Cafés y hamburguesas como baremo de los precios y la inflación de cada país

 Seguramente que al viajar haya visto tiendas o comercios que están en su país y se haya parado a comparar si los precios son más altos o más bajos que los que pagaría usted. Existe una tendencia a buscar productos que conocemos para hacer esta comparativa. Tal es el interés que se existen varios índices para medir la inflación de los países en base a determinados productos. Aquí los más representativos:

El índice Big Mac es el más conocido de los cuatro. Creado por The EConomist compara los cambios entre divisas y la inflación tomando como referencia el precio del mítico Big Mac de McDonalds. Un índice que nos permite ver si la moneda de un país está o no sobrevalorada. El cálculo es simple: se divide le precio de la hamburguesa Big Mac en un país (en su moneda) por el precio de la misma hamburguesa en otro país (en su moneda propia) y el valor que se obtenga se debe comparar con el tipo de cambio de esas dos monedas. Si es menor al tipo de cambio, entonces la primera divisa está infravalorada mientras que si es superior, está sobrevalorada.

A la hora de crear el índice Big Mac, se consideró que dicha hamburguesa es un producto estándar y disponible en una amplia variedad de países que, al menos en teoría, deberían tener bastante responsabilidad para negociar precios de coste. Por esto, este índice puede resultar muy útil a la hora de establecer comparaciones entre las monedas de diferentes países.

Con datos a cierre de julio, el índice mostraba que el dólar está un 8,1% sobrevalorado frente al euro sabiendo que el coste de un Big Mc en Estados Unidos era de 5,15 dólares frente a los 4,65 dólares de Europa.

Otra de las cadenas que ha difundido sus productos por todo el mundo es StarBucks. Por eso The Wall Street Journal ha creado el “Índice Latte” que busca comparar los precios del café con leche básico de la multinacional en los distintos países. La diferencia con respecto al índice Big Mac es que esos precios se convierten a dólares estadounidenses y se comparan con el precio de referencia, que es un café con leche de Starbucks en Nueva York a un precio de 3,45 dólares.

La estantería Billy de Ikea o las barritas Mars de chocolate

Según los últimos datos disponibles, Zúrich (Suiza) es la región más cara para degustar este café, con un precio de 5,76 dólares mientras que El Cairo, en Egipto, el valor del café es un 57% más bajo que el que se sirve en la Gran Manzana.

Buscando más información sobre el tema, reparamos en que hay índices que se elaboran en base a la famosa estantería Billy de Ikea o sobre las barritas de chocolate Mars, dos índices elaborados por grandes medios de comunicación pero que apenas tienen seguimiento en el momento actual.

Son índices que, basados en productos afamados y de presencia internacional y que permiten crear un indicador macro en referencia a su precio basado en la teoría del poder adquisitivo, que pretende determinar el impacto de los tipos de cambio y la inflación.

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El principal objetivo de esta métrica es evaluar la diferencia de la apreciación o devaluación del dólar (moneda base) sobre el resto de las divisas. Con ello, se establece una aproximación de los costes de vida en los países a analizar y también pretende comprobar el efecto inflacionario.

Pese a que no es un método científico, es un cálculo aceptado por economistas por su precisión para conocer la posición de la divisa a lo largo del mundo.