ECONOMÍA RURAL

Mucho ruido, pero pocas competencias: así perciben las organizaciones agrarias la irrupción de Vox en los gobiernos regionales

La formación de Santiago Abascal gestiona las consejerías de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla y León, Aragón y la Comunidad Valenciana, y en Extremadura, la de Gestión Forestal y Mundo Rural, que tienen algunas competencias sobre el campo

El presidente de Vox, Santiago Abascal.

El presidente de Vox, Santiago Abascal.

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Guiños al campo. Muchos. Vox trató durante la última campaña electoral de capitalizar el descontento que hierve en el campo español, espoleado por la sequía que ha asolado las cosechas este año y las dificultades de un sector en declive por la falta de relevo generacional. Los agricultores han sido uno de los colectivos más damnificados por la escalada de precios del último año. Ante esta situación de deterioro, la formación de Santiago Abascal ha fijado su mirada en este sector y ha lanzado mensajes al mundo rural con la intención de representar su hartazgo. Uno de sus lemas para el 23J era: "Vota lo que importa: campo". El partido defendió en un encuentro con los agricultores antes de las elecciones generales que el sector primario ha sufrido "las políticas globalistas que emanan del cambio climático para imponer trabas e impuestos verdes al campo".

A pesar de que Vox perdió hasta 19 escaños tras el 23J, el partido sí que salió reforzado de los comicios del pasado 28 de mayo para acceder al gobierno de comunidades autónomas y ayuntamientos con el apoyo al Partido Popular. Vox ha conseguido hacerse hasta en cuatro comunidades con consejerías que tienen competencias para gestionar agricultura. La formación de Santiago Abascal gestiona desde hace un año y medio la consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla y León. Y recientemente han asumido la consejería de Agricultura en Aragón y la de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comunidad Valenciana. En Extremadura el partido consigue la consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural, con algunas competencias sobre el campo.

Pese al deseo de Vox de capitalizar la representación del mundo rural y el apoyo que han conseguido de los agricultores, los representantes de algunas organizaciones agrarias consultados por ‘Activos’ señalan que gran parte de la política agraria viene marcada por las directrices de Bruselas a través de la Política Agraria Común y se muestran escépticos respecto a los cambios que puedan introducir el partido. Un ejemplo de ello fue el pulso que mantuvo la Junta de Castilla y León con el Gobierno y la Unión Europea para flexibilizar la normativa de la tuberculosis bovina y cambiar los protocolos de actuación. "En nuestra opinión se quedaron muy cortos al plantear una alternativa y nos hubiera gustado que se hubiera hecho más. No se ha trabajado suficientemente en Bruselas", resume Jesús Manuel González Palacín, coordinador general de la agrupación Unión de Campesinos de Castilla y León, aunque reconoce que el consejero de Agricultura de Vox, Gerardo Dueñas, está a favor de cambiar la legislación marcada por la Unión Europea. "En términos generales, ha sido una administración muy continuista y en línea con lo que viene marcado por Europa", resume González Palacín.

Donaciano Dujo, presidente de Asaja (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores) en Castilla y León, apunta a la falta de interlocución con la nueva administración de la consejería de Agricultura de la región. "El consejero se ha reunido menos veces con nosotros y ha disminuido el intercambio que teníamos con las autoridades respecto a otras legislaturas", asegura, algo que comparte, en parte, Palacín. "La interlocución siempre es mejorable", indica. Respecto a la tuberculosis bovina, Dujo admite que Castilla y León es de las regiones más afectadas y apuesta por la puesta en marcha de medidas para evitar que los ganaderos se vean perjudicados económicamente por el sacrificio de las vacas afectadas por la enfermedad. "Hay que controlar mejor a la fauna salvaje", explica.

Postura dialogante

Gracias al acuerdo de Gobierno en la Comunidad Valenciana con el Partido Popular suscrito el pasado junio, Vox ha podido hacerse con la vicepresidencia primera con la cartera de Cultura y dos consejerías en el Ejecutivo valenciano. Una de ellas es Agricultura. Esta consejería incluye competencias en ganadería, pesca o alimentación y se ha separado de Medio Ambiente y Agua, que han sido asumidas por el Partido Popular.

El nuevo titular de la cartera es el ingeniero agrícola José Luis Aguirre. "El nuevo conseller ya nos ha adelantado que tratará de llegar a acuerdos. Nos ha trasladado que tratará de ampliar los presupuestos destinados al campo y que se tratarán de modernizar las infraestructuras", señalan fuentes de Avasaja, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de la Comunidad Valenciana, que también apuntan a que el equipo de la consejería se ha conformado con perfiles "muy técnicos".

Otra de las asociaciones agrarias regionales, la Unió Llauradora ha denunciado el retraso en nombrar a los nuevos altos cargos de la consejerúa de Agricultura, Ganadería y Pesca dos meses después de las elecciones y tres semanas después de la toma de posesión de José Luis Aguirre.

Una política de continuidad para Aragón

El último de los pactos regionales entre Partido Popular y Vox se ha producido en Aragón. En esta comunidad autónoma el partido de Santiago Abascal ha hecho presidente al popular Jorge Azcón a cambio de la vicepresidencia de la región y la cartera de Desarrollo Rural, Despoblación y Justicia y la consejería de Agricultura, Ganadería y Alimentación. El titular agrario será Ángel Samper. "El nuevo consejero ha sido responsable de Asaja en Aragón durante mucho tiempo. Esperamos que haya continuidad. Esperamos que la interacción sea fluida y no esperamos grandes cambios ni volantazos", asegura Marcos Garcés, responsable de la Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA), una de las mayores asociaciones de la comunidad autónoma.

Una de las claves que señala Garcés es que la mayor parte de las ayudas de la PAC para Aragón ya se han aprobado para esta legislatura y no es posible introducir ya grandes cambios. "Es una consejería con pocos recursos propios y poco margen de maniobra. Y, una vez organizada la PAC, será relativamente fácil de llevar a pesar de todas las incertidumbres que acechan al campo, de la sequía a la regulación europea", señala Garcés.

Competencias muy limitadas en Extremadura

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En el caso de Extremadura, el acuerdo que ha permitido a la popular María Guardiola asumir la presidencia de la comunidad autónoma implica que Vox se haya quedado con la consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural. Esta institución tiene algunas competencias sobre agricultura, aunque el grueso de la política agraria se ha quedado en la consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, que dirigirá el Partido Popular.

"Hemos tenido algunas reuniones con los responsables de la nueva consejería de Mundo Rural, pero tienen muy pocas competencias sobre agricultura y ganadería. Están centrados en temas forestales esencialmente. Y luego tienen algunas competencias sobre los regadíos, aunque no sobre las parcelas", indica Juan Metidieri, el presidente de Apag Extremadura Asaja. "Nos han transmitido que apoyarán al sector, aunque creo que su gestión va a tener poca relevancia para nosotros y les pediría más concreción en las medidas que proponen", explica Metidieri. Según apunta este representante las principales necesidades del campo en Extremadura pasan por desburocratizar la actividad agraria e incorporar a más jóvenes al campo y al mundo rural.