Primera comunicación oficial

Netanyahu y Zelenski dialogan sobre ayuda humanitaria y el peregrinaje de judíos a Ucrania

Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, el Gobierno ucraniano ha expresado en múltiples ocasiones su malestar con la postura de Israel

Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania.

Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania. / Archivo

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, mantuvo este jueves la primera comunicación oficial en ocho meses con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y le solicitó que ayude a facilitar la entrada de miles de judíos religiosos a Ucrania en su peregrinación anual este mes.

"Los dos líderes discutieron la continuación de la asistencia israelí a Ucrania, incluidos los refugiados ucranianos en Israel, así como la promoción de la asistencia al desarrollo de sistemas civiles de defensa antiaérea", informó la oficina de Netanyahu mediante un comunicado.

"El primer ministro Netanyahu también planteó la necesidad de hacer todo lo posible para garantizar la llegada de judíos a Uman este año con el fin de facilitar la libertad de culto", agregó el texto.

La mención de la peregrinación a la ciudad de ucraniana de Uman, que miles de judíos realizan año a año para festejar el Año Nuevo judío junto a la tumba del rabino Nachman de Breslev, llega tras una reciente polémica desatada por un aumento de las deportaciones de ucranianos que intentaron entrar a Israel durante los últimos meses con visado de turista.

Ante esto, el embajador de Ucrania en Israel, Yevgen Korniychuk, amenazó con bloquear el ingreso de israelíes al país europeo durante esta festividad en caso de que el Estado judío no revirtiera su política respecto al ingreso de ucranianos al país.

Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, el Gobierno ucraniano ha expresado en múltiples ocasiones su malestar con la postura de Israel.

El Gobierno israelí aportó ayuda humanitaria y equipamiento defensivo a Ucrania, pero no le proporcionó armamento ofensivo, como pedía Zelenski, en gran parte por no enemistarse con Rusia.

Moscú es un socio estratégico de Israel en el conflicto en Siria, donde Rusia respalda al Gobierno sirio de Bachar al Asad, y permite al Ejército israelí llevar a cabo ataques contra posiciones de milicianos de Irán o aliados de Teherán, principal enemigo del Estado judío en la región.