CRISIS SERBIA-KOSOVO

¿Qué está pasando entre Serbia y Kosovo?

Este domingo se ha producido una escalada de tensiones entre Serbia y Kosovo por la decisión del gobierno kosovar de prohibir los documentos y matrículas serbias 

La intervención de la OTAN ha provocado que Kosovo aplace la medida hasta el 1 de septiembre, calmando temporalmente las aguas

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Un guardia armado en la frontera entre Kosovo y Serbia

Un guardia armado en la frontera entre Kosovo y Serbia / X02 / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO

Héctor González

Héctor González

El historial de conflictos entre Serbia y Kosovo viene de antiguo. Más de dos décadas después de la cruenta guerra de Kosovo, las tensiones se han reavivado en la zona durante este fin de semana, llegando incluso a requerir la mediación de la OTAN, que ha avisado que intervendrá si es necesario para mantener la estabilidad en la región.

El motivo detrás del nuevo enfrentamiento es la prohibición de documentos y matrículas serbias en Kosovo por parte del gobierno autónomo de Pristina (capital de Kosovo), una decisión que no ha gustado nada a Serbia. Tras una escalada de tensiones a lo largo de la noche del domingo, finalmente Kosovo ha anunciado que pospone la aplicación de la medida un mes, hasta el 1 de septiembre.

¿Qué ha ocurrido este domingo entre Serbia y Kosovo?

En la medianoche de este domingo, apenas dos horas después de la entrada en vigor de la prohibición dictada por Kosovo de documentos y matrículas serbias dentro de su territorio, los serbios que se oponen a esta medida instalaron barricadas en las carreteras que llevan de la ciudad norteña de Mitrovica, donde hay una mayoría serbia, hacia los pasos fronterizos de Jarinje y Brnjak.

Por su parte, la Policía de Kosovo respondió cerrando los pasos fronterizos de Brnjak y Jarinje para el tráfico y desplegando sus patrullas en el norte de la región, donde se concentra la minoría serbia, según el comunicado policial recogido por la emisora kosovar RTK.

¿En qué consiste la medida dictada por Kosovo?

Kosovo anunció a finales de junio pasado que prohibiría desde el 1 de agosto el uso de documentos de identidad y matrículas de Serbia en su territorio, en una decisión similar a la que el pasado septiembre generó una crisis que implicó que los dos países aumentaran sus fuerzas de seguridad en la frontera.

Según las nuevas medidas, quienes entren en Kosovo con carnés de identidad emitidos por Serbia recibirán un documento temporal kosovar válido durante 90 días para su estancia en el país. Además, las matrículas de coches emitidas por Serbia para ciudades kosovares de mayoría de población serbia tendrán que ser sustituidas por las oficiales de Kosovo a partir del 1 de agosto y antes del 30 de septiembre.

No se trata de nada nuevo. La prohibición de circular en Kosovo con matrículas de Serbia ya provocó el pasado septiembre de 2021 cortes de carreteras por parte de la minoría serbia kosovar. Kosovo reaccionó desplegando fuerzas especiales, con blindados y armas automáticas, y Serbia elevó el nivel de alerta de sus tropas cerca de la frontera. Según el Gobierno de Serbia, el objetivo de Pristina con esta decisión es expulsar a los serbios del norte del país y desestabilizar la situación.

¿Cómo se ha resuelto la crisis?

A última hora del domingo, la Fuerza de la OTAN para Kosovo (KFOR) avisó de que "está preparada para intervenir" en el caso de que se ponga en peligro la estabilidad del norte de Kosovo. "La KFOR tomará todas las medidas necesarias para mantener un entorno seguro en Kosovo en todo momento, de acuerdo con su mandato de la ONU", informó a través de un comunicado en su cuenta de Twitter.

Tras la intervención de la OTAN, el gobierno de Kosovo ha anunciado que pospondrá un mes, hasta el 1 de septiembre, la entrada en vigor de la medida. Esta decisión ha puesto fin temporalmente a la escalada de tensiones, aunque no deja de ser una huida hacia delante de un problema que está lejos de resolverse.

El contexto histórico del conflicto Serbia- Kovoso

Serbia y Kosovo arrastran una relación tortuosa desde la década de los 90. Por aquel entonces, Serbia formaba parte de la República Federal de Yugoslavia, una exrepública soviética integrada por Serbia y Montenegro. Por su parte, Kosovo era una región serbia ubicada al suroeste del país, fronteriza con Albania, Montenegro y Macedonia, y habitada por una mayoría de etnia albanesa.

Mapa de Serbia y Kosovo.

Mapa de Serbia y Kosovo. / Open Street Maps

Entre finales de febrero de 1998 y el 11 de julio de 1999, las fuerzas yugoslavas y el grupo rebelde albanés de Kosovo, denominado Ejército de Liberación de Kosovo (ELK), se enfrentaron por el control de la región. Yugoslavia contó con el apoyo de la OTAN, mientras que el ejército de Albania apoyó a los nacionalistas kosovares. La guerra terminó con el Tratado de Kumanovo, por el que las fuerzas yugoslavas y serbias acordaron retirarse de Kosovo para dar paso a una presencia internacional.

En 2008, Kosovo proclamó de forma unilateral su independencia, que Serbia no reconoce, y que ha sido apoyada por Estados Unidos y la mayoría de los socios de la UE. Sin embargo, otros países como Rusia, China, India, Brasil o España, entre otros Estados, no reconocen a Kosovo como país. Desde 2011, los gobiernos de Serbia y Kosovo están inmersos en unas muy poco fructíferas negociaciones para formalizar su relación.