EXIGEN EL CIERRE DE LA INCINERADORA

La izquierda madrileña critica como un parche las medidas de Almeida para Valdemingómez

Más Madrid y PSOE consideran que el incremento del control anunciado por el Ayuntamiento es una medida que "llega tarde y mal"

Ambas formaciones piden priorizar la salud de las personas y exigen nuevamente el cierre definitivo de la incineradora

La izquierda planta batalla a Almeida con las basuras: del no a la incineradora a los residuos cero

Vista aérea de la planta de tratamiento de residuos de Valdemingómez, que el Ayuntamiento mantendrá abierta pese a las críticas.

Vista aérea de la planta de tratamiento de residuos de Valdemingómez, que el Ayuntamiento mantendrá abierta pese a las críticas. / AYUNTAMIENTO DE MADRID

Héctor González

Héctor González

La incineradora de Valdemingómez vuelve a ser noticia, aunque no en el sentido que le gustaría a la izquierda municipal. Más Madrid y PSOE consideran que la iniciativa anunciada este jueves por el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida, que ha aprobado un nuevo contrato para incrementar el control del impacto medioambiental de la planta, es un parche que no acaba con el problema. Una vez más, ambas formaciones han vuelto a exigir el cierre definitivo de la incineradora como la única medida que válida para el Parque Tecnológico de Valdemingómez.

"¡Por fin!, cinco años ha tardado Almeida en decidirse a adoptar una medida que le llevamos reclamando desde 2019 y que el alcalde se había negado a adoptar", ironiza el concejal de Más Madrid José Luis Nieto, muy crítico con una medida que, en su opinión, "llega tarde y mal". Lo que ha hecho el Ayuntamiento de la capital es dar luz verde a un nuevo contrato de servicios, con una duración de 3 años y medio y un coste plurianual de 1,7 millones de euros, para ampliar y mejorar los controles propios en las instalaciones de Valdemingómez.

Según defendió la portavoz municipal, Inma Sanz, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno celebrada este jueves, con esta medida el Consistorio "dobla" sus esfuerzos para controlar las posibles afecciones ambientales asociadas a la gestión de los residuos del parque. Para nieto, no obstante, está lejos de ser suficiente. Tal y como lleva exigiendo su formación durante el último lustro, el edil de Más Madrid sostiene que la medida que el Consistorio debería "adoptar inmediatamente" es el cierre de la incineradora de residuos de Las Lomas.

Piden priorizar la salud de las personas

"Solo si eliminamos la fuente de contaminación eliminamos de raíz los riesgos para la salud de las personas, algo que le importa muy poco a Almeida", subraya Nieto, que recuerda que una de las primeras decisiones del regidor madrileño durante su primer mandato fue "desistir del contrato de gestión de olores ya adjudicado durante nuestro gobierno". El tiempo, remata el concejal de la oposición, "nos ha dado la razón".

En la misma línea, desde el PSOE madrileño también aluden a la clausura como el camino a seguir. De hecho, el grupo municipal socialista ya propuso a finales de octubre una hoja de ruta para el desmantelamiento de la incineradora que fijaba diciembre de 2025, momento en el que finaliza el actual contrato, como el horizonte límite, tal y como recuerdan fuentes de la formación. "Lo que huele es molesto", señalan, en relación con el nuevo plan de control de olores, "ero lo que verdaderamente nos preocupa es 'lo que mata', que proviene de la incineradora que no quieren cerrar y que emite al aire que respiramos".

En la nota difundida acerca del nuevo contraro, el Gobierno municipal señala que en 2023 se registraron 971 quejas por olores del parque tecnológico, lo que supone un descenso del 79,7 % respecto a 2018, cuando se formalizaron 4.806 reclamaciones. Asimismo, es la primera vez en la serie histórica el número de quejas en el sistema municipal de Sugerencias y Reclamaciones se situó por debajo de la barrera de las 100, al contabilizarse 92, un descenso del 96 % respecto al pico más alto registrado, también en 2018, cuando las reclamaciones llegaron a las 2.457.

"Valdemingómez sigue emitiendo olores muchos días, aunque la situación haya mejorado los últimos años", replican desde el PSOE-M. Sin embargo, lo que de verdad preocupa a los vecinos que viven cerca de la planta es "la calidad del aire y la afección que las dioxinas y furanos procedentes de la incineración tiene sobre la salud", denuncian. Por ello, los socialistas madrileños se preguntan "a qué espera Almeida para acabar con una practica medioambientalmente poco sostenible y peligrosa para la salud".