Tras los pasos de los romanos por Alcalá de Henares

Asociada inevitable y voluntariamente a la figura de Miguel de Cervantes, la ciudad de Alcalá de Henares puede presumir, sin embargo, de un pasado más antiguo. El cauce del río Henares y otras corrientes hacían del entorno en que se ubica una tierra fértil. Y el hecho de que por allí pasara una vía que unía Augusta Emerita y Caesar Augusta, dos de las ciudades romanas más importantes de la península Ibérica, las actuales Mérida y Zaragoza, favoreció que se organizara un asentamiento de relevancia que dio en llamarse Complutum.

La presencia romana se extendió desde el siglo I a. C. hasta el siglo VI, con dos momentos constructivos importantes, uno en el siglo I y otro en el siglo III. La ciudad llegaría a abarcar unas 50 hectáreas. Como consecuencia, la actual Alcalá acoge interesantes vestigios de la época. No hay un teatro o un acueducto, pero los restos de la Casa de Hyppolytus, el Foro o la Casa de los Grifos constituyen el yacimiento romano más importante de la Comunidad de Madrid.

Se puede empezar la visita por la llamada Casa de Hyppolitus, uno de los pocos colegios de jóvenes conocidos de la Hispania Romana. Construido entre los siglos III y IV, formaba parte de un conjunto más amplio a las afueras de Complutum, una finca con jardines en la que se encontraba también el mausoleo de la familia Annio.

Cayo Annio fue, de hecho, el noble que fundó el colegio, que recibe el nombre de Hyppolitus, sin embargo, del autor del mosaico de la estancia principal. Representa una escena de pesca y en él se puede ver a tres muchachos faenando rodeados de peces y otros animales marinos. El artista dejó en él su firma.

En el recinto, los vástagos de las familias nobles combinaban a formación académica y religiosa con actividades deportivas y de ocio. ese lugar los hijos de las familiar relevantes de Complutum recibían educación, formación religiosa y realizaban actividades lúdicas. El núcleo del edificio lo formaba un patio con la zona termal, con dos piscinas. Además, se conserva un horno, letrinas y un pozo.

El antiguo Foro de Complutum, junto a lo que hoy es el Camino del Juncal, constaba de basílica, curia y termas, de las que aún se conservan restos, entre viviendas construidas en la segunda mitad del siglo XX. La basílica civil era uno de los centros neurálgicos de la Alcalá de Henares de los días romanos. Allí se impartía justicia y se cerraban negocios. Las investigaciones han conseguido determinar que era un edificio de dos plantas con filas de columnas.

Adosada a la basílica se encontraba la curia, el lugar de reunión del senado local. Además, se conservan restos de las termas. Se conjetura con que las termas norte se reconvirtieron en el lugar de reunión de la curia en el siglo III, momento en que se edificaron las termas sur, uno de los espacios más llamativos de lo que queda del viejo Foro.

Junto al Foro se halla la Casa de los Grifos, excavada en 1998. Se trata de una opulenta residencia de unos 900 metros cuadrados de superficie con un gran patio interior y de la que se dice que luce en sus muros los frescos romanos mejor conservados de España. Además de motivos ornamentales, alguna figura humana y animal y escenas de caza, en una de sus estancias están los grifos, seres mitológicos con cabeza de águila y cuerpo de león que dan nombre a la casa.

El rastro romano en Complutum se puede terminar de seguir en el Museo Arqueológico y Paleontológico Regional, con algunas piezas rescatadas de los yacimientos. Otras, como una inscripción funeraria, se encuentran el Museo Arqueológico Nacional. Pero aún en el barrio del Val, a unos cinco kilómetros de donde se encuentra el Foro, cerca del río Henares, se puede hacer una incursión.

Perviven allí los restos de lo que era una villa presumiblemente dedicada a la cría de caballos de competición. Se construyó en el siglo IV y se cree que se abandonó dos centurias más tarde. Los vestigios son bastante menos vistosos que los del Foro. Pero no dejan de formar parte de la memoria romana de Alcalá de Henares. No todo va a ser Cervantes...