Opinión | APUNTE

Los ertes de la energía que vienen

Calviño prefiere no hablar aún de expedientes de regulación de empleo por la crisis energética, pero trabaja para financiar con dinero europeo el nuevo mecanismo de ertes

Instalaciones de Arcelor.

Instalaciones de Arcelor.

La multinacional ArcelorMittal ha planteado a los sindicatos un expediente de regulación temporal de empleo (erte) para los 8.300 trabajadores de sus once plantas en España, por un periodo de un año, por la caída de la demanda y el precio de la energía. En los primeros días de septiembre, seis azulejeras de Castellón han aprobado nuevos ertes y ya son 47 los expedientes de regulación de empleo en este sector, aprisionado por los precios del gas. Acerinox ya ha aplicado un erte en la primera quincena de septiembre. Por su parte la factoría de Ferroatlántica en Cantabria también ha parado todos sus hornos por el elevado coste de la energía y el comité de empresa no sabe cuándo podrá retomar su actividad.

La crisis energética está pasando factura a la industria y el goteo de ertes ha empezado con fuerza ya desde finales del mes de agosto. Los sindicatos están planteando al Gobierno que ponga en marcha las ayudas sociales del mecanismo RED para esta generación de ertes energéticos pero la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, se resiste. Al menos, de momento. "Nuestro objetivo es que nadie pare. Nuestra prioridad es seguir impulsando el crecimiento económico y mantener la actividad", dijo la vicepresidenta en respuesta a esta demanda en el Foro Nueva Economía, este jueves. Calviño desgranó las medidas ya adoptadas para ayudar a la industria electrointensiva a transitar por la actual crisis enegértica y dejó claro que el Ejecutivo no quiere jugar la carta de los ertes. Al menos, no todavía, para no alimentar el pesimismo en las puertas de un temido otoño. Pero la realidad es tozuda y el goteo de ertes empieza a causar alarma. Calviño no lo reconoce en público, pero en sus encuentros con representantes políticos y sociales para hablar de la adenda al Plan de Recuperación que está ultimando el Gobierno para poder acceder a 70.000 millones en préstamos de los fondos europeos, la vicepresidenta está explicando que una de las principales novedades de este documento es la previsión de destinar parte de este dinero a financiar los ertes del nuevo mecanismo RED que podrían imponerse en los próximos meses si la crisis energética no mejora.