Un 'simpa' de 2.200 euros pero mucha menos basura y ruido: así se vive la previa de la Champions en Madrid

Los vecinos temían lo peor ante la previa del partido de octavos de la Champions League entre el Real Madrid y el Liverpool que se celebra la capital pero, por el momento, la parte más amarga se la ha llevado un bar de copas cerca de la Plaza del Sol, después de que dos varones ingleses se marcaran un 'simpa'. La broma superaba los 2.000 euros.

Se trata del Commo, un local especializado en chupitos que está situado en Espoz y Mina, una calle frecuentada por turistas. Allí, esta última madrugada, según ha avanzado Telemadrid, dos hombres se dedicaron a invitar a medio bar, especialmente a mujeres. Pagaron la primera ronda, una factura de 1.000 euros. Pero las posteriores, que ascendían a 2.200 euros por unas 90 copas de champán, no. Según explican fuentes policiales a este periódico, ambos habrían intentado abandonar el local varias veces, llegando a ponerse violentos. Alegaban que les dejaran la cuenta abierta. "Somos millonarios", les aseguraron a los camareros. Fueron detenidos y se les considera presuntos autores.

Sin embargo, a solo 500 metros de ahí, el epicentro de las previas de los hooligans era "el paraíso total". Lo asegura Ricardo Bustos, presidente de la Asociación de Vecinos de la Plaza Mayor. Allí no está pasando nada de lo que se esperaban los vecinos: no hay aficionados del club inglés haciendo botellón, ni deposiciones en la plaza, ni ese ruido que acostumbran a escuchar los locales cuando la ciudad se llena de hinchas por partidos internacionales.

Menos aficionados

La jornada, en general, está siendo bastante más tranquila de cómo suelen ser en la capital en un partido como este. "Están siendo días muy normalitos. No ha sucedido nada", explica Bustos. Están sorprendidos y bastante contentos por la paz inesperada.

El motivo de esta tranquilidad puede que sea por el bajo número de aficionados del Liverpool que se han trasladado a Madrid. Son solo 1.800, frente a los casi 10.000 del Celtic de Glasgow que viajaron a Madrid en noviembre (unos 8.000 sin entrada) y que invadieron la Plaza Mayor, dejando a su paso 12 toneladas de basura. Además, el resultado en la ciudad inglesa (2-5 a favor del Real Madrid), lo que podría explicar que solo hayan llegado hinchas única y exclusivamente para disfrutar del partido.

Por eso, temen que esto sea un espejismo. Para evitarlo, los vecinos residentes ya habían trasladado su inquietud a Mercedes González Fernández, delegada de Gobierno en la Comunidad de Madrid, por las molestias que suponen este tipo de concentraciones de personas, como la suciedad, el ruido o los botellones. La respuesta de la delegada, según explican a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA fuentes de la propia Delegación, es que son cuestiones de la Ordenanza Municipal que competen al Ayuntamiento de Madrid.

Como resultado de aquel encuentre, este lunes 13 de marzo se celebró una reunión entre los vecinos; José Fernández Sánchez, concejal del Distrito Centro; la Delegación del Gobierno y la Policía Nacional. La asociación de vecinos pretende conseguir así que, de una vez por todas, "se empiece a disuadir la llegada de estos grupos" a la capital.

Un partido de 'alto riesgo'

La Comisión Antiviolencia había catalogado el partido como de 'alto riesgo', por lo que la Delegación del Gobierno en Madrid ha activado un dispositivo de seguridad integrado por 1587 efectivos. En este operativo participab 250 agentes de la Policía Nacional procedentes de la Unidad de Intervención Policial, la Unidad Especial de Caballería y la Brigada Provincial de Información, que vigilarán las zonas aledañas al estadio Santiago Bernabéu.

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Al despliegue de la Policía Nacional se unen además 70 agentes de la Policía Municipal de Madrid, 20 componentes del SAMUR-Protección Civil, tres del Cuerpo de Bomberos, 64 miembros de Cruz Roja y 1180 vigilantes y auxiliares de seguridad del propio club de fútbol.

La propia delegada de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, Inmaculada Sanz, ha hecho este mismo miércoles un llamamiento para que los aficionados del Liverpool se diviertan sin altercados. Esperan que, una vez pasado el encuentro, el 'simpa' haya sido el único susto de la jornada.