SECTOR AGRÍCOLA

El campo italiano muestra el hacha de guerra y traslada la protesta de los tractores a Roma

En estas circunstancias, la protesta ya está empezando a salpicar también al Gobierno de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en estos momentos de viaje en Japón

Los agricultores italianos continúan protestando contra lo que dicen que es perjudicial para la agricultura europea políticas, haciéndose eco de manifestaciones en otras partes de Europa, incluidas Alemania, Bélgica y Francia.

Los agricultores italianos continúan protestando contra lo que dicen que es perjudicial para la agricultura europea políticas, haciéndose eco de manifestaciones en otras partes de Europa, incluidas Alemania, Bélgica y Francia. / EFE

Irene Savio

Irene Savio

La cólera del campo europeo se mantiene en Italia. Después de días de manifestaciones casi continuadas, diversas agrupaciones del sector agrario italiano han anunciado que su protesta continuará esta semana en la capital de Italia. El objetivo es unir en Roma a agricultores de distintas partes del país y dar así más fuelle a la movilización, que ya la semana pasada provocó diversas colas en algunas de las principales carreteras italianas y altercados con las fuerzas del orden.

Con ello, colectivos como Riscatto Agricola (Rescate Agrícola) abandonaron este lunes temprano, montados en centenares de tractores, el tramo de la estratégica autopista A1 -donde en los pasados días efectuaron diversos bloqueos-, en dirección de Roma. Aquí donde ya se han instalado, en al menos en otros cuatro puntos cercanos a la ciudad, otros grupos de agricultores, supuestamente venidos también para una gran manifestación que debería llevarse a cabo en los próximos días.

"Asediaremos Roma, y no solo por un único día", ha advertido Danilo Calvani, líder de CRA Agricultures Traicionados, otra de las agrupaciones minoritarias que en estos días están siendo el rostro visible la protesta. “Y queremos que la política no se meta en nuestras reivindicaciones, así solo crearíamos divisiones”, ha añadido.

Capitalizar el descontento

En estas circunstancias, la protesta, inicialmente nacida como un toque de atención a la Unión Europea (UE) por el llamado Pacto Verde y otras políticas que los agricultores ven como dañinas para su sector, ya está empezando a salpicar también al Gobierno de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en estos momentos de viaje en Japón. "Si (Meloni) quiere recibirnos para tomarnos el pelo es mejor que no lo haga. En cambio, si de verdad puede cambiar las cosas… pero lo dudo", ha advertido, en esta línea, Calvani. 

Por su parte, también uno de los principales socios de la mandataria, Matteo Salvini, el líder de la ultraderechista Liga, ha vuelto a pronunciarse una vez más sobre la situación, en un nuevo intento de capitalizar el descontento de los agricultores. "Estoy de acuerdo con los agricultures. La UE hace política anti-agrícolas y alocadas", ha dicho el ultraderechista.

Un argumentario, a juzgar también por los comentarios de otros políticos de la misma formación, parece ya el discurso que esta formación piensa mantener como su postura sobre la protesta. "El Pacto Verde europeo es un delirio", ha coincidido, por ejemplo, Massimiliano Romeo, jefe de la bancada de la Liga en el Senado. La paradoja está en que "existen restricciones a las emisiones en Europa", pero luego "importamos productos de países terceros que no cumplen con nuestras reglas", ha argumentado, haciendo suyo el discurso de los agricultores.