¿Puedo pedir un aumento de la retención del IRPF al cobrar el paro?

La campaña de la Renta 2022 abrió sus puertas el 11 de abril y los contribuyentes que aún no la hayan presentado todavía están a tiempo. El plazo finalizará el día 30 de junio mediante atención telefónica o presencial en las oficinas de la Agencia Tributaria. Se trata de un mero trámite con el que cada año se ajustan cuentas con Hacienda sobre el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y su resultado dependerá enteramente de las retenciones aplicadas a lo largo del año. Tras presentarla, el resultado dará a devolver o a pagar: si las retenciones aplicadas han sido mayores que el importe del IRPF que le corresponde al individuo, el resultado será a devolver, y si son inferiores, deberá pagar el restante a la Agencia Tributaria.

Cabe destacar que la campaña de la Renta en curso corresponde al año 2022, es decir, los contribuyentes recibirán los importes del IRPF o deberán pagar los importes del IRPF que correspondan según los ingresos obtenidos cada año. De cara a la campaña del próximo año, los contribuyentes deberán estar atentos a las retenciones que se les aplican durante el ejercicio actual para anticiparse al resultado de la Renta del año que viene.

¿El paro tributa?

Dentro de la Declaración de la Renta se puede encontrar la prestación por desempleo por ser una ayuda contributiva que se reconoce a aquellas personas en situación de desempleo que han cotizado a la Seguridad Social durante al menos un año. Se trata de un rendimiento del trabajo, y por esta razón, deberá tributar por el IRPF. Como el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) es el organismo responsable de gestionar esta prestación, la retención se le aplicará al mismo.

En su página web se explica esta retención del IRPF se produce "porque las prestaciones por desempleo son consideradas como una renta sujeta a tributación según la legislación fiscal". Al igual que ocurre con otros rendimientos, el tipo de retención dependerá del importe total que se vaya a percibir a lo largo del año, junto a las circunstancias familiares y personales de cada contribuyente (que podrán proporcionar deducciones). En este caso, la retención variará en función del importe de paro que le corresponde al beneficiario, así como la duración de esa prestación durante el año natural en curso.

Cómo se solicita el aumento de IRPF del paro

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Eso sí, aunque la retención varía, es necesario tener en cuenta que el importe del paro se encuentra en los rangos inferiores del tipo impositivo del IRPF. Por esta razón, si el contribuyente percibe otros rendimientos o solo cobra el paro de manera puntual durante este año, es posible que le interese elevar la retención aplicada para evitar que la Declaración de la Renta del siguiente año salga a pagar a la Agencia Tributaria. Si así lo desea el beneficiario del paro, se podrá modificar la retención que el SEPE aplique. Para ello, es necesario señalar que la Administración ya aplica el porcentaje mínimo aplicable y solo se podrá elevar esa retención. La solicitud de este cambio se deberá realizar por escrito cinco días antes del final del mes anterior al cobro de la nómina.

Una vez se realice la solicitud del cambio, la nueva retención se aplicará hasta final de año mientras no renuncie por escrito o solicite un nuevo tipo superior. Eso sí, será posible volver a modificar al alza este tipo en caso de otras regularizaciones por cambios en sus circunstancias personales y familiares que determinen un tipo superior al solicitado. En este caso, cabe destacar que no se perderá dinero en caso de pedir un incremento de la retención por encima de lo que corresponde. La Declaración de la Renta sirve para ajustar cuentas entre lo que debe pagar cada contribuyente por IRPF y las retenciones ya aplicadas, y si la retención es superior, la declaración saldrá a devolver y el contribuyente recibirá de vuelta la diferencia.