Proponen rehabilitar casas antiguas en ruinas para los afectados por el volcán de La Palma

Rehabilitar casas tradicionales de tipología canaria para realojar a las personas que perdieron la suya como consecuencia del avance de las coladas de lava del volcán de Tajogaite es la propuesta del artista Luis Fierro. Así, plantea que las diferentes administraciones tengan en cuenta recuperar viviendas abandonadas como una solución de emergencia.

El creador, cuya causa en favor de salvar la arquitectura tradicional canaria tiene más de 10.000 seguidores en Facebook, dedica desde hace años sus esfuerzos a defender esta tipología de inmuebles, contemplando con cierta impotencia "el deterioro imparable de este tesoro patrimonial", que tras el abandono de sus propietarios acaba derruido por el inexorable paso del tiempo y la intervención del medio.

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Fiero destaca que La Palma no solo es bonita por su naturaleza, sino también por sus casas tradicionales, "un enorme Patrimonio Histórico que se está perdiendo, como en el resto de las Islas", de las que dice que hay "muchísimas casas vacías, sin uso, y que no solo forman parte del paisaje isleño, sino que lo engrandecen".

El pintor insta a "crear un censo" con todas las construcciones abandonadas

Creación de empleo

El impulsor de esta iniciativa, además, incide en el hecho de que esas construcciones aportan "una imagen negativa" de cara al turismo. Luis Fiero defiende que la rehabilitación de casas ya existentes "generaría empleo y no se perdería más suelo".

Hijo del reconocido Facundo Fierro y experto acuarelista, este artista recalca que es en el entorno rural, "más acorde con el modo de vida de muchos", donde se debería ofrecer la posibilidad habitacional, con ayudas y facilidades de un incentivo por salvar una casa tradicional. En este sentido, podrían comprarse o alquilarse, señala, promoviendo las administraciones "un diálogo solidario entre dueños y personas que perdieron sus casas", teniendo en cuenta la catástrofe social actual.

Esa situación de entendimiento, según él, debe ser "un proceso urgente", en el que se debe realizar una intermediación entre los dueños de las casas tradicionales sin uso y las personas que han perdido la suya, apuntando directamente a la «falta de una previsión administrativa, pues indica que muchas casas sin uso llevan décadas así. A esto también hay que sumar la elaboración de un censo de casas disponibles para ofrecer como otra posibilidad a los damnificados por la erupción.

Esta propuesta de intervención "debería contar con facilidades administrativas", eximiéndose de impuestos el proceso de rehabilitación y requiriendo también Fierro una subvención añadida a las ayudas económicas que reciban los damnificados por la erupción, además de que las administraciones faciliten todos los procesos de servicios a esas viviendas. "No son gastos, sino inversión y futuro", recalca el artista.

Luis Fiero también reclama una mayor permisividad en la planificación territorial para llevar a cabo obras en el caso de tener que hacer pequeñas ampliaciones de estas casas, "para baños o cocinas", acordes a la arquitectura tradicional y con el debido rigor patrimonial, evitando eso así los que considera "disparates arquitectónicos que continúan siendo permitidos por las administraciones", reclama respecto a la reconstrucción que hay que desarrollar en la zona cero de la erupción.

La viabilidad de esta propuesta también se asienta en la generación de empleo, ya que el artista señala que permitiría a mucha gente de perdió su trabajo, "tras una formación específica de dos o tres días" poder participar en la materialización del proyecto.

El primer paso sería abrir un diálogo entre los propietarios de las casonas y las administraciones

Otro de los aspectos que denuncia Fierro es que actualmente "no hay inventarios de cuántas casas están afectadas por el abandono y, sobre todo, cómo están, quienes y dónde están sus dueños". Por esta razón lamenta que "el resultado final sea la ruina, el derribo y o la desaparición de muchas casas tradicionales", lo que a su juicio "perjudica, sin duda, al patrimonio histórico, al paisaje, la imagen, el turismo y la cultura de Canarias".

Fierro, por último, apunta que este tipo de actuaciones deberían extenderse a todas las islas, "pero la prioridad está ahora en La Palma", cuya catástrofe social requiere pensar con seriedad y también empatía soluciones que ayuden a corregir el grave problema de vivienda que se ha originado a raíz de la erupción que se inició el pasado 19 de septiembre en la cima de Montaña Rajada, en el municipio de El Paso.