EFECTOS AJO

Comer ajo es bueno hasta cierto punto: estos son los efectos secundarios que puede producir

Todas estas cualidades se le atribuyen al ajo, considerado un superalimento por la cantidad de beneficios que tiene para el organismo

Estos alimentos te pueden hacer oler mal sin que te des cuenta

Ajo.

Ajo.

Es bueno para la salud, previene enfermedades, mejora el rendimiento físico y no engorda. Todas estas cualidades se le atribuyen al ajo, considerado un superalimento por la cantidad de beneficios que tiene para el organismo. 

Por un lado, contiene una sustancia llamada alicina que actúa como hipoglucémico, antibiótico, antitrombótico y antioxidante. Además, contiene compuestos químicos a los que se le atribuyen funciones de desintoxicación celular y protectoras frente al cáncer colorrectal o enfermedades cardiovasculares.

Su capacidad para combatir enfermedades es uno de los mayores beneficios. El ajo puede ser bueno hasta para una gripe común. Según un estudio del investigador británico P. Josling, la ingesta de ajo durante 12 semanas reducía los casos de resfriado un 63%, comparado con los sujetos que tomaban placebo.

Hasta aquí todo bien, sin embargo, existen una serie de efectos secundarios al comer ajo crudo.

Efectos secundarios de ajo crudo

En el caso de que se abuse de este alimento puede producir efectos secundarios. No se puede tomar más de 2 o 3 dientes de ajo a lo largo del día -ni crudo ni cocinado-. En el caso de que esos límites se superen, podrían aparecer los efectos secundarios:

  • Comer ajo crudo en ayunas puede provocar irritación o ardor gastrointestinal. También acidez. Sobre todo en personas que tengan el aparato digestivo sensible.
  • Esa irritación también puede producirse en la piel, así como otros síntomas alérgicos (urticaria, hinchazón...).
  • El ajo crudo puede provocar náuseas y vómitos si se toma con mucha frecuencia. Y, sobre todo, si se hace con el estómago vacío.
  • La diarrea y las flatulencias también pueden ser otros efectos secundarios de comer ajo crudo en abundancia.
  • Si tomas demasiado ajo crudo puede que te sangre la nariz, las encías o llegues a tener heridas en la boca.
  • Además del fuerte olor corporal, también se pueden presentar episodios de sudoración excesiva al tomar mucho ajo crudo.