"¿Cómo están los máquinas?"

Estas son las 7 revoluciones que trae la IA a la cocina

¿Recetas autogeneradas? ¿Diseños de restaurante a la carta? Consultamos con hosteleros, cocineros y expertos sobre lo que nos deparará la inteligencia artificial en el ámbito de la gastronomía

Hamburguesa gourmet generada por inteligencia artificial.

Hamburguesa gourmet generada por inteligencia artificial. / EPE

La relación amor-odio entre hombre y máquina lleva siglos entre nosotros. Desde los luditas, aquellos artesanos visionarios que en el siglo XIX la emprendían a palos contra todo tipo de ingenio mecánico hasta el androide T-800 de Terminator con el careto de Schwarzenegger… Por supuesto, desde que Internet apareció en nuestras vidas y se hizo omnipresente a través del móvil, ese vínculo no ha hecho más que estrecharse.

El último paso evolutivo ha sido la democratización de la inteligencia artificial (IA) a través de herramientas como ChatGPT o DALL-E2, que ofrecen descripciones e imágenes a la carta a petición del oyente. Las posibilidades son cuasi infinitas, también en el campo de la gastronomía. Hemos hablado con expertos, hosteleros y cocineros que ya están utilizando estas (y otras) aplicaciones y esta es la revolución que se nos viene encima en 7 puntos clave.

1. ChatGPT, mi pinche

Hace unas semanas el restaurante Can Pizza (con locales en Barcelona y Madrid) presento una pizza elaborada por inteligencia artificial. “Nosotros le pedimos que nos hiciera algo en base a cualquier ingrediente, pero también tomando en cuenta cuáles son las que más vendemos, en según franjas de edad, etc.”, explica Isaac Aliaga, uno de los propietarios. La primera propuesta no les convenció: “Lo que hacía era decirnos que le pusiéramos lomo, queso de cabra y cebolla caramelizada, pero no iba mucho con nuestra filosofía. Nos parecía demasiado comercial”, explica. Tras darle unas cuentas vueltas, llegaron a una receta con mozzarella, setas shiitake, sobrasada y parmesano, con un toque final de queso de cabra, piñones, miel y pesto de cilantro y lima. Es decir, la IA propone y, finalmente, el ser humano, dispone (al menos en este caso).

Pizza generada por IA de Can Pizza.

Pizza generada por IA de Can Pizza. / EPE

Aliaga agradece el trabajo de la máquina pero está convencido de que corresponde al cocinero mirar con ojos críticos la propuesta y reformularla. “La IA es muy fría y nosotros tenemos una parte romántica al abordar el trabajo: queremos que cada pizza tenga una parte artística y vinculada a recuerdos, emociones… ¡Al final, la máquina diseña pero no come y eso es un defecto!”.

2. Millones de recetas para el chef doméstico

Más allá de los límites del restaurante, la inteligencia artificial también puede convertirse en la versión ¿3.0? ¿4.0? ¿100.0? de la abuela que te chiva sus recetas. José Peláez, responsable de Innovación y Transformación Digital del centro tecnológico BCC Innovation, vinculado al Basque Culinary Center, explica que ya hay fabricantes de electrodomésticos que están incluyendo en sus dispositivos motores de recetas a partir de combinaciones de miles de ingredientes y que incluso van a ser capaces de proponer algo en función de lo que haya en la nevera (¿yogur caducado y medio limón incluidos? Habrá que verlo).

Eso sí, Peláez advierte de que “más allá de combinar ingredientes en función de su composición molecular, lo importante es que lo que la máquina proponga tenga un sentido organoléptico y que las texturas y sabores se adecuen a lo que uno espera sensorialmente y en base a su cultura”. Es decir, que si el robot IA de turno nos propone papilla de torreznos… pues igual decimos que no.

3. Una fenomenal herramienta de diseño 'low cost’

Arnaud Keres, del restaurante madrileño Nómada, no podía creer lo que estaba viendo. Estaba probando a crear unos ‘flyers’ para su local a través de inteligencia artificial y la propuesta artística de DALL-E2 le dejó boquiabierto. “A partir de los datos que le suministré fue capaz de hacer una cosa absolutamente moderna y espectacular”, explica. El resultado son una especie de cartas del tarot que parecen creadas por ilustradores de cómics de ciencia-ficción de los años 70.

'Flyers' generados por DALL-E2 para el restaurante Nómada (Madrid).

'Flyers' generados por DALL-E2 para el restaurante Nómada (Madrid). / EPE

Para Keres, tener un “diseñador” a tu servicio que, además, no cobra (ojo), puede suponer “un salto de calidad” para todos aquellos pequeños hosteleros que bastante tienen con sacar adelante el día a día de su negocio. “Imagínate que montas una marca y en una hora y media tienes listo el logo: es una solución perfecta para una empresa pequeña”, cuenta Aliaga. “Eso sí, esto puede hacer que los diseñadores se echen a temblar”.

4. Un ‘community manager’ automatizado

ChatGPT es capaz de escribirse una nota de prensa: “Para el lanzamiento de la pizza generada por IA lo hicimos a modo de prueba y, aunque hubo que corregir unas cuantas cosas, hizo un trabajo bastante digno”, cuenta Aliaga. Keres también cree que la inteligencia artificial es capaz de diseñar mensajes para redes sociales (en los que la profundidad nunca es demasiada, a decir verdad) con bastante soltura. Para Peláez, no cabe duda de que estas herramientas pueden convertirse en “generadoras de textos e imágenes para redes sociales, donde el ser humano pasará a ser una figura de revisión”.

5. Decoración, iluminación… ¡la IA se encarga!

Otro campo en el que la IA puede hacer viguerías: la decoración de espacios interiores. Hemos preguntado a Canva, una de los herramientas de diseño más conocida (y que estrena funcionalidad de IA, sobre su propuesta para “un restaurante de moda de cocina internacional” y los resultados nos han retrotraído hasta ejemplos (reales) que pueden verse en el barrio de Salamanca de Madrid o en el Eixample barcelonés. Para Peláez, más allá de ideas de decoración, es posible que la IA acabe derivando en “generadores de experiencias capaces de proponer iluminación, sonido, aromas y otras variables para evocar ciertas emociones, recuerdos, estados de ánimo... Ya hay empresas empezando a trabajar en esto, como Sony AI, aunque aún están en etapas de desarrollo muy tempranas”.

Propuesta para "restaurante de moda" generada por inteligencia artificial.

Propuesta para "restaurante de moda" generada por inteligencia artificial. / EPE

6. Los costes, ¡a raya”

En este caso, como decían Radio Futura, el futuro ya está aquí: si en algo se usaba la IA en hostelería hasta la explosión, hace apenas un par de meses),de las herramientas de creatividad era en supervisión de gastos, compra de ingredientes, control de mermas… “La mayor utilidad de la IA, a día de hoy, sigue estando en toma de decisiones de negocio, mejora de márgenes o ahorro de costes, generando pedidos de ingredientes en función de la demanda. En este terreno es donde es verdaderamente potente”, cuenta Peláez.

7. ¡Adiós, tareas repetitivas, adiós!

Finalmente, si en algo coinciden todos los entrevistados es en que probablemente el uso de la inteligencia artificial en gastronomía va a permitir borrar de golpe tareas rutinarias, aburridas y repetitivas, ya sea en el terreno de la gestión empresarial o en el de generación de recetas. Peláez es especialmente optimista: “La IA va a permitir a los profesionales del mundo de la gastronomía centrarse en idear, analizar, crear y materializar. Es decir, se ganará tiempo para desarrollar habilidades como el pensamiento crítico o la creatividad”. La rehumanización, por la vía de las máquinas.