Devolución de gastos de hipotecas: fecha límite para pedir su devolución

Los hipotecados que firmasen su crédito antes de enero de 2019 están de enhorabuena. Según una sentencia del Tribunal Supremo pueden beneficiarse de la devolución de los gastos que el banco les cobró en la formalización de la hipoteca, ya que el Alto Tribunal considera esta práctica como abusiva y obliga a las entidades a devolver una parte de la cantidad cobrada. 

El plazo de prescripción era de cinco años, aunque los jueces no tenían claro cuándo empezaba a contar. Ahora los magistrados se han puesto de acuerdo y han recogido que se fijan esos cinco años, desde enero de 2019, que fue cuando se dictó la resolución final. Antes de conocerse esta decisión, las entidades bancarias debían hacer frente a los gastos de registro, gestoría y tasación, y la mitad de los de notaría. Luego ellas se encargaban de cobrárselo a los hipotecados, pero tras la sentencia ya no se puede. Su importe dependía del valor de la vivienda hipotecada, cuanto más cara fuera, más altos eran. Al montante que pide la entidad bancaria debemos sumar los impuestos, pero estos no se podrán reclamar.

Con la entrada en vigor de la Ley de Contratos de Crédito Inmobiliario en marzo de 2019 todo cambió, y ahora eran los bancos quienes debían pagar los costes tanto del notario como registro y gestoría.

La normativa modificó la regulación existente en materia de gastos hipotecarios cuando se constituyera un crédito y beneficiaba en algunos aspectos a los clientes, que solo tendrían que pagar la tasación. Además, el impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD) correría a cargo de la entidad, y gracias a que se haya anulado esta cláusula, el titular de la hipoteca puede reclamarla aunque ya haya cancelado la deuda.

La fecha clave

Las personas que no lo hayan pedido en estos cinco años, tendrán hasta el próximo 23 de enero de 2024 para pedir la devolución de los gastos que la entidad le cobró en la formalización de la hipoteca.

Para hacerlo, el cliente deberá acudir al servicio de reclamaciones de la entidad y presentar la queja. Si todo está bien documentado, seguirá los cauces normales de una petición rutinaria. Sin embargo, si la respuesta es negativa, el implicado deberá presentar otra petición al servicio de reclamaciones del Banco de España. Por último, si no funciona en ninguna de estas dos entidades, la persona tendrá que acudir a la vía judicial. Muchos consumidores prefieren quejarse a través de despachos de abogados especializados en la materia para hacer más rápida y efectiva la devolución de los costes.

Los afectados deben presentar el DNI, la escritura del préstamo hipotecario, la factura del notario y la factura del registro de la propiedad. También la factura de la gestoría y de la tasación de la vivienda así como el importe del registro de la propiedad. Estos los sueles encontrar en una gestoría, por lo que sería posible pedir una copia a la misma en este lugar. Antes de empezar con los trámites, también debes comprobar si en tu préstamo se te cobró alguno de estos gastos, porque si el banco no lo hizo no podrás reclamar nada.  

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Existe otra cláusula que el Tribunal Supremo estableció que no era abusiva. En esa misma sentencia también se recogía que la comisión de apertura estaba dentro de los costes normales. Sin embargo, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea considera que este cargo debe ser transparente para ser válido. Este apunte significa que serán los tribunales quienes decidirán si el consumidor ha podido evaluar las consecuencias económicas que supone pagar una comisión de apertura y entender que su objeto es compensar los gastos de estudio y de tramitación de una solicitud de préstamo.

Hasta 1.000 euros

Según un estudio, la media de estas devoluciones ronda los 1.000 euros, una cifra bastante importante que beneficiará a todos los que se puedan acoger a la sentencia. En menos de tres meses se cierra el plazo para poder pedir el dinero, por lo que los más rezagados deben darse prisa.