Yolanda Díaz celebra su resultado como una victoria y da por hecho que habrá Gobierno de coalición

Yolanda Díaz proclamó su salvación al filo de medianoche de este domingo al lunes. La candidata de Sumar afrontaba este domingo su examen decisivo, un todo o nada entre renovar su cargo en el Gobierno o pasar a la irrelevancia de la oposición y enfrentarse a un grupo parlamentario desestructurado. Los resultados de la noche electoral no dejaron una mayoría clara de Gobierno, pero Díaz celebró sus resultados como toda una victoria y dio por hecho que la coalición progresista se reeditaría. "A partir de mañana vamos a gobernar mejor", avanzó la vicepresidenta en funciones. "Hemos ganado derechos y nos comprometemos a seguir haciéndolo".

La candidata de Sumar dio un discurso al filo de medianoche, con la voz quebrada por momentos, en un ambiente marcadamente festivo y entre ovaciones y gritos de 'presidenta' de decenas de militantes del partido que se congregaban en la sede. "La esperanza venció al miedo", proclamó la candidata después de proclamar su victoria. "Hoy la gente va a dormir más tranquila. La democracia hoy ha ganado y sale fortalecida. ¡Hemos ganado!", clamó. Lo hizo rodeada por multitud de candidatos y líderes de los partidos de la coalición como Íñigo Errejón, Mónica García, Alberto Garzón o Ione Belarra, que acompañó con gesto serio la intervención de la gallega.

Todo o nada para Yolanda Díaz: ser vicepresidenta o verse atrapada en su propia coalición

En distintos momentos de su discurso, Díaz se comprometió a continuar la labor del Ejecutivo de coalición, asumiendo que continuaría al frente del país, y avanzó que este mismo lunes abriría conversaciones para lograr los acuerdos necesarios para ello. "Saben que hago de la política el diálogo", comenzó, "y a partir de mañana me pongo a dialogar con todas las formaciones progresistas y demócratas de nuestro país para garantizar el Gobierno en España".

Vítores y aplausos a Yolanda Díaz a su llegada a la sede de Sumar

Los resultados de la noche electoral no dejan un escenario claro, pero en Sumar se celebraron como un éxito, al verse con opciones revalidar la coalición y convertirse en decisivos, todo a expensas de Junts per Catalunya. La candidata de Sumar confirmó el camino que se abrirá en los próximos días, en un intento por reeditar la coalición.

ESCENARIO CAMBIANTE

En Sumar los ánimos cambiaron a lo largo de toda la noche. Antes de comenzar el escrutinio, el abatimiento se apoderó de las filas de la coalición en vista de las últimas encuestas publicadas antes de que comenzase el recuento y que pronosticaban la caída por debajo de la treintena de escaños y su paso a la irrelevancia. Pero los sondeos volvieron a fallar, y nada más comenzar el escrutinio los ánimos cambiaron rápidamente. Primero hacia una emoción contenida, cuando el PSOE sorprendió con su resistencia, para después volver a la cautela, cuando el PP se puso por delante, para desembocar finalmente en una celebración sin paliativos, bajo un argumento de peso: si puede haber un Gobierno progresista, todas las opciones pasan por Sumar. 

Feijóo gana pero se queda corto y Sánchez tiene la llave para intentar formar gobierno

La candidatura de Yolanda Díaz logró su objetivo de convertirse en los votos decisivos para reeditar un Ejecutivo de Pedro Sánchez, donde Yolanda Díaz ocuparía de nuevo la Vicepresidencia y se blindaría como líder de Sumar frente a una coalición nacida para la cita electoral, y donde Podemos amenazaba con una guerra civil en caso no cumplir objetivos.

Pero los objetivos se han visto cumplidos sólo en parte. El escenario de bloqueo deja el desenlace abierto y en manos del partido de Carles Puigdemont, una formación que consideran de derechas. Tampoco han visto cumplida su segunda meta: la de sorpassar a Vox para ocupar la tercera plaza. Ese hito se llegó a convertir en una obsesión durante la campaña electoral, pero finalmente no lo alcanzaron. Los de Santiago Abascal quedaron con 33 escaños, perdiendo 19, y seguidos muy de cerca por Yolanda Díaz, que logró 31 frente a los 35 de 2019. Esto no impidió las celebraciones en Sumar, cuyo papel dependerá ahora de las negociaciones que se abran para formar Gobierno.