REBELIÓN VECINAL

Almeida deja a dos barrios sin polideportivo para recibir refugiados: "Al lado hay un pabellón vacío"

El Ayuntamiento avisa con dos días de antelación de su cierre a los usuarios del Daoiz y Velarde

Los usuarios solicitan que se reubiquen las actividades y abren campaña en Change.org

Hay una enorme nave al lado de este centro cerrada desde hace tres años

"Muchos usuarios mayores usan el polideportivo por prescripción médica", dice un afectado

Las camas de la Cruz Roja, preparadas para la llegada de refugiados ucranianos

Las camas de la Cruz Roja, preparadas para la llegada de refugiados ucranianos / Alba Vigaray

Analía Plaza

Analía Plaza

Los usuarios del polideportivo municipal Daoiz y Velarde —que da servicio a los más de 50.000 vecinos residentes en los barrios de Pacífico y Adelfas, en el distrito madrileño de Retiro— recibieron el viernes pasado un mensaje de texto avisando de su cierre inmediato hasta nuevo aviso. El texto emplazaba a los abonados a devolver en su banco el recibo de abril, en caso de tener la cuota domiciliada.

"Fue totalmente inesperado", dice a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA Antonio Fernández, presidente del club de salvamento deportivo de competición, un deporte acuático que practican en la piscina del centro. "El jueves leímos una noticia en el periódico [el ayuntamiento publicó una nota de prensa antes de avisar a los usuarios]. Como yo soy responsable de un club, llamé a mi interlocutora en el centro y me dijo que también acababan de enterarse. Y que el lunes no volviéramos. Hay muchos usuarios mayores cuya vida social gira en torno al polideportivo, o que lo usan por prescripción médica porque hay servicio de fisioterapeuta. Somos muchos los afectados".

El motivo del cierre era la designación temporal del centro como espacio "de tránsito" para refugiados ucranianos: esto es, un lugar en el que descansar las horas que necesiten entre tren y tren.

Trabajadores de la Cruz Roja preparando comida para la llegada de refugiados

Trabajadores de la Cruz Roja preparando comida para la llegada de refugiados / Alba Vigaray

El polideportivo, ubicado en unos antiguos talleres militares que permanecieron abandonados durante décadas y se recuperaron gracias a la movilización ciudadana, está a unos quince minutos andando de la estación de Atocha.

La Cruz Roja, entidad contratada por el Ministerio de Inclusión para atenderlos a su llegada, ya ha montado dos centenares de tumbonas en el pabellón principal —el que se utiliza para las clases de gimnasia y baloncesto— y mesas en el distribuidor para que puedan sentarse a comer. Hay también varias unidades de carga para que llenen las baterías de sus teléfonos móviles. Este mismo lunes por la mañana la vicealcaldesa Begoña Villacís y el concejal del distrito, Santiago Saura (C's) fueron a fotografiarse en la inauguración.

El repentino cierre del centro ha sorprendido a los vecinos del distrito por dos motivos.

En primer lugar, por la ausencia de alternativas para el deporte. "No tenemos ninguna intención de que se desaloje a los refugiados, aunque creamos que hay mejores lugares para recibirlos", continúa Fernández. "Pero si no los hubiese, lo que tendrían que hacer es darnos a nosotros otra opción. ¿No?". Los afectados han abierto una petición en Change.org para que el Ayuntamiento reconsidere su decisión.

En segundo lugar, porque se da la paradoja de que junto al centro deportivo hay una enorme nave industrial de casi 7.000 metros cuadrados que lleva cerrada tres años por una gotera. Se trata de la nave Daoiz y Velarde, un espacio diáfano que entre 2015 y 2019 funcionó como centro social, cultural y juvenil que cerró tras la llegada de Almeida al Gobierno.

La nave cerrada y en desuso desde hace tres años

La nave cerrada y en desuso desde hace tres años / Alba Vigaray

"En 2019 se cerró para acometer obras, entre ellas unas filtraciones que ya están arregladas, según nos confirmaron en una visita oficial que hicimos a principios de marzo", explica Verónica López, portavoz de la plataforma Súbete a la Nave, que reivindica su reapertura desde hace más de un año.

"No entramos en si el polideportivo es apto o no para los refugiados, pero queremos visibilizar que al lado hay un pabellón vacío que podría servir para llevar las actividades deportivas. Es una muestra de la mala gestión de este Ayuntamiento, que podía haber anticipado que Madrid tendría que ejercer esta labor, más allá de que haya sido el Ministerio el que haya pedido el equipamiento. Sospechamos que el Ayuntamiento ni siquiera les ha ofrecido la nave".

¿Una petición "expresa" del Gobierno central?

Tanto al anunciarlo como en comunicaciones con los usuarios afectados, el Ayuntamiento de Madrid ha defendido estos días que la cesión del polideportivo se hace "por petición expresa" del Ministerio de Inclusión.

Fuentes del departamento dirigido por José Luis Escrivá apuntan que no hubo una "petición expresa" del polideportivo, sino que se solicitó un espacio en las proximidades de Atocha con ciertos requisitos y que el Consistorio solo ofreció este lugar. Las conversaciones se mantuvieron por email hace unos quince días.

Hasta ahora, los refugiados que llegaban de Ucrania permanecían en la propia estación. "Les atendemos en Atocha, pero no vas a dejarles ahí. Dependiendo del perfil y de las horas a las que llegaran, les hemos llevado a hoteles que se nos han ofrecido", cuenta Pepe Sánchez, director de inclusión social de Cruz Roja.

"Para grupos numerosos, es más cómodo que haya un sitio de tránsito donde poder ofrecer comida, bebida, una litera para descansar y una ducha si hubiera oportunidad. Enviamos unas especificaciones estándar, de metros cuadrados, número de aseos y número de duchas, y se nos propuso este polideportivo. Fuimos a visitarlo este mismo sábado".

Comedor preparado en el centro deportivo para los refugiados

Comedor preparado en el centro deportivo para los refugiados / Alba Vigaray

La nave en desuso cuenta con baños pero no con duchas, a diferencia del polideportivo que sí tiene duchas (aunque la mitad de ellas no tiene agua caliente en estos momentos, según confirman varios usuarios y fuentes del centro a este periódico). Con respecto a las duchas, el director de inclusión social de Cruz Roja asegura que no hubiera sido un problema montar el dispositivo en la nave y que los refugiados acudieran a las duchas del centro deportivo.

Sin embargo, desde el Área de Gobierno de Familias del Ayuntamiento apuntan a este diario que "las especificaciones solicitadas por el Ministerio solo las cumple este polideportivo" y que la nave "no tiene climatización" en estos momentos.

La eterna obra de la nave

"Se supone que están reparando la climatización. Pero llevan tres años con ello. Al menos, eso es lo que nos dicen cuando preguntamos", dice la portavoz de Súbete a la Nave, que asegura que los carteles de obra se quitaron hace ya varios meses. "El otro día vi en un reportaje que el monasterio de El Escorial tardó 21 años en construirse. Pronto hará 21 años desde que empezó la obra de la nave".

Pese al período de inflexión que hubo durante la anterior legislatura, la nave de Daoiz y Velarde lleva desde 2003 esperando a ser rematada para su apertura total.

Además del espacio superior, hay un auditorio en la planta baja con acceso independiente que nunca ha llegado a estar abierto. "A pesar de que quedaban cosas por terminar, como ese auditorio, entre 2015 y 2019, durante el mandato de Manuela Carmena, la nave estuvo abierta para multitud de actividades", continúa. "Las obras del auditorio son compatibles con el uso del espacio, como se demostró en esos cuatro años".

Este lunes, en cualquier caso, no había ni rastro de obras en la nave, que sí cuenta con servicio de vigilancia y acoge cierto trabajo administrativo, según se observa desde fuera.

Exterior del polideportivo y la nave (parte izquierda de la foto) en desuso

Exterior del polideportivo y la nave (parte izquierda de la foto) en desuso / Alba Vigaray

Un portavoz de Madrid Destino, la empresa municipal que se encargará de su gestión, dijo a El País recientemente que los trabajos terminarían a finales de marzo y la reapertura se haría a finales de 2022.

"Siempre que preguntamos nos dicen que esto va para largo", dice López, "así que tememos que vaya a ser utilizada como herramienta electoral y se reabra justo antes de las elecciones de 2023".

Tanto los vecinos afectados por el cierre del polideportivo como los que reivindican la reapertura de la nave han manifestado su malestar al Ayuntamiento, que este mismo lunes ha reculado y enviado un nuevo mensaje de texto diciendo que valora su reapertura parcial o reubicación de las actividades. Además, pide que no devuelvan los recibos de abril, como les indicó hace solo dos días.

Este es el texto del mensaje:

"Como continuación al SMS remitido el pasado 25 de Marzo con relación a la supresión temporal de los servicios del Centro Deportivo Municipal Daoiz y Velarde, les comunicamos que se esta valorando la apertura parcial del centro en aquellas unidades deportivas que lo permitan y la reubicación en edificios municipales próximos de aquellas otras que se vean afectado, por lo que les rogamos procedan a NO devolver los pagos correspondientes al mes de Abril. Irán recibiendo más información según vayamos disponiendo de ella".