Biden vuelve a dejar fuera a Sánchez de su llamada de coordinación sobre Ucrania

Pese al esfuerzo del Gobierno de España por tomar partido en la gestión de la crisis de Ucrania -este mismo viernes ha incrementado su participación en el pulso de la OTAN enviando cuatro cazas a Bulgaria-, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha vuelto a dejar a Pedro Sánchez fuera de sus contactos directos para coordinar la respuesta ante Rusia.

El mandatario estadounidense organizó este viernes una llamada con líderes de países miembros de la OTAN para coordinar la estrategia y promover una respuesta basada en la "diplomacia y la disuasión", una reunión a la que fueron invitados a participar el canciller de Alemania, Olaf Scholz; el presidente de Francia, Emmanuel Macron; el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson; su homólogo en Canadá, Justin Trudeau; el primer ministro de Italia, Mario Draghi; así como los líderes de los Ejecutivos de Polonia, Andrzej Duda, y de Rumanía, Klaus Iohannis.

Por la parte institucional, fueron el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, quienes tuvieron voz en la llamada, prevista para las 11.00 horas (16.00 GMT).

Según la información difundida por la Casa Blanca y recogida por EFE, el encuentro tenía como objetivo "conversar sobre las preocupaciones compartidas sobre el hecho de que Rusia continúe aumentando sus fuerzas militares alrededor de Ucrania" así como "continuar la coordinación" entre los aliados "tanto en lo relativo a la diplomacia como a la disuasión".

Segundo plantón

Con esta son dos las ocasiones en las que el presidente del Gobierno se queda fuera de las conversaciones directas con Biden. El pasado 24 de enero, el mandatario estadounidense reunión a Von der Leyen y Stoltenberg con varios líderes europeos en una videollamada con "líderes europeos como parte de la estrecha consulta y coordinación con los socios y aliados transatlánticos".

La agenda del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, por contra, viene estando en las últimas semanas repletas de reuniones vinculadas con la crisis ucraniana. El pasado 18 de enero, viajó a Washington para trasmitirle en primera persona a su homólogo estadounidense, Antony Blinken, la intención de "unir fuerzas" para encontrar "una solución". De la misma forma, esta semana se encuentra en Kiev, donde ha trasmitido el compromiso de España con sus socios y con la distensión en la zona.

La tensión en Ucrania se ha disparado en el último mes por la denuncia de Occidente de que Rusia ha movilizado más de 100.000 soldados en la frontera con Ucrania, algo que ha llevado a los gobiernos ruso y estadounidense a enzarzarse en una batalla propagandística.

Moscú ha repetido que no quiere una guerra con Kiev y que no amenaza a Ucrania, mientras que Washington alerta de que los rusos podrían atacar el país vecino "en cualquier momento".