INVESTIGACIÓN

“Financiación oculta” y “transferencias sospechosas”: las irregularidades de la empresa española que vendió armas por 117 millones a países árabes

Una sentencia declara que la empresa del exministro Serra conocía la mala praxis y solo la “resucitó” cuando los directivos de Everis AEDE intentaron hacerse con la compañía

Irregularidades de la empresa española que vendió armas por 117 millones a países árabes

Irregularidades de la empresa española que vendió armas por 117 millones a países árabes / EPE

Roberto Bécares / Nacho García / Cristina Gallardo / Tono Calleja

“Irregularidades contables y financieras”. “Transferencias sospechosas”. “Financiación oculta”. “Exceso de reconocimiento de ingreso” y “contratos simulados”. Estas son algunas de las conclusiones obtenidas de las investigaciones internas y externas que realizó o encargó el Grupo Everis sobre su filial Everis Aeroespacial y Defensa (Everis AEDE), que vendió material de defensa a Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí por un valor que supera los 117 millones de euros.

Así consta en los autos de los juzgados de lo social donde se dilucidaba el conflicto laboral que se desató tras la destitución de la cúpula de la empresa filial Everis AEDE. El despido de los altos directivos se produjo después de que la alta dirección de Everis, propiedad de la empresa japonesa NTT Data, conociera el plan de los directivos de hacerse con la firma de armamento con el apoyo financiero de Amper. En el juicio para dirimir si el despido había sido improcedente salieron a la luz diversas irregularidades que Everis puso en conocimiento de la jueza para justificar los despidos.

Valga como ejemplo un correo electrónico en el que el director financiero de Everis AEDE advirtió de las irregularidades al director ejecutivo de la empresa: “Tenemos riesgos abiertos de sobredeclaración de ingresos que empiezan a tener un valor importante y tenemos que estar preparados internamente para reaccionar porque en breve empezará a haber cuestiones de KPMG... me preocupa porque tenemos un nivel declaración de ingreso de 10.5 millones de euros y la sobredeclaración conlleva riesgos personales para ti y para mí...”.

Por su parte, un testigo que fue propuesto por la empresa matriz aseguró en uno de los juicios que los directivos expulsados actuaron con mala praxis para “saltarse los controles internos de Everis como socio para la financiación de las participadas”. Declaró que los gestores buscaban ampliar “artificiosamente” el margen de rentabilidad para percibir un bonus superior al que realmente les correspondía; una acusación rechazada por los destituidos.

Así es el contrato con Emiratos Árabes

Los autos de la jurisdicción social ponen de manifiesto que Everis Spain, presidida por el exministro de Defensa del PP Eduardo Serra, encargó el 25 de marzo de 2020 a PricewaterhouseCoopers (PwC) “una investigación y análisis forense” de su filial de defensa y de sus empresas participadas Toro Vehículos Especiales y Sistemas, S.L. y Das Photonics, S.L. “en el contexto de un contrato suscrito con Emiratos Árabes Unidos”. Esta última ha llegado a suministrar piezas de satélite al Pentágono.

En el propio encargo, la empresa ya advertía de la existencia de “determinadas transferencias potencialmente sospechosas realizadas por un perímetro aproximado de doce personas físicas y jurídicas”.

Además, un análisis preliminar había detectado que los directivos de Everis AEDE realizaron operaciones financieras que no habían obtenido las necesarias autorizaciones del grupo, por lo que la matriz les acusaba de promover “contratos simulados para otorgar financiación” a otras sociedades.

El informe de PwC justificó que su “investigación forense” se vio “condicionada por la magnitud y complejidad de un entramado organizativo integrado por diversas sociedades participadas y de diferentes proyectos, y la diversidad de las diferentes irregularidades que se han puesto de manifiesto durante la mencionada investigación”.

Y para desenmarañar este “entramado” descubierto por la matriz, los instructores del informe realizaron 21 entrevistas, tuvieron que analizar los documentos contractuales, la contabilidad de las empresas, las transferencias financieras y las facturas, pero también las órdenes de pago. El documento final, que fue entregado por PwC a la empresa el 26 de junio de 2020, confirmó las sospechas de la matriz. Concluía que la filial de defensa y sus participadas habían cometido “irregularidades constatadas a nivel contable y financiero”.

Y, lo que era todavía más relevante, argumentaba que la naturaleza de los contratos no se correspondía con los servicios prestados por Das Photonics en Emiratos Árabes Unidos, país que había hecho un encargo de tecnología de satélites por un montante de al menos 28.282.828 euros.

Además, PwC destacó que este primer contrato “superaba ampliamente el límite de 2,5 millones de euros de volumen de ingresos estimados establecido” en la normativa interna de la empresa Everis, por lo que debió ser aprobado por la matriz en España y no únicamente por los directivos de la filial, que fueron despedidos.

"Compromiso oculto"

El informe encargado por la firma capitaneada por Serra fue incluso más allá a la hora de censurar la actuación de los directivos destituidos, pues sostenía que los acuerdos con la empresa Das Photonics tenían “un compromiso de financiación oculto”.

En concreto, detectó “transferencias potencialmente sospechosas” en contratos de componentes de satélites con el Gobierno de Emiratos Árabes Unidos, según consta en tres informes internos. Por ello, consideraron que los directivos de Everis AEDE implicados incumplieron, al firmar un contrato marco con la empresa participada Das Photonics, “las políticas y normas de aprobación y autorización” de la compañía.

Incluso Das Photonics llegó a comunicar por carta a Everis Aeroespacial y Defensa S.L. el rechazo parcial de una entrega “al detectar material defectuoso” por un valor de 1,5 millones.

Respecto a otra empresa en la que Everis tenía el 50% de las acciones, Toro Vehículos Especiales y Sistemas, el dosier interno planteaba nuevas sospechas, en este caso por el cobro de 2,2 millones a cambio de conocimientos industriales.

Venta de los morteros Alakrán a Arabia Saudí

La empresa alude en sus informes que los directivos despedidos contabilizaron mal un ingreso de 3,5 millones por la venta de los morteros Alakrán a Arabia Saudí, una cifra que fue combatida por los trabajadores en los juzgados.

Del mismo modo, el Grupo presidido por Serra detectó que las sociedades participadas necesitaban ayuda financiera que se otorgaba en forma de préstamos de la filial de defensa, que eran difíciles de devolver, lo que suponía un riesgo para la empresa armamentística -AEDE llegó a registrar 20 millones de euros en concepto de préstamos a sus participadas por este concepto-.

Sin embargo, la jueza de lo Social que declaró improcedentes los despidos de los directivos no avaló la versión de la empresa matriz, y apuntó en sus sentencias que la sociedad ya conocía desde meses antes de las destituciones, en concreto desde el 13 de diciembre de 2019, las presuntas irregularidades cometidas gracias a un informe interno, “donde hubo de detectarse la falta de ajuste contable”. Sin embargo, la firma presidida por Serra no hizo nada a este respecto hasta que se enteró de lo que consideraron una ‘traición’ del equipo directivo de su filial de defensa, que se había aliado con Amper, su competencia.

Aliado con un rival del sector

Al no hacerlo, según la magistrada, se evidencia que la matriz esperó “a la evolución del proyecto y en su caso, a la realización de estos ajustes en un momento posterior”. Es decir, no tomó la decisión de expulsarles hasta que no se enteraron de que se habían aliado con un rival del sector.

La jueza consideró que la empresa matriz “resucitó” las irregularidades detectadas meses antes con la finalidad de suspender el 11 de marzo de 2020 de empleo a los miembros del equipo directivo de Everis AEDE, y lo hizo justo después de que los directivos ‘rebeldes’ presentaran la carta de intenciones para hacerse con la sociedad.

Por su parte, los expulsados negaron haber cometido cualquier irregularidad y defendieron en la jurisdicción social que las acusaciones de la matriz formaban parte de una ‘venganza’ por tratar de hacerse con el control de Everis AEDE.

Tanto Everis Spain, que ahora se denomina NTT Data Spain, como los directivos expulsados no han querido contestar a las reiteradas preguntas de esta redacción, tanto por escrito como de forma oral, al mismo tiempo que tampoco han accedido a contar su versión de los hechos.