Opinión | VENGA, CIRCULE

¿AITA?

Una argumenta que se insultan los desconocidos en las redes sociales, se insultan los periodistas y los famosos en la televisión y se insultan los políticos durante el ejercicio de sus funciones. Ya no se está a la gresca, se vive en ella

Una imagen de la aplicación TikTok

Una imagen de la aplicación TikTok

Hablo con amigos sobre la impasividad y la indiferencia que parece enfermar a tanta gente hoy, algunos concluyen que la mayoría de las personas están y se sienten muy solas, y uno de los peores asesinos silenciosos es el no tener un lugar en los demás, enfrentarlo todo sin un brazo que rodee los hombros. Antes de convertirse uno en cadáver putrefacto que denuncian los vecinos por el mal olor lo primero que fallece es el espíritu. Debatimos sobre la maldición del grupo y la masa, puede resultar hasta peligroso ser vulnerable estos días. El consejo que nadie se atreve a repetir: «No seas tú mismo».

Ah, cómo odiamos, cómo detestamos a los demás o a la gente. No formamos nosotros parte nunca de esos sintagmas, el infierno nace tras la segunda persona del singular. Alguien se queja de que el diálogo honesto, genuino y respetuoso se ha convertido en una reliquia de tiempos pasados, un artilugio casi extraño, porque ya apenas nadie escucha o lee para comprender. Lo único que queremos es replicar. Cerrar el intercambio con la última palabra, a poder ser en forma de corte ingenioso asestado con alevosía. Zascas, wins, vete a llorar a la llorería, por ahí llega la bbbbuambulancia…

Una argumenta que se insultan los desconocidos en las redes sociales, se insultan los periodistas y los famosos en la televisión y se insultan los políticos durante el ejercicio de sus funciones. Ya no se está a la gresca, se vive en ella. Por qué o para qué íbamos a entendernos el uno al otro, no es sexy y no genera engagement. Queremos capturas de nuestra graciosísima réplica y hacernos virales. Es curioso, tememos el juicio de las personas en las que confiamos y el de completos extraños por igual. Aun así prácticamente todo lo que consumimos fue creado para someterse a la opinión de los demás: vídeos de Un día en mi vida, Toda la ropa que me puse esta semana, Maquíllate conmigo, Diario de todo lo que comí este puente. Nos volvimos adictos al feedback. Si una publicación no llega a la cantidad de likes considerada óptima como para aparecer junto al lado del corazoncito el emisor de la imagen termina decidiendo ocultar esa información. Es ridículo, es penoso. 

Se ha puesto de moda hablar de la ternura como elemento revolucionario y es cierto, la ternura puede desactivar la ponzoña y ser disruptiva, pero se me queda encima la sensación de que quienes más   insisten en esto siempre son, al final, las personas más crueles e implacables con las que nadie puede cruzarse. Cada vez más solas, cada vez más raras -en algunos casos también más estúpidas y simples- miles de personas prefieren abrirse ante otros miles de extraños en foros de Internet antes que recurrir a sus familiares directos o apoyarse en sus amigos y pedirles consejo.

Viven en Reddit, en el subforo r/AmItheAsshole?, al que acuden de forma anónima para someter al juicio del resto de usuarios conflictos, dilemas o situaciones donde no tienen del todo claro si son víctimas o, como indica el nombre del subforo, unos cretinos. Estos son algunos de los posts más recientes: «¿Soy (M31) un cretino por no querer seguir ayudando económicamente a mi familia?», «¿Soy (F28) una cretina si no quiero que ninguna de mis cuñadas sea mi dama de honor en mi boda?», «Mi (F35) pareja (M34) ha dejado de ducharse. ¿Sería una cretina si le dijera que huele bastante mal?», «¿Soy (M38) un cretino por tener guardados vídeos con mi ex en el móvil? Mi novia (F36) lleva varios días enfadada».

Será cierto que a medida que crecemos y nos hacemos mayores se vuelve muchísimo más complicado forjar nuevas amistades. Todo lo que no importaba apenas en nuestras primeras dos décadas de vida termina convirtiéndose en la línea que nos separa del otro y nos hace recelar. Se buscan conexiones reales pero no se sabe muy bien cómo propiciarlas, así que se pregunta en foros de Internet y se espera con paciencia a que desconocidos nos den consejos y nos traten con esa ternura revolucionaria de la que tanta gente habla en vez de mofarse de nuestras inseguridades.