LA FUERZA DE LA ESPAÑA PLURAL: PAÍS VASCO

País Vasco: en camino hacia una industria más sostenible

Euskadi mira al futuro centrándose en la implementación del transporte ferroviario, el fortalecimiento del turismo de calidad y la apuesta por la innovación como ejes esenciales de su evolución

San Juan de Gaztelugatxe, en la localidad vizcaína de Bermeo, es uno de los lugares más icónicos de la costa del País Vasco.

San Juan de Gaztelugatxe, en la localidad vizcaína de Bermeo, es uno de los lugares más icónicos de la costa del País Vasco. / TURISMO EUSKADI

El País Vasco afronta numerosos retos presentes y futuros que derivan de las nuevas necesidades que van surgiendo en materia política, económica y social y que pretenden vincular la actividad tradicional con la eficiencia y la competitividad de las nuevas tecnologías. El envejecimiento de la población, la atracción de empresas innovadoras, la transformación digital, los nuevos modelos comerciales y la descarbonización de la industria son algunos de los elementos clave a los que se orienta la estrategia de la región.

Con un producto interior bruto que asciende a los 71.906 millones de euros, el País Vasco se sitúa actualmente como la quinta economía española, habiendo recuperado ya sus cifras anteriores a la pandemia. También se alza como la región que más porcentaje de su PIB destina a la investigación y al desarrollo, concretamente un 2,3%. Su tasa de desempleo, ligeramente por encima del 7%, es la más baja de toda España, tal y como refleja la Encuesta de Población Activa.

A pesar de las buenas cifras de empleabilidad, una de las mayores preocupaciones de esta comunidad autónoma es hacer frente a la crisis demográfica. Con una natalidad que desciende cada año (un 4,4% en 2022) y una media de edad por ciudadano que ronda los 46 años, el País Vasco se enfrenta a los desafíos que impone el envejecimiento de la población. 

La reducción del número de habitantes en el entorno rural vasco está estrechamente ligada a la falta de vecinos jóvenes y de nacimientos. Como una de las medidas para paliar esta tendencia, la inmigración se presenta como una de las soluciones para incrementar la natalidad. Las cifras apoyan esta tesis, puesto que la población del País Vasco creció en 2.255 personas en el primer trimestre del año gracias al aumento de 4.834 habitantes extranjeros. Actualmente, viven en esta tierra 2.222.164 personas.

Entre los sectores con más peso en la economía vasca, los servicios, la construcción y la industria son los principales y los que más empleo generan, aunque la evolución de cada uno de ellos ha sido desigual durante el último año. Mientras que el primero se mantiene estable con tasas superiores a la media de la economía española, la segunda recupera rápidamente su crecimiento y la tercera ralentiza su productividad por la subida de los tipos de interés, el incremento de los precios y los altos costes energéticos.

Una de las singularidades de este territorio es que cuenta con su propio sistema fiscal, el Concierto Económico Vasco, lo que le permite contar con ventajas competitivas respecto a otras comunidades en materia de impuestos y herencias, entre otras aspectos. De hecho, las tres provincias que componen el País Vasco, Vizcaya, Guipúzcoa y Álava, son las que cuentan con los mejores beneficios fiscales de todo el territorio español, sólo por detrás de la Comunidad de Madrid, según el Índice Autonómico de Competitividad Fiscal de 2022.

Descarbonización

Para Euskadi, una de las claves fundamentales para su transformación sostenible es la descarbonización de su industria, que supone el 24% de su PIB, y la transición hacia una economía más circular. Pese a sus esfuerzos por conseguir incrementar en un 14% su producción eléctrica con renovables en 2021, la comunidad vasca se sitúa entre las regiones españolas que cuentan con una menor producción de energía verde.

A través de los fondos europeos Next Generation y la inversión del Ejecutivo autónomico, la industria vasca cuenta con grandes apoyos para impulsar la renovación de sus instalaciones hacia un modelo más respetuoso con el medioambiente. 

El Informe Voluntario de Seguimiento de la Agenda 2030 de Euskadi elaborado por el Gobierno vasco en 2022 apunta a que es necesaria una mayor divulgación de los objetivos sostenibles para que llegue a todo el tejido empresarial y social. También incide en la importancia de impulsar propuestas concretas para extender el compromiso con el consumo y la generación de energías renovables para dar respuesta al acuciante desafío del cambio climático.

En esta línea, más de 800 empresas y entidades vascas han adoptado ya en 2022 medidas destinadas al impulso de la economía circular, un 60% más que durante el ejercicio anterior, según la memoria de actividades relativa a 2022 de la Sociedad Pública de Gestión Ambiental del País Vasco (Ihobe).

‘Y Vasca’

El País Vasco tiene por delante el desarrollo de un ambicioso proyecto ferroviario que unirá las ciudades de Bilbao, Donosti-San Sebastián y Vitoria-Gasteiz. Se trata de una nueva red ferroviaria sostenible que unirá las tres principales localidades vascas y que contará con novedades como el soterramiento de sus vías para reducir el impacto ambiental de los trenes al pasar por zonas urbanas.

El País Vasco es una de las autonomías con más kilómetros de carreteras de alta capacidad.

El País Vasco es una de las autonomías con más kilómetros de carreteras de alta capacidad. / GOBIERNO DEL PAÍS VASCO

Otra mejora que introduce este proyecto es la decuación de las vías férreas a los estándares internacionales. La ampliación del ancho de vías permitirá conectar España y Francia a través de una misma red. De esta manera, desde el País Vasco se abrirá el camino en tren hacia Europa.

La ‘Y Vasca’ pretende ser un punto logístico estratégico en Europa y formar parte del llamado Eje Atlántico, un corredor que combinará servicios ferroviarios y portuarios para impulsar el transporte de mercancías. Durante el último año, las exportaciones crecieron en el País Vasco un 26%, siendo los sectores de la energía y los alimentos los más pujantes en este capítulo.

Comercio

El envejecimiento de la población es una realidad y, en este sentido, el comercio vasco se enfrenta al reto de regenerar sus plantillas y facilitar el acceso de los más jóvenes al mercado laboral. El Barómetro del Comercio Minorista de junio de 2023 refleja que únicamente un 14,1% de los puestos de trabajo en el País Vasco los ocupan empleados menores de 34 años, mientras que más de la mitad de estos negocios cuentan con trabajadores mayores de 45 años. 

El sector tiene también por delante la incesante tarea de continuar impulsando su propia transformación digital. Según el Observatorio de Comercio de Euskadi, más del 80% de los comercios vascos no desarrollan todavía su actividad de manera online. Tal y como reflejan los datos de 2022, la implantación de nuevas tecnologías como la venta por internet, los software de gestión o los diferentes métodos de pago sigue siendo escasa entre los establecimientos del País Vasco.

El comercio de la región también hace frente a una pérdida de competitividad debida al incremento de los precios de abastecimiento y de los costes de explotación como consecuencia de la situación global de inflación.

Turismo

El sector turístico, que supone el 4% del PIB autonómico, está experimentando una desestacionalización de su actividad, un reto importante para conseguir la estabilidad económica y la empleabilidad de la región.

El aumento de las temperaturas en la península ha traído consigo, según algunos expertos, un cambio de tendencia a la hora de escoger destino vacacional. Son cada vez más las voces que apuntan a que, ahora, los turistas miran cada vez más al norte de España en busca de refugio climático donde disfrutar de agradables temperaturas durante todo el año. Este nuevo paradigma ha conseguido que, además, se diversifique la oferta turística y se extienda más allá de las capitales de provincia.

Un grupo de jóvenes, de bar en bar (’txikitear’), tomando tragos de vino (‘txikitos’) y pintxos.

Un grupo de jóvenes, de bar en bar (’txikitear’), tomando tragos de vino (‘txikitos’) y pintxos. / GOBIERNO DEL PAÍS VASCO

El turismo internacional ha vuelto al País Vasco tras los años de incertidumbre por la pandemia, aumentando alrededor de un 20% en comparación con el nacional, que lo ha hecho en algo más del 5%. Según el Instituto Vasco de Estadística (Eustat), los establecimientos hoteleros de la región registraron en julio de 2023 un total de 803.887 pernoctaciones, un 4,9% más que en el mismo mes de 2022, mientras que las entradas (394.297) aumentaron un 2,9% en ese período. 

A pesar de que el sector turístico no se ha recuperado por completo de las consecuencias de la covid-19, el balance general es positivo y las previsiones indican que el País Vasco seguirá siendo un destino atractivo para visitar.

Innovación

La apuesta del País Vasco por la inversión en I+D es cada vez más evidente. La comunidad autónoma es la primera de España que en el gasto por habitante destinado a actividades innovadoras, algo más de 765 euros, según el INE. La producción científica en esta región también ha aumentado su presupuesto un 16% respecto a la prepandemia. Según los datos de Eustat, esta comunidad autónoma se sitúa un 10% por encima de la media de la Unión Europea en materia de innovación.

Entre las principales fortalezas del sector, que recoge el Ranking de Innovación de Regiones Europeas 2023 que elabora la Comisión Europea, se encuentra la venta de nuevos productos y la alta cualificación de la población joven. Ahora, el desafío radica en aumentar el porcentaje de pymes innovadoras y seguir elevando la inversión en esta materia.

Recientemente se inauguró el Energy Intelligence Center, un edificio que albergará el nuevo Campus Abanto de los Parques Tecnológicos de Euskadi y que ofrece un espacio para que las empresas desarrollen proyectos de I+D+I que estén vinculados a la transición energética.

Biosalud

La biosalud y la biotecnología son dos nuevos nichos de negocio que se abren paso en el País Vasco, y que ya suponen el 2,5% de su PIB en 2022. La medicina regenerativa, las terapias genéticas y la cibermedicina son los principales caballos de batalla identificados por el Basque Health Cluster (BHC) en un sector que ya supera los 10.000 profesionales.

El objetivo de esta pujante industria es lograr la financiación necesaria para el desarrollo de sus productos y, sobre todo, después de la subida de precios de las materias primas y de los costes como consecuencia de la situación de inflación derivada del contexto geopolítico actual. Aun así, las inversiones en áreas y programas de I+D+i en esta región superaron los 150 millones de euros.