RINCONEANDO MADRID

Marilians, el ‘meeting point’ del indie

La tienda de discos de la calle Noviciado se ha convertido en el lugar al que acuden los artistas a firmar discos y encontrarse con sus fans. No solo los alternativos: hasta Chanel ha pasado por aquí 

Cola ante la tienda de discos Marilians para la firma de discos de la banda Niña Polaca.

Cola ante la tienda de discos Marilians para la firma de discos de la banda Niña Polaca. / ALBA VIGARAY

Jacobo de Arce

Jacobo de Arce

Son las 19:30h de un jueves de otoño y hay movimiento en la calle Noviciado, quizá el vestigio hipster que mejor resiste en la capital. En apenas unos metros hay un bar de brunch con tortitas a 15 euros, una papelería de apariencia vintage y un mercado amish -han leído bien- que, además de cosas tan prosaicas como pan o café, también vende semillas o cereales. Continua vacío el espacio que albergó la tienda de galletas de colores para perros. En cambio, todo parece ir viento en popa en el local contiguo, la tienda de discos Marilians, origen de la larga cola que recorre parte de la calle. Hoy es uno de esos días, varios cada semana, en los que algún artista acude a este espacio para firmar su último trabajo. En este caso se trata de los madrileños Niña Polaca, que un rato después ofrecerán un pequeño concierto acústico para los fans que han acudido a verles. Han colgado el cartel de lleno solo con las prerreservas de discos: 60 personas.

Marilians viene organizando estas citas desde que arrancó su andadura, allá por 2019, pero ha sido en el último año y pico, después de sobrevivir a la travesía del desierto que supuso la pandemia y sus coletazos, cuando se ha convertido en la referencia de la ciudad en esa ‘experiencia’ que supone tener a un artista a tiro de apretón de manos o beso, foto y charla breve. Si al principio eran sus fundadores, Dani, Pedro y Miriam, quienes contactaban con los artistas o los sellos para que acudieran, ahora es al revés: son muchos los músicos y las discográficas que han asumido como rito obligado de sus lanzamientos la firma en esta tienda. Esos discos firmados también se venden a través de su web.

Los miembros de Niña Polaca firman ejemplares de su último álbum en la tienda de discos Marilians.

Los miembros de Niña Polaca firman ejemplares de su último álbum en la tienda de discos Marilians. / ALBA VIGARAY

A estas alturas, por aquí han pasado ya artistas de todo pelaje. Desde bandas pequeñas como Ombligo a reventadores de WiZinks como Sidonie o Xoel López. "También vino Chanel", cuenta Dani. La eurovisiva quiso encontrarse aquí con sus fans. Cumplía el requisito indispensable para firmar en esta tienda que solo vende vinilo: tener música recién publicada en ese formato. "Acababa de sacar SloMo en un picture disc en forma de mango. Fue encantadora y trajo a muchísima gente, un público distinto al que solemos tener habitualmente. Y se pasó dos horas largas firmando", recuerda el responsable de la tienda. ¿Llegó a cantar? "No, pero bailó la canción cuarenta veces porque se lo pedían para hacer vídeos de TikTok". 

Marilians es un proyecto nacido, como casi todos los de este tipo, de la pasión por la música y el esfuerzo. En una vida anterior, Dani trabajaba como comercial de un programa informático y Miriam, su pareja, como dependienta en una tienda de moda urbana. Buena parte de su tiempo libre lo ocupaban en hacer la revista musical online Marilians Magazine, germen de todo esto. Unos meses antes de la pandemia decidieron jugársela y, con ayuda de Pedro, su socio, montar una tienda de discos. Consumidores de vinilo, apostaron por este formato cuando todavía no vivía su apogeo actual. El CD no les interesa. También venden algo de merchandising propio de la tienda y de bandas, pero solamente de las que pasan por allí. Además, hay una pequeña selección de libros musicales. 

En Marilians solo se venden discos en formato vinilo.

En Marilians solo se venden discos en formato vinilo. / ALBA VIGARAY

Ese saloncito tan contemporáneo donde esta noche se sienta con sus guitarras Niña Polaca -muebles estilo midcentury y la indispensable palmera que todos tenemos en casa- fue una parte fundamental del proyecto desde el principio. "Como Miriam y yo hacíamos la revista, pensamos en un espacio donde poder hacer las entrevistas, y de paso las firmas y los pequeños conciertos acústicos. Teníamos claro que era muy importante que tanto el fan como el músico tuviesen un sitio en el que encontrarse de una forma cómoda, tranquila... Hacerse la foto y contarse cosas", explica Dani. "La firma de discos es el momento de establecer esa conexión tan importante. Y nosotros somos los primeros fans de casi todas las bandas que pasan por aquí».  

A veces, las firmas de discos no acaban en concierto en la tienda, sino en un local más grande. Hace unos meses, La Paloma estrenaba su nuevo disco y organizó una venta con firma que incluía, con cada LP vendido, una entrada para la fiesta con que celebraban el lanzamiento en la sala El Sol. Hubo llenazo. En otras ocasiones, el concierto no está ni se le espera, pero acaba sucediendo. Pasó con Carolina Durante. "El día que vinieron no iban a tocar. Los showcases molan mucho, pero cuando viene un artista con tanto tirón es un problema. Era un día muy loco, sabíamos que vendría mucha gente. Empezaron a las siete de la tarde, a las once estaban agotados de firmar y Diego, el cantante, me dijo:‘No puedo firmar más discos, pero tienes ahí una guitarra. ¿Podemos hacer un temilla?’". Agarraron la vieja acústica del padre de Dani que siempre está en la tienda y se pusieron a tocar. "Lo vieron los últimos que estaban aquí e hicimos directos en las redes. La gente alucinaba". Aquella sigue siendo una de las noches más recordadas. Pero seguro que quedan muchas parecidas por venir.