ALIMENTACIÓN SANA

Colombia se planta contra la 'comida chatarra' con un 'impuesto saludable'

Los alimentos ultraprocesados serán gravados con un impuesto que comienza con el 10% e irá aumentando progresivamente

La paradoja de los alimentos en Colombia: desperdicio con hambre

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, en un acto oficial

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, en un acto oficial / Sebastián Barros (Zuma Press)

Las bebidas azucaradas, las golosinas, ciertos embutidos y salsas industrializadas, o patatas fritas y similares son algunos de los alimentos que se van a ver afectados por el 'impuesto saludable' que se ha establecido en Colombia. La propuesta ha sido impulsada por varias agrupaciones populares que abogan por una nutrición y unos hábitos de vida más sanos y, posteriormente, acogida por el equipo de gobierno.

El actual presidente, Gustavo Petro, lleva en el cargo desde agosto de 2022. En conjunto con el Ministerio de Salud y Protección Social, en sus comunicaciones hacia la ciudadanía han mantenido que tienen "un compromiso con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Banco Mundial, la OCDE y Unicef" en el ámbito de las políticas de salubridad.

El mandatario colombiano ha acometido una Reforma Tributaria. Siguiendo esta línea mencionada, una de las medidas aprobadas incluye este impuesto que concierne a los alimentos ultraprocesados y a las bebidas azucaradas, para desincentivar su consumo. El Ministerio de Salud y Protección Social ha informado de la entrada en vigor del impuesto saludable este jueves 2 de noviembre.

El porcentaje del tributo será del 10% durante estos dos últimos meses de 2023. Más adelante irá aumentando y será del 15% en 2024 y del 20% en 2025. En cuanto a las bebidas, la cantidad gravada dependerá del nivel de concentración de azúcar.

Los productos con exceso de azúcares u otros edulcorantes, sodio, grasas trans y saturadas verán aumentados sus precios a causa de esta tasa y deberán lucir un "sello frontal de advertencia" -es decir, una inscripción visible en el exterior del envase. Esta etiqueta, homologada por la Organización Panamericana de la Salud y por la OMS, es un símbolo octogonal con fondo negro.

La Subdirección de Salud Nutricional, dependiente del citado Ministerio, pretende alejar a la sociedad de la llamada 'comida chatarra' y fomentar, a cambio, alimentos más saludables como verduras, carnes, huevos o legumbres. Asimismo, desea promover la lactancia materna.

Por otro lado, desde la industria se ha tratado de imponer resistencia durante los últimos años a la instauración de tributos de este tipo y se alega el escaso límite de beneficios que podría suponer para los pequeños comerciantes, que tienen más dificultades para ajustar los precios.

De igual modo, hay consumidores que se quejan de la subida del coste de estos productos, en el contexto de una inflación acumulada en Colombia durante 2023 del 8%, según los cálculos de la plataforma de estadísticas datosmacro.com.

Sin embargo, el Índice de Precios de Consumo (IPC) alcanzó un pico álgido en febrero de este año y desde entonces ha ido disminuyendo, según esta misma base de datos. En septiembre se ha percibido una bajada de 4 décimas con respecto al mes previo.

Por otra parte, las autoridades colombianas han recordado los resultados preocupantes de la Encuesta Nacional de la Situación Alimentaria y Nutricional de 2015, en la que se observaban altos índices de sobrepeso en niños y en adultos. En la mitad este del territorio continental, así como en las islas de San Andrés y Providencia, entre un 60% y un 70% (según los departamentos) de la población tiene un exceso de peso en función a los valores recomendados.

Ahora que ha entrado en vigor este 'impuesto saludable', las industrias y puntos de venta deberán ajustarse a la legislación en este marco hacia una mejora de la alimentación de la ciudadanía colombiana.