Polémica

Estos perros corren peligro desde hoy en el Reino Unido: pueden ser sacrificados

Una ley vigente desde este 1 de febrero obliga a registrar y castrar a los American Bully XL para permitirles seguir con vida

Un ejemplar de American Bully XL, que Reino Unido quiere eliminar del país

Un ejemplar de American Bully XL, que Reino Unido quiere eliminar del país / RTF23

Redacción

Tal y como ya se había anunciado, finalmente el Reino Unido ha dado un paso en su intención de prohibir la tenencia de los perros de raza American Bully XL en ese país. A partir de este día 1, ser propietario de un perro de esta raza se convertirá en un delito penal si no está convenientemente registrado, como un primer paso del Gobierno británico para eliminar gradualmente esta raza, a la que se ha culpado de ataques mortales a humanos y otros animales.

La prohibición, ordenada el año pasado por el primer ministro Rishi Sunak después de una serie de ataques y una protesta pública, ha puesto de relieve una raza cuyo tamaño y fuerza la convierten en un símbolo de estatus para algunos y un objeto de miedo para otros muchos.

Sonia Faleiro, una escritora de 46 años, ha sido una de las mujeres que ha descrito uno de esos ataques de tres perros American Bully XL en un parque de Londres, que llegaron a matar a su mascota Jack Russell, Zoey, y dejaron a su marido -que intervino- malherido, según ha asegurado a la agencia de noticias Reuters.

Es una raza que ocasiona numerosos problemas, según el gobierno británico

Es una raza que ocasiona numerosos problemas, según el gobierno británico / Pinterest

Poco más de una década

La raza Bully XL está presente se introdujo en el Reino Unido en la década de 2010. Es un cruce de varias razas, incluido el American Pit Bull Terrier. El tamaño y la fuerza de estos ejemplares los convierten en un objeto de deseo de aquellos que participan en peleas de perros ilegales.

Más de 30.000 American Bully XL han sido registrados para obtener una exención que permita a sus dueños mantenerlos con vida bajo unas estrictas condiciones, que incluyen el uso de bozal en público y la esterilización para evitar la reproducción.

Multas y prisión

Aquellas personas que no lo tengan convenientemente registrado se enfrentan a cuantiosas multas y hasta seis meses de prisión, e incluso podrían tener que sacrificar a sus mascotas en caso de ser reincidentes.

La Campaña para la Regulación de Perros Peligrosos Basada en Evidencia (Cebrdd), que apoya la prohibición, muestra en su investigación que el número de muertes por ataques de perros en Inglaterra y Gales había pasado de unas tres anuales antes del año 2021 a cerca de diez al año en 2022 y 2023.

Ejemplar de la controvertida raza

Ejemplar de la controvertida raza / Agencias

Terry Wigzell, que vive con dos Bully XL, asegura que la prohibición señala injustamente a los perros y no a las personas culpables: los dueños irresponsables.

Castigo

"No se puede juzgarlo simplemente por su aspecto", asegura. "Cuando le pongo el bozal [a Duke, su perro Bully XL de 20 meses] y lo llevo a caminar. Como que me mira... creo que piensa que lo estoy castigando".

Al anunciar la prohibición en septiembre, el primer ministro Sunak describió a los perros como "un peligro para nuestras comunidades, en particular para nuestros niños".

La organización benéfica de bienestar animal más grande del Reino Unido, RSPCA, asegura que se necesitaban acciones urgentes para proteger a las personas, pero se opone a una legislación específica sobre algunas razas.