Aumentan un 10% los casos de lepra en España: ¿en qué consiste esta enfermedad y cómo se cura?

España acabó 2022 con diez nuevos casos de lepra repartidos en ocho comunidades autónomas y cerró el año con un total de 19 personas en tratamiento, según los datos difundidos por la Fundación alicantina Fontilles con motivo del día mundial contra esta enfermedad, que se conmemoró el pasado domingo 29 de enero. Estos datos suponen un aumento del 10% en los casos registrados. Unas cifras que siguen siendo muy minoritarias, pero que conviene no olvidar.

Y es que, según la fundación, este incremento de las detecciones no se debe al fortalecimiento de las campañas de detección, sino a la reducción de la vigilancia por el coronavirus: "Durante la pandemia, se dejaron de hacer campañas de prevención y detección, y muchos recursos se desviaron a la emergencia sanitaria; por eso, ahora estamos diagnosticando a más personas y con más discapacidades", explica la directora de Sensibilización y Voluntariado de Fontilles, Yolanda Sanchis.

Ni lepra, ni sarna, ni viruela del mono, es psoriasis y no es una enfermedad contagiosa

Precisamente por ello, la entidad ha puesto en marcha la campaña 'Cero lepra es posible', que pretende concienciar sobre la posibilidad de acabar con la lepra para que nadie sufra las consecuencias físicas y sociales de una enfermedad que se puede prevenir y curar.

Los 10 nuevos casos de lepra detectados en España se han producido en Asturias y Baleares (con 2 casos respectivamente), Andalucía, Cantabria, Comunidad Valenciana, Galicia, Murcia y La Rioja (con un nuevo caso cada uno). 

¿Qué es la lepra?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), "la lepra es una enfermedad infecciosa crónica causada por Mycobacterium leprae, un bacilo acidorresistente con forma de barra o vara. Afecta principalmente a la piel, los nervios periféricos, la mucosa del tracto respiratorio superior y los ojos. La lepra es una enfermedad curable y el tratamiento en las primeras fases puede evitar la discapacidad".

La propagación de la lepra no es sencilla. De hecho, la mayoría de personas no contraen la enfermedad, aunque entren en contacto con la bacteria, puesto que su sistema inmune es capaz de combatirla. Por contra, una vez se produce el contagio, suele pasar bastante tiempo hasta que se manifiestan los primeros síntomas, lo que dificulta la detección precoz y poder saber dónde y cuándo cada persona contrajo la enfermedad.

¿Cómo se contagia la enfermedad?

De acuerdo con la OMS una vez más, la lepra se "transmite probablemente a través de las gotículas que se expulsan de la boca o la nariz, en el curso de contactos cercanos y frecuentes con personas que no han recibido tratamiento. Si no se trata, la enfermedad puede causar daños progresivos y permanentes en la piel, los nervios, las extremidades y los ojos".

Existen dos formas comunes de la enfermedad: la tuberculoide y la lepromatosa. La segunda es más grave que la primera, produciendo protuberancias de gran tamaño e hinchazones o nódulos.

¿Cuáles son los principales síntomas de la lepra?

Estos son los síntomas más comunes de la lepra:

• Lesiones cutáneas de una tonalidad más clara que el color normal de la piel
• Lesiones que presentan disminución de la sensibilidad al tacto, al calor o al dolor
• Lesiones que no sanan ni cicatrizan, aunque pasen semanas o meses
• Debilidad muscular
• Entumecimiento o ausencia de sensibilidad en manos, brazos, pies y piernas

Para detectar lepra se llevan a cabo pruebas como el examen de raspado o la biopsia de lesión de la piel. Aismismo, algunos problemas a largo plazo si no se diagnostica pronto incluyen debilidad muscular, pérdida de sensibilidad, daño neurológico permanente y desfiguramiento. 

¿Tiene cura la lepra?

Sí, la lepra se puede curar mediante un tratamiento multimedicamentoso. Desde 2018, la OMS recomienda un régimen de tres fármacos (rifampicina, dapsona y clofazimina) para los tipos de lepra, tanto paucibacilares como multibacilares. Para la prevención de la enfermedad, las directrices también indican la administración de una dosis única de rifampicina a los contactos familiares y sociales elegibles