PRIMER CAT-CAFÉ

'Oh My Cat': el café que se dispone a engatusar a los sevillanos

Los amantes del café y los gatos tienen un nuevo santuario en Sevilla

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'Oh My Cat', el primer 'cat-café' de Sevilla

'Oh My Cat', el primer 'cat-café' de Sevilla / PIXABAY

H.G.

Sevilla, café y gatos. Es la combinación perfecta que propone 'Oh My Cat', el primer 'cat-café' que ha abierto sus puertas en la capital hispalense. Un espacio donde los amantes de los felinos y del café podrán disfrutar de sus pasiones sin renunciar a nada y, de paso, relajarse del estrés cotidiano en un ambiente distinto.

El local, ubicado en el número 14 de la calle Carmen Martínez Sancho, en las inmediaciones de la avenida Alcalde Manuel del Valle, es una iniciativa de Ghato Verde, una asociación sin ánimo de lucro dedicada al control, cuidado y rescate de gatos comunitarios en Sevilla-

En 'Oh My Cut', los clientes pueden disfrutar de su consumición mientras observan o juegan con los gatos allí presentes y, "si surge el amor", adoptar a uno, como indican en la web oficial del proyecto.

Y es que "el objetivo final del proyecto es conseguir un hogar amoroso y responsable para estos animales que se han convertido en invisibles, pero puedes venir sin la intención de adoptar", explican desde Ghato Verde.

¿Qué es un ‘cat-café’, el fenómeno que ha llegado a Sevilla?

Un cat-café es un tipo de café que se ha vuelto popular en varios lugares del mundo en los últimos años. Se trata de un establecimiento que combina la experiencia de tomar café con la oportunidad de interactuar con gatos que viven en el local.

Estos lugares suelen contar con un área donde los gatos pueden moverse libremente y los clientes pueden acariciarlos, jugar con ellos o simplemente observarlos mientras disfrutan de una bebida o un refrigerio.

En algunos casos, los gatos pueden ser adoptados, lo que hace que los cat-cafés también sirvan como lugares de adopción de mascotas.

Los cat-cafés se originaron en Japón en la década de 2000 y desde entonces se han expandido a muchos otros países. Además de ofrecer una experiencia única para los amantes de los gatos, estos establecimientos también pueden servir como lugares de relajación y escape del estrés de la vida diaria.

El éxito de estas cafeterías, en este caso, ha inspirado a la asociación Ghato Verde a abrir un primer local de estas características en la capital hispalense, que ya echaba de menos conceptos innovadores en la hostelería.