DOCUMENTOS FILTRADOS

Israel disponía desde hace un año de los planes de ataque de Hamás: "No se los tomaron en serio"

The New York Times desvela un documento de Hamás en el que se detallaba un asalto a Israel calcado al que se produjo el 7 de octubre | Analizamos el impacto de la revelación con dos expertos en seguridad regional

Presuntos miembros de Hamas sobre un paracaidas con motor

Presuntos miembros de Hamas sobre un paracaidas con motor

Mario Saavedra

Mario Saavedra

Los máximos responsables políticos y militares de la seguridad de Israel tenían desde hace más de un año en su poder un documento de Hamás con planes detallados del ataque que perpetraría la milicia islamista el 7 de octubre, y en el que murieron al menos 1.200 personas y 240 fueron secuestradas. El texto, titulado en clave Muro de Jericó, de unas 40 páginas, esboza una operación de entrada a gran escala en territorio israelí por varios frentes: sobrevolando la verja de seguridad con paracaídas motorizados o perforando el muro de separación con excavadoras tras reventar con explosivos lanzados desde drones caseros los sofisticados sistemas de detección israelíes.

En el documento, obtenido por el diario estadounidense The New York Times, se especifican también los objetivos de ataque: la base militar cercana a la Franja sitiada y cooperativas agrarias (kibutzim). Los responsables de usar esa inteligencia ignoraron el informe porque no creían que Hamás tuviera ni la voluntad ni la capacidad necesaria para llevarlo a cabo, a pesar de las advertencias de varios de sus analistas de inteligencia. Lo calificaron de "plan aspiracional" y pidieron "esperar pacientemente".

"Mucha gente se preguntaba cómo había sido posible que los altamente sofisticados servicios de inteligencia israelíes no hubieran anticipado los ataques. Este documento filtrado prueba que, de hecho, sí lo hicieron, pero los líderes políticos y militares simplemente no se los tomaron en serio", apunta a este diario Rob Geist, doctor en estudios estratégicos de la Universidad de Durham, en Reino Unido.

"Fue sobre todo un fallo de falta de imaginación: no creían que Hamás, a pesar de su ambición, pudiera llevar a cabo una estrategia de ataque total frontal, por tierra, mar y aire, con la habilidad técnica suficiente para coger a Israel por sorpresa", abunda Clive Jones, experto en seguridad regional, también de la Universidad de Durham y de la noruega NTNU. "La división de investigación de la inteligencia militar israelí, la famosa Sigint Unit 8200, y por supuesto el Shin Bet [inteligencia interna] no supieron conectar la línea de puntos, lo cual es muy sorprendente".

Todos los ejércitos y milicias del mundo preparan ataques que luego quizá nunca llevan a cabo. Son solo posibles escenarios, juegos de guerra. Pero en el caso de Hamás, no existía solo el documento revelado por el diario neoyorquino. Había fotos y vídeos de Hamás y otros grupos palestinos realizando ensayos generales de ataques a kibutzim circulando en redes como TikTok desde el pasado verano, apunta Jones. O vídeos que mostraban un centro computerizado de mando de Hamás, publicado por la BBC.

Documento con planes de Hamás

El documento con el plan de guerra de Hamás fue apodado por la inteligencia israelí como Muro de Jericó, en referencia a la antigua fortificación hebrea. Comenzaba planteando un ataque masivo de cohetes para distraer a los soldados israelíes y obligarlos a esconderse en los refugios. Así fue como efectivamente comenzó, al amanecer del sábado 7 de octubre, festivo, el que sería el peor ataque en suelo israelí desde la Guerra del Yom Kippur de 1973.

Después de haber despistado a los soldados, una flota de drones desabilitaría las medidas de seguridad en el muro de separación entre Israel y Gaza, uno de los más sofisticados y tecnológicos del mundo, que ha costado varios miles de millones de euros.

A continuación, se lee en el documento, algunos de los milicianos del brazo armado de Hamás, las brigadas Al Qassam, romperían la verja por sesenta puntos, y entrarían en territorio israelí. Otros lo sobrevolarían con paracaídas motorizados. "Sorpréndelos en la puerta de entrada. Si lo haces, prevalecerás", se lee en el texto, que cita el Corán. Esa misma frase aparecería en los vídeos de propaganda del ataque dirigido por Hamás.

Uno de los primeros objetivos fijados era la base militar de Re’im, que alberga a la división del Ejército hebreo (Tsahal) responsable de supervisar el control de Gaza. Los milicianos consiguieron de hecho tomar al asalto parte de esa base, y matar a sus soldados. En total, el 7 de octubre fallecieron alrededor de 300 soldados israelíes, entre ellos la hispano-israelí Maya Villalobo Sinvany.

"Hamás siguió la hoja de ruta con sorprendente precisión", se lee en el diario. "El documento circuló profusamente entre los líderes militares y de inteligencia israelíes, pero determinaron que la escala y la ambición estaba por encima de las capacidades de Hamás".

Responsables del fallo de inteligencia israelí

El fallo de inteligencia expone "una forma de pensar que minusvaloraba las capacidades de Hamás para adaptarse y evolucionar más allá del estereotipo de que tenían una capacidad militar limitada", sostiene Clive Jones. También demuestra un fallo serio en la coordiación y el intercambio de inteligencia entre las distintas agencias. "Incluso el hecho de que los que dieron la voz de alarma fueran mujeres oficiales de inteligencia apunta a un sesgo de género por el que quizá se le dio menos importancia a la información", apunta.

El fallo más importante ha sido quizá el de la llamada "inteligencia humana" (HUMINT). Es posible que no tuvieran suficientes soplones desplegados en Gaza.

El factor político también entra en la ecuación. Los líderes políticos habían fomentado el control de Hamás en la Franja en detrimento de la legítima Autoridad Nacional Palestina, que controla Cisjordania. En ese marco, Tel Aviv asumía que el grupo islamista querría mantener el control de Gaza. "La información que apuntara en sentido contrario era ignorada o diluida. Los líderes políticos y Netanyahu en particular son responsables porque han establecido una agenda política basada en el debilitamiento de la Autoridad Palestina y en permitir a Hamás controlar Gaza, para decir que no había socios para la paz".

Por último, Hamás tuvo también algo de suerte: la tensión creada en Cisjordania hizo que se desplegaran allí tropas destinadas a Gaza, debilitando las defensas contra milicia islamista.

Ambos analistas apuntan a que el documento Muro de Jericó será clave cuando llegue la hora de ajustar cuentas con las decisiones erróneas de aquellos que debían velar por la seguridad de los israelíes. "Cuando termine la guerra y pase la tormenta, sin duda será una pieza central en la fase probatoria de la inevitable comisión de investigación que se pondrá en marcha", asegura Geist. Una comisión que, eventualmente, podría llevarse por delante al primer ministro, Benjamin Netanyahu, que ya era rechazado con fuerza en las calles por su reforma para el control de la Justicia, y tiene varios casos abiertos por presunta corrupción.