TURISMO

Los alojamientos rurales rozan el 90% de ocupación para Nochevieja

El Pirineo aragonés, con las pistas de esquí a medio gas, se aproxima al lleno para el puente de fin de año

El alquiler de casas entre amigos es la gran opción, con un precio por persona que supera los 30 euros

Papá Noel se desliza por las pistas de esquí de Aramón.

Papá Noel se desliza por las pistas de esquí de Aramón. / ARAMÓN

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Judit Macarro

El calendario ha querido que este año Nochevieja y Año Nuevo caigan en puente y eso se deja notar en los alojamientos rurales de Aragón, que rozan el 90% de ocupación para estos días. En el caso del Pirineo, hay zonas que se aproximan al lleno a pesar de que las pistas de esquí funcionan a medio gas porque no están disponibles todos los kilómetros esquiables.

A pesar de ello, el Pirineo sigue siendo un atractivo para el puente de Nochevieja. «Muchas personas reservan con antelación para no quedarse sin alojamiento y, aunque no abran las pistas, mantienen su plan. Las zonas pirenaicas están ahora al 90%, indica Jesús Marco, presidente de Turismo Rural de Aragón (Faratur).

Parece claro que los aragoneses se van a mover y la opción de pasar la Nochevieja en una casa rural tiene mucha fuerza. Según un informe publicado esta semana por EscapadaRural, Aragón es la cuarta comunidad con más ocupación turística de España para el próximo puente de Nochevieja. «Tengo todo lleno y aún siguen llamando para preguntar. Es sin duda la fecha más demandada del año», señala Rosa Linares, propietaria de dos casas y cuatro apartamento en la comarca de Gúdar-Javalambre, en Teruel. Todo lo contrario ocurre estos días y también en Reyes, al ser «fechas más familiares» donde la gente se queda en casa. Aún así, en sus propiedades tiene una demanda del 50% desde el pasado viernes y hasta mañana.

Celebración con amigos

Javalambre abrió ayer sus pistas, aunque el turismo de montaña y los pueblos de alrededor son también un atractivo. «La mayoría de la gente no reserva con la intención de esquiar. Muchos de los clientes preguntan por recorridos y rutas en los pueblos de la zona», asegura Linares.

Otra zona de Aragón que también ha notado el tirón de las reservas para el puente de fin de año es el entorno de Sos del Rey Católico. «Nochevieja la tenemos ya con un 70% de ocupación», dice Felipe Díaz, presidente de la Asociación de Empresarios Turísticas de la zona.

En su mayoría, los clientes son «parejas o grupos de amigos que se animan a pasar la noche fuera de casa. Las familias tienden más a alquilar para la noche de Reyes, donde se juntan todos en busca de espacios más amplios para la celebración», explica Díaz.

Temporada alta

En la Comarca del Matarraña también esperan gran afluencia. En Valderrobres, el punto neurálgico de la zona, para la última noche del año amigos y familias ya han alquilado casas rurales. «O bien pasan la noche juntos o deciden pasarse por el cotillón que prepara el ayuntamiento», explica el alcalde del municipio, Carlos Boné. Este mismo fin de semana, muchas personas han llegado ya al Matarraña, «sobre todo familias que vienen a sus segundas residencias en la comarca», indica Boné.

Navidad es considerada como una de las temporadas altas del año, por lo que «desde hace días está todo lleno y algunos incluso siguen llamando para pedir habitaciones o casas completas», apunta el alcalde de Valderrobres. Muchos de los interesados «buscan la tranquilidad de la zona y poder hacer actividades deportivas, como senderismo», apunta Boné.

Ferrán Guardia tiene una casa rural en la Comarca del Sobrarbe. O Chardinet d’a Formiga está ubicada a 15 kilómetros de Aínsa y ya roza el 90% de reservas entre el 27 y 31 de diciembre. «Este año preguntan muchas parejas por habitaciones dobles, no son tantas las familias que reservan la casa completa», expone. De los que alquilan, en su mayoría son personas que quieren hacer senderismo «porque este año ha nevado muy poco y las rutas se pueden hacer muy bien», añade.

Variación de precios

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Alquilar una casa rural para Nochevieja ya es toda una tradición entre los jóvenes. «Ya desde hace años se ha convertido en una noche donde muchos deciden disfrutar con los amigos fuera de casa. Hay tanta demanda que en algunos alojamientos lo aprovechan para doblar los precios», explica Linares, desde Javalambre. 

El coste por noche y por persona, según el presidente de Faratur, suele oscilar de «los 30 euros para arriba, aunque depende de lo que reserve». Explica que, por ejemplo, «una casa de 300 euros la noche para 10 personas sale a 30 euros, pero una habitación doble de 50 euros la estancia sale a 25 euros por persona. Es una estimación con mucha variación», matiza.