Emprendedores

Una red de líderes para que sobrevivan más compañías

  • Netmentora ofrece un servicio gratuito que hace que el porcentaje de empresas que llegan a cumplir cinco años desde su creación suba del 30% al 90% en España 

Marta Carrió, directora general de Netmentora.

Marta Carrió, directora general de Netmentora. / JOAN CORTADELLAS

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La alternativa vegetal a la carne que ofrece Heura generó una facturación de 31,4 millones de euros en 2022 y está presente en más de 18.000 puntos de venta repartidos en 20 países de todo el mundo. Pero no siempre fue así. La empresa empezó su andadura en 2016. Eran dos jóvenes, Marc Coloma y Bernat Añaños, que decidieron pasar del activismo social, medioambiental y por los derechos de los animales a ofrecer su propia solución con productos 100% vegetales. Tenían un prototipo y un espíritu auténticamente emprendedor, pero les faltaba llegar al cliente final y pidieron ayuda a Netmentora. Como ellos, son muchos los emprendedores que han acudido a esta red europea de intercambio de conocimiento y crecimiento empresarial. Una organización que ofrece consejos de grandes empresarios para guiar la andadura de las compañías que están iniciando su camino.

Un apoyo necesario en muchas ocasiones para el emprendimiento, que requiere esfuerzo, trabajo y asumir grandes cantidades de riesgo e incertidumbre. No todo el mundo está preparado para ello, pero los que deciden dar el paso pueden buscar ayuda para seguir adelante. "En España, solo el 30% de los proyectos sobreviven al cabo de cinco años, pero con la ayuda de Netmentora el 90% de ellas siguen en pie pasado ese tiempo", explica Marta Carrió, directora general de la organización en Catalunya, que acompaña a 100 empresas cada año y ya ha creado 1.200 empleos en territorio catalán. El servicio aporta un valor que sería equivalente a 60.000 euros para los que se benefician, aunque es 100% gratuito. Entre los 300 empresarios de alto nivel con los que cuenta Netmentora se encuentran Sílvio Elías, cofundador de Veritas, y David Cabero, director general de BIC en Europa.

La empresa forma parte de la organización internacional Réseau Entreprendre, una entidad sin ánimo de lucro que fundó la familia francesa Mulliez, propietaria de cadenas como Alcampo, Decathlon y Leroy Merlin. "En 1986, la crisis del sector del hilo llevó a André Mulliez a cerrar a Phildar, una empresa de 600 personas. Como empresario, entendió que su tarea debía ser crear empleo y no destruirlo. Y decidió crear Réseau Entreprendre", explica la directora. A nivel internacional, son más de 15.000 líderes empresariales de una decena de países los involucrados. A través de la filial Netmentora, se estableció en Barcelona en el año 2012 y más tarde en Madrid, donde también tiene otra asociación territorial.

"Hace falta una perspectiva de personas que han pasado por el mismo sitio que tú para descubrir los errores y los aspectos que pasan desapercibidos, o que se sobredimensionan. Hemos visto start-ups que empiezan a vender muy pronto porque el producto es innovador pero sobredimensionan la plantilla. Y eso tiene consecuencias", cuenta Carrió.

No cualquier empresa es elegida para recibir la ayuda. Deben ser compañías que tengan cierta madurez: "Normalmente necesitan dos años de carril y un producto fabricado, además de unas primeras ventas", subraya la directiva. Tiene que ser también un proyecto con expectativas de impactar sobre la riqueza del territorio y la empleabilidad.

"Aquellos que confían en el proceso encuentran la asignación de un empresario referente principal. Es aquella persona que va siguiendo todo el proceso y con quien se mantienen reuniones más asiduamente", indica Carrió. Además, existe un jurado con entre 8 y 12 líderes empresariales que realizan una fase de estudio en cada caso y que hace su valoración. Entre los 100 emprendedores que se aconsejan de media -el 40% del total que se presentan-, se premia a 25, que reciben un acompañamiento a más largo plazo de dos años.

Tiempo y dinero

Los socios, al contrario que los emprendedores, sí que pagan una cuota con el objetivo de hacer crecer otros proyectos y ser miembro de la red: 1.500 euros las microempresas, 3.000 euros las pequeñas empresas y 5.000 las medianas empresas, mientras que las grandes aportan un variable. En cualquiera de los casos, se debe aportar, como mínimo, cuatro horas mensuales de su tiempo.

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Los creadores de Heura, como otros muchos, se beneficiaron el tiempo necesario de la ayuda para luego pasar al rescate. "El motor del emprendedor es tan fuerte como su ecosistema. Netmentora ha sido un lugar de impulso para mí y para Heura. Ahora, como socio júnior, es un honor apoyar a las siguientes generaciones para acelerar el futuro que nuestro planeta y sociedad necesitan", señala Coloma

Carrió destaca que la ayuda de Netmentora encaminará las empresas hacia el éxito muy probablemente, aunque el talante, la capacidad de asumir riesgos y las aspiraciones deben venir de serie.