El renacer tras el fuego: así se recuperan las sierras de la Culebra y Pujerra tras los incendios

Este mes de julio se recordará como uno de los peores para la Península. España arde y se mantiene en alerta por riesgo generalizado de incendios, con unas temperaturas que no acaban de bajar. En lo que va de año, los incendios forestales han arrasado casi 200.000 hectáreas en todo el país, según las estimaciones del Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales (EFFIS). 

El primer gran incendio forestal del verano se declaró el 8 de junio en la localidad de Pujerra (Málaga), cercana a Sierra Bermeja. El fuego volvió a cebarse con la provincia hace poco más de una semana, cuando las llamas llegaron al paraje de El Higuerón, en la Sierra de Mijas. Tras estos focos llegaron decenas más, especialmente graves en Zamora y distintas zonas de Galicia.

En esos y otros muchos espacios arrasados por el fuego, el trabajo no acaba con la extinción de las llamas. Tras ello, comienza un largo y laborioso trabajo de reconstrucción que ya comienza a dibujarse en las sierras de Pujerra y la Culebra, protagonistas de dos de los mayores incendios en lo que va de año.

La Sierra de Mijas es un enclave natural emblemático de la provincia de Málaga y desde hace tiempo se trabaja en iniciativas para declararlo parque natural. En el caso del término municipal de Alhaurín de la Torre, la zona de Jarapalos y la más cercana a la urbanización Pinos de Alhaurín ha sido la más afectada, aunque todavía habrá que hacer un estudio sobre el terreno.

Este incendio ha sido uno de los más graves que se recuerda en los últimos años en el municipio, ya que el balance provisional, que ha dado a conocer la Junta de Andalucía, cifra en un total de 2.097 las hectáreas afectadas por el incendio en la Sierra de Mijas, Alhaurín de la Torre y Alhaurín el Grande. 

Así lo afirmaba desde el puesto de mandos operativos la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible en funciones, Carmen Crespo, quien ya anunciaba que la preparación de un expediente urgente para proceder cuanto antes a realizar un estudio para una reforestación. 

El fuego provocó el desalojo de 2.300 personas, de las cuales 300 vecinos de Alhaurín de la Torre de urbanizaciones como Lauro Golf, Pinos de Alhaurín y colindantes. Dichas personas fueron realojadas en el Polideportivo Cubierto Municipal El Limón, que la primera noche fue ocupado por unas 45 personas.

Tras cuatro días, el fuego por fin se daba por estabilizado, pero ahora la sierra del municipio arranca su camino hacia una futura regeneración. Una recuperación que pasa por un proceso institucional, por ello el Ayuntamiento estudia una propuesta en la que se insta a la Junta a elaborar "a la mayor brevedad" un plan para reforestar la Sierra, así como otro plan de empleo público vinculado a las labores de gestión y limpieza de los montes.

El alcalde, Joaquín Villanova, remarcó que el futuro plan de reforestación que se realice se abrirá a la participación ciudadana. No obstante, recordó que se trata de una zona protegida y que toda actuación que se lleve a cabo deberá ser impulsada y autorizada por la Junta de Andalucía como administración competente.

Por otro lado, la fauna ha sido otra de las grandes damnificadas en este incendio. Una fauna que también volvió a casa, por ello desde el Ayuntamiento se facilita el agua para las balsas y bebederos de animales en la Sierra. A través de varios camiones, se han suministrado puntos clave para el mantenimiento de la fauna y la biodiversidad en la zona. La fauna también fue desalojada de la Sierra de Mijas a raíz del incendio que ha calcinado unas 2.097 hectáreas en distintas áreas del término mijeño y de los dos alhaurines. 

Esta acción tiene como la finalidad principal favorecer a la fauna que se ha visto perjudicada, ya que el fuego ocasionó que se quemaran las gomas y canalizaciones de algunas fuentes y lugares donde bebían los animales. Por este motivo, se ha encargado el envío de camiones-cuba para el llenado.

Algo similar se espera en la Sierra de la Culebra, donde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha puesto en marcha la restauración forestal de emergencia en la zona afectada por el incendio, "uno de los más grandes de la historia de España".

En concreto, la zona quemada comprende más de 24.000 hectáreas de alto valor ecológico y 15.000 hectáreas de superficie forestal arbolada. Los trabajos han sido adjudicados a cuatro empresas locales por un importe de dos millones de euros. Estas ayudas ya fueron adelantadas la semana pasada por el subdelegado del Gobierno la semana pasada.

No obstante, desde el Ministerio insisten que las actuaciones se va a centrar en estabilizar los suelos frente al peligro de erosión por las fuertes lluvias y en recuperar la integridad de los ecosistemas afectados.

"La superficie afectada se encuentra en una situación de grave peligro por desprotección frente a las lluvias", indican desde el Ministerio. Esto se debe a que el tiempo transcurrido hasta el momento no ha sido suficiente para que la vegetación haya repuntado, lo que conlleva "aceleradas pérdidas de suelo y de los procesos erosivos de torrenteras".

Ante la necesidad de adoptar medidas de emergencia para disminuir el riesgo para personas y bienes, el Ministerio ha declarado un paquete de actuaciones de emergencia con un plazo previsto de finalización de siete meses.

Entre dichas actuaciones se encuentran la trituración de árboles, la construcción de albarradas y diques para disminuir la velocidad de circulación del agua o la construcción de charcas, tanto para que la fauna pueda refrescarse como para disponer de puntos de agua para la extinción de incendios, entro otras muchas.