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CRISIS ENERGÉTICA

Noruega se prepara para alcanzar su mayor producción de gas al calor de la guerra

Noruega es el gran aliado de la Unión Europea para sustituir el gas ruso en medio de la guerra. EFE

Noruega es el gran aliado de la Unión Europea para sustituir el gas ruso en medio de la guerra. EFE

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Noruega es el gran aliado de la Unión Europea para sustituir el gas ruso en medio de la guerra. El país nórdico se prepara para alcanzar su mayor producción de gas al calor de la guerra entre Rusia y Ucrania este mismo año. “No hace falta ser muy avispado para darse cuenta de los beneficios que significará para el país unos precios del gas equivalentes a 400 dólares y en parte será a expensas de sus socios más cercanos”, apuntan los analistas de Divacons.Noruega planea mantener su alto nivel actual de producción de gas hasta el final de la década, en un momento en que Europa proyecta deshacerse de las importaciones rusas debido a la invasión a Ucrania por parte de Moscú, dijo el martes el ministro de energía del país nórdico. Sin embargo, Noruega se encuentra al límite de sus capacidades de producción y no puede hacer frente a toda la demanda de la Unión Europea que aportaba al comienzo del conflicto Rusia.“Espero que podamos mantener los niveles de producción en los que estamos ahora hasta 2030″, apuntó Terje Aasland a Reuters en una entrevista. “Vemos que hay proyectos y también planes para el desarrollo que pueden ayudar a mantener los altos volúmenes de gas en el futuro”, añadió.

El país nórdico produciría unos 122.000 millones de metros cúbicos de gas este año según las previsiones oficiales realizadas en mayo, un aumento del 8% desde 2021, posiblemente superando un récord establecido hace cinco años.La Dirección de Petróleo de Noruega predijo en enero que la producción de gas alcanzaría los 118.000 millones de metros cúbicos en 2026, que es el último año previsto por el regulador, por debajo de los niveles actuales.Noruega es ahora el mayor proveedor de gas de Europa según los datos de Reuters, superando a Rusia, que ha reducido sus entregas de gas. Por ello, muchas voces como editoriales del influyente periódico londinense Financial Times sostiene que Europa debería pedir una rebaja en los precios del gas noruego. “Aunque una rebaja en los precios de la energía podría ser difícil de justificar desde el punto de vista político, a Oslo le convendría aceptar”, justificaba el diario.

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Sin embargo, el país escandinavo también se enfrenta a problemas para producir energía de su fuente principal que es la hidroeléctrica. Un invierno con menos nevadas y una primavera con lluvias menos frecuentes ha hecho que los embalses, como en el resto de Europa, bajen su capacidad hasta la mitad -lo habitual es que superen el 75%- y con ello se reduzca la producción hidroeléctrica de electricidad. El 90% de la electricidad que se consume en Noruega proviene de los saltos del agua.El Gobierno de Noruega prioriza ahora llenar los embalses y reducir la producción de energía hidroeléctrica con el objetivo de tener asegurado el suministro durante los meses más fríos del invierno. La sequía y la sobredemanda europea ponen tope a la exportaciones de gas noruego, una de las tablas de salvación de la Unión Europea en medio de la guerra de Ucrania.

Noruega trabaja por las renovables

El Fondo de Inversión Climática de Noruega y la compañía de pensiones más grande del país, KLP, anunciaron una inversión en un proyecto de energía solar de 420 megavatios que se está desarrollando en Rajasthan, India.Las dos partes invertirán alrededor de 2.800 millones de rupias indias (unos 35 millones de euros) por una participación del 49% en el proyecto Thar Surya 1, que está construyendo la empresa italiana Enel Green Power.Según un anuncio de la Embajada de Noruega en India, el Fondo de Inversión Climática está programado para asignar 10.000 millones de coronas noruegas (aproximadamente 1.000 millones de euros) a proyectos durante los próximos cinco años. La embajada también describió a India, que está en camino de convertirse el próximo año en el país más poblado del planeta, como un “mercado prioritario”.