¿Podemos congelar aguacates?

Los aguacates son frutos que están repletos de propiedades saludables para nuestros cuerpos y que son recomendables añadir en nuestra dieta. No solo fortalecen es sistema inmune, sino que son una gran fuente de vitamina C, rico en fibra y grasas monosaturadas. Todo un aliado perfecto para el sistema nervioso, ya que tiene un alto contenido en potasio y magnesio, además de sus propiedades antiinflamatorias que actúan como antioxidante.

No solo son enormemente sabrosos, sino que los aguacates son muy versátiles en la cocina. Son capaces de mejorar el colesterol y equilibrarlo y ayudan a controlar la tensión, aportando hierro y calcio. Por todas estas razones estamos delante de uno de los alimentos más saludables para añadir a nuestra dieta.

Un alimento casi de lujo

Sin embargo, no todo podía ser perfecto. Y es que este fruto es uno de los más caros en nuestra cesta de la compra. Con la llegada de la inflación todos los precios se han disparado, pero el aguacate se ha convertido en producto casi de lujo. Debido a su elevado coste conviene conservarlos bien para evitar que se estropeen.

Una de las soluciones más efectivas es mantenerlo en el congelador. El aguacate se puede congelar sin ningún riesgo. El único efecto adverso puede ser que el fruto pierda algo de textura firme y se ablande ligeramente.

Aquí te explicamos cómo debes hacerlo para tenerlo siempre a mano y aprovechar sus ricas y saludables propiedades.

Si ves esto al abrir un aguacate tíralo inmediatamente a la basura

Si congelas un aguacate podrás consumirlo hasta 5 meses después sin problema, mientras que en la nevera apenas durará dos días. En caso de lo que hayas comprado muy verde, te puede durar algo más mientras va madurando por sí solo. Pero siempre a temperatura ambiente.

Congelar un aguacate requiere que este no esté demasiado verde ni demasiado maduro. Es por eso la mejor manera de conservarlo maduro es cortarlo por la mitad.

¿Cómo es el proceso?

¿No sabes por dónde empezar? Coge un cuchillo y dibuja una línea al rededor del fruto, después gira ambas mitades en sentido contrario para que se abra. A continuación deberás extraer el fruto ayudándote de una cuchara.

Volviendo con el proceso de congelar este fruto, el siguiente paso consiste en extraer el hueso y untar la "carne" sin cáscara en zumo de limón. Suavemente, debemos impregnar el aguacate sin empapar, ya que corremos el riesgo de que se ablande.

Y para finalizar, vamos a introducir las dos mitades en una bolsa de congelado hermética quitando todo el aire posible y al congelador.

Aunque esta sea la opción más fácil y segura, aquí te traemos otra alternativa por si prefieres mantener el aguacate en formato guacamole listo para untar cada mañana. Y es que podemos triturar el aguacate y congelar de forma hermética. Es otra gran alternativa aunque perderá su textura. No podemos olvidarnos de añadir unas gotas de limón para conservarlo y evitar el tomo negruzco de la oxidación.