quieran condicionar su presencia.

Formaron parte de la agrupación de electores que encabezó Manuela Carmena en 2015, algunos procedentes de Podemos; gestionaron diferentes áreas de Gobierno con ella al frente del Ayuntamiento; se integraron después en Más Madrid cuando Carmena se marchó; hace solo seis meses se separaron y crearon el movimiento Recupera Madrid hasta conseguir grupo propio en el Ayuntamiento; ahora van por libre y aseguran que no se presentarán como partido independiente en las próximas municipales. Pero ante el panorama que se presenta en 2023, buscan asilo electoral.

El activismo para las calles

En su haber, explican distintos miembros de la formación, está la “experiencia de gestión”, algo que defienden como valor en una posible candidatura frente a la gran parte de los miembros de Más Madrid o de Podemos. A las instituciones, apuntan, se llega para gestionar y gobernar, no a hacer activismo, y eso implica ser prácticos, conseguir mejorar las condiciones de los ciudadanos en la medida en la que la suma de sus votos lo permiten y no reventar el sistema desde dentro haciendo activismo. Para esto último, están las calles, rematan.

Por eso confían en el proyecto que quiere desplegar Yolanda Díaz. Defienden sin fisuras que es necesaria una candidatura única a la izquierda del PSOE y que aglutine las distintas sensibilidades de este amplio electorado y están convencidos de que habrá una delegación madrileña de ese proyecto en las próximas elecciones autonómicas y locales, al menos en Madrid. Y quieren estar en él. Entienden que liderados por Mónica García, aunque para que esto último suceda la actual portavoz de Más Madrid en la Asamblea tendría que soltar la mano de Iñigo Errejón, que, de momento, no se plantea diluir su marca en el proyecto de Díaz. En el entorno de la portavoz, ante la pregunta de qué pasaría en su relación con Errejón si se da esa llamada a filas de la vicepresidenta, se apresuran a decir que la presencia de Mónica García en el acto previsto en Valencia con Mónica Oltra y Yolanda Díaz es solo eso: un acto de mujeres líderes de la izquierda sin segundas lecturas.

Condicionar a Almeida

Apenas son cuatro concejales en el Ayuntamiento de Madrid, en principio, poco peso para pretender ser decisivos en nada de relevancia política en una corporación compuesta por 57 ediles. Pero lo cierto es que han conseguido hacerse un hueco buscando resquicios en los que colarse en la política local de la capital de España. Y ahí es donde ellos aseguran que quieren quedarse, en el ámbito municipal. Pero condicionando la política y, a poder ser, gestionando de nuevo.

Que son capaces de lo primero lo pusieron de manifiesto con la aprobación de la ordenanza municipal sobre Madrid 360, una versión retocada de Madrid Central que los partidos de izquierda deploraron por considerarla demasiado permisiva con el tráfico y las consecuencias en la contaminación del aire.

Presupuestos municipales

Ahora quieren demostrar que están en condiciones de volver a hacerlo con los presupuestos municipales, aunque lo tienen más difícil. Se han vuelto a ofrecer como comodín de José Luis Almeida para sacar adelante las cuentas municipales, aunque el alcalde ya ha declarado que cuenta con Vox como socio preferente. Los ediles de Recupera Madrid se presentan, precisamente, como cordón sanitario a Vox, algo que desde Ciudadanos ven con buenos ojos, pero hay que bajar a negociar la letra pequeña y en las enmiendas se verá si se encuentran realmente con el grupo de Villacís o si ambos, el Grupo Mixto y Ciudadanos, se quedan en palabras. De momento, no hay convocatoria de reuniones formales a la vista para estas negociaciones.

En un encuentro informal con los medios, el concejal Luis Cueto aseguró que están dispuestos incluso a hablar de las rebajas fiscales presentadas por el gobierno municipal, que aprobó la semana pasada unas ordenanzas fiscales que reducirán hasta 60 millones los ingresos de las arcas municipales, principalmente por la disminución del IBI por tercer año consecutivo. Los escindidos de Más Madrid saben que el leitmotiv del PP es bajar los impuestos todo lo posible, pero plantean que se debe ser “más agresivos” en las reducciones de impuestos con aquellos “que lo pasan mal” y subírselos a quienes salen más beneficiados.